¡Admisión de culpa! Militares reconocen asesinatos por falsos positivos en gestión de Álvaro Uribe Vélez (Ver videos)

«Había una presión, nos exigían dar resultados, había que buscar resultados como fuera y teníamos contacto con grupos de paramilitares de la región», confesó uno de los oficiales colombianos retirados. Foto Internet

VEA / Yuleidys Hernández Toledo

Un grupo de 11 militares retirados en Colombia, reconocieron que protagonizaron falsos positivos; es decir, asesinaron a civiles colombianos y los hicieron pasar por guerrilleros. Las acciones extrajudiciales las ejecutaron durante el segundo mandato del expresidente ultraderechista Álvaro Uribe (2006-2010).

Las confesiones de sus crímenes las hicieron en medio de una inédita audiencia de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), celebrada en Ocaña, en el departamento de Norte de Santander. En la comparecencia que inició el martes 26 de abril y que continúa este miércoles, los uniformados confesaron en público su responsabilidad por la desaparición y posterior asesinato de 120 jóvenes, campesinos, trabajadores, en su mayoría personas humildes.

Entre los que comparecieron se encuentran el general (r) Paulino Coronado, el coronel (r) Santiago Herrera, el coronel (r) Rubén Darío Castro, el teniente coronel (r) Álvaro Diego Tamayo, el teniente coronel (r) Gabriel de Jesús Rincón Amado, y el mayor (r) Juan Carlos Chaparro Chaparro. Además estuvieron presentes el capitán (r) Daladier Rivera Jácome, el sargento segundo (r) Rafael Antonio Urbano, el sargento segundo (r) Mauricio Pérez Contreras, el cabo primero (r) Néstor Guillermo Gutiérrez, y Alexander Carretero (tercero civil), enumera la JEP en su cuenta Twitter.

Es la primera vez que antiguos miembros de las fuerzas militares se dirigen a las víctimas ofreciendo respuestas detalladas, señaló la magistrada de la JEP, Catalina Díaz. De acuerdo con la JEP, al menos 6.402 civiles fueron asesinados en el marco de los falsos positivos.

Los 11 comparecientes entregarán su versión en el Caso 03 – subcaso Catatumbo, reconocerán ante la justicia, las víctimas y el país, su responsabilidad por los hechos y crímenes que cometieron y que fueron esclarecidos por la JEP.

Este organismo estableció que el asesinato de civiles y su presentación como falsas bajas en combate, por parte de los miembros de la BRIM15 y del BISAN durante los años 2007 y 2008, constituyó un patrón de macrocriminalidad en el Catatumbo.

«La estigmatización de los habitantes del Catatumbo contribuyó a la comisión de los crímenes. El resarcimiento a las víctimas pasa, como ellas mismas nos lo han advertido, por el restablecimiento de su buen nombre”, manifestó la magistrada Catalina Díaz, al inicio de la diligencia», cita la JEP en su cuenta Twitter.

«Lo asesiné»

El cabo primero Néstor Guillermo Gutiérrez Salazar, reconoció ante las víctimas y la audiencia en general, su participación en el asesinato de jóvenes y campesinos, presentados como muertos en combate en el Catatumbo, dentro de una estrategia del Ejército Nacional para presentar resultados.

“Yo reconozco mi responsabilidad a título de coautor de crímenes de guerra y lesa humanidad (…). No voy a justificar lo que hice porque cometí delitos”, manifestó al comienzo de su intervención

«Había una presión, nos exigían dar resultados, había que buscar resultados como fuera y teníamos contacto con grupos paramilitares de la región, sobre todo de Aguachica, para conseguir armas», confesó.

“Recuerdo el caso específico de Wilfrido Quintero Chona; lo retuvimos en un bar (…) Lo encerramos y lo sacamos con mentiras; le dije que íbamos a la estación de Policía de Guamalito (…) Llegamos a Guamalito, volteó y lo asesiné. Los soldados disparaban hacia el monte y reportamos un supuesto combate. Le coloqué un arma que me habían enviado los paramilitares; cuando yo le pongo el arma en las manos, veo una mano llena de callos de un campesino trabajador; no pensábamos en el daño que estábamos haciendo», admitió.

El oficial retirado habló directamente a Sandra Barbosa, familiar de una de las víctimas mortales: «Javier Peñuela era un campesino que se levantaba a las 5:00 am a trabajar, y su pecado fue ir con un dolor de muela a pedir que se la sacaran (…) «Ya María Eugenia Ballena lo había incluido en la lista (…). Ella me dijo que Javier Peñuela había bajado al pueblo en una bicicleta. Fue el Ejército y lo sacó a la fuerza».

Pidió perdón a los familiares por los asesinatos que cometió. “Asesiné cobardemente, les arrebaté la ilusión a sus hijos, les desgarré el corazón a sus madres por una presión de unos falsos resultados, por tener contento a un gobierno. No es justo, no es justo”.

Falsos documentos

Tras la intervención de Villamir Rodríguez, sobreviviente del Ejército, el mayor Daladier Rivera Jácome confesó la agresión que cometieron contra el campesino.

“Acudo con el fin de reconocer mi responsabilidad como máximo responsable a título de coautor por crímenes de guerra y de lesa humanidad. Me declaro responsable frente a los hechos y lo que me imputa la JEP”. expresó, cita el organismo en su cuenta Twitter.

“Soy responsable de que usted estuviera detenido. Yo elaboré falsos documentos de inteligencia que puse a disposición de la Fiscalía”, le dijo el capitán (r) tras reconocer que pagaron para que desmovilizados declararan en su contra, agregó.

«Asesinamos personas de bien«

El mayor (r) Juan Carlos Chaparro Chaparro pidió «perdón por las actividades atroces que cometí, encubrí y que tapé”. “Me arrepiento de corazón de haber mancillado el nombre de ustedes y quiero que sepan que esos asesinatos que realizó el Batallón de Infantería Francisco de Paula Santander, cuando fui oficial de Operaciones, eran personas de bien. Eran campesinos”, agregó, cita la JEP en su cuenta Twitter.

Una banda criminal en el Ejército

“Vengo a reconocer que siendo jefe de Estado Mayor de la BRIM15, existió una banda criminal al interior de la Brigada de la cual tuve conocimiento, que no denuncié ni investigué”, empezó diciendo el coronel (r) Rubén Darío Castro Gómez, durante su intervención, cita la JEP.

“Esto sucedió de acuerdo a las políticas del comandante del Ejército. La exigencia siempre fue repetitiva y en los diferentes escalones de mando. Durante el año 2008 siendo comandante de la Brigada, esta banda criminal se mantuvo”, agregó.

Patrón criminal

El coronel (r) Santiago Herrera, confesó que mientras ejercía ese cargo (comandante) «operó al interior de la Brigada móvil 15 una estructura criminal de facto”. “Este lamentable pacto criminal fue conformándose por algunos de los miembros de la unidad militar bajo mi mando (…), a medida que yo iba presionando a mis subalternos para que obtuvieran los resultados en términos de bajas en combate a como diera lugar”, agregó, cita la JEP.

Las víctimas

En la audiencia estuvieron presente los familiares de las víctimas del Ejército colombiano. Indicó la JEP que al auditorio Jorge Pacheco Quintero, de la Universidad Francisco de Paula Santander, en Ocaña, asistieron 61 víctimas.

Una de las primeras en tomar la palabra fue Eduvina Becerra, campesina de la Serranía del Perijá, quien desde hace más 14 años busca verdad y justicia por el asesinato de su compañero Jorge Eliécer Ortega.

“Queremos que hoy, ante este público y ante el mundo y nuestro país, digan que nuestros familiares no eran ningunos combatientes o guerrilleros. Esperamos que todo esto se aclare (…) Pedimos verdad y garantías de no repetición a lo que se viene haciendo con nuestros hermanos colombianos (…), que el gobierno no encubra más estos crimines que se están dando”, expresó.

«¿Se vistieron uniforme para asesinar campesinos humildes? ¿Cuántos eran los beneficios que daba el Estado para matar a un civil? (…) Reparen la verdad, que haya justicia y que nuestro nombre no quede manchado», dijo a los exmilitares Antonio María Peña, familiar de un asesinado.

Por su parte, Álvaro Marulanda, un abogado que desde hace 14 años está en la búsqueda de verdad, justicia y buen nombre de su hermano Martín Marulanda Calixto, manifestó: “Mi hermano era un paciente psiquiátrico”.

“Ustedes son un deshonor para la patria y el Ejército Nacional”, les dijo Álvaro Marulanda. Oficiales en retiro, no tengan miedo de destapar esta empresa criminal (…)”, concluyó.

Sobreviviente pregunta por qué

Villamir Rodríguez es la única víctima sobreviviente del caso. A través de un video, él contó qué fue lo que vivió y le preguntó a los y a los comparecientes: «¿por qué iban a hacer ese ‘falso positivo’ conmigo? Que se pongan la mano en el corazón”.