Néstor Rivero Pérez

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El 20 de septiembre de 1984 la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep), cuyo titular era el escritor Ernesto Sábato, hizo entrega al presidente de Argentina, Raúl Alfonsín, del Informe Final acerca de los casos de personas identificadas como capturadas -pero de cuya existencia no había evidencia al momento del informe-, correspondientes al lapso de la Junta Militar que ejerció el poder entre 1976 y 1983 contabilizando, la Conadep, en 1984, unos 8.971 casos cuyo paradero, o si se mantenían con vida, nunca pudo ser determinado. En todo caso, las cifras iniciales del informe, que ha pasado a la historia con el título “Nunca más”, han sido engrosadas con nuevos casos de víctimas. Algunas versiones sugieren hasta 30 mil desaparecidos.

Reorganización nacional

Tal nombre fue dado al proceso político que desde el 24 de marzo de 1976 comenzó a vivirse en la nación rioplatense. La Junta de Reorganización Nacional, integrada por los comandantes en jefe del Ejército, Armada y Aviación, encabezada por Jorge Rafael Videla, adelantó ejecutorias de persecución a los militantes de la izquierda en su país, insertas en los cánones de la Guerra Fría. Formados en las doctrinas de Seguridad Nacional y contención interior que se impartía a militares latinoamericanos en la Escuela de las Américas de Panamá y en cursos de West Point, tanto Videla, como Emilio Masera y Orlando Agosti, se propusieron contener la efervescencia social y política que surgió en Argentina desde 1973, tras el regreso al poder del Justicialismo.

“Triple A”

De las movilizaciones surgidas en torno a la figura del general Perón, se desprendieron nucleamientos con fuerte arraigo en jóvenes, sectores medios y del proletariado urbano, cuyas acciones buscaban la radicalización de las reformas sociales del peronismo. A ello se aunaba el fervor revolucionario de corrientes como el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), seguidora del marxismo. Habiendo fallecido el general Perón en 1974, la presidencia de Argentina fue asumida por su viuda y vicepresidenta María Estela Martínez de Perón, sobre quien ejercía gran ascendiente el ministro de Bienestar Social, José López Rega (El Brujo). Este último encabezaba una corriente conservadora del peronismo, al punto de crear la Alianza Anticomunista Argentina (“AAA”), destinada a liquidar a los líderes de organizaciones revolucionarias.

La Junta Militar

Así, a los dos años de su administración María Estela Martínez será depuesta por las Fuerzas Armadas bajo alegato de su incapacidad para resguardar el orden. Empero lo que comienza de inmediato es una política de feroz persecución, tortura y desaparición, en contra de la izquierda en un grado que no ha tenido parangón en la historia del continente. La Junta argüía que sus actuaciones constituían una “guerra justa” contra la subversión de valores en la sociedad argentina, con la pretensión de expurgar -al modo de quien persigue bacterias-, cualquier inquietud, inclinación o ideas de corte socialista o revolucionario.

“Nunca más”

Tras su desastroso desempeño en la Guerra de las Malvinas de 1982, la Junta Militar convoca a elecciones, resultando, como presidente de la República, Raúl Alfonsín, el candidato del Partido Radical. Este último, ya investido del cargo y atendiendo el clamor de la opinión pública, creó la Comisión Nacional Sobre Desaparición de Personas. Y aún sometida a presiones castrenses, la Conadep identificó más de ocho mil casos en su informe publicado en 1984.

Más desaparecidos

Sin embargo, en 2006, durante la gestión de Néstor Kirchner se haría una nueva edición del Informe con gran cantidad de casos nuevos y cuyo prólogo perfila críticamente el contexto de la represión 1976-1983, al aclarar que en dicho lapso se practicó el Terrorismo de Estado, no un combate entre “dos demonios simétricos”, como se sugiere en la primera edición: en tanto que una de las partes disponía de la institucionalidad, órdenes de captura y centros clandestinos de detención, la otra se enfrentaba desde un campo civil, aunque fuese armado.

Sinóptico

1519

1er viaje de circunnavegación

Zarpa, este día, de Sanlúcar de Barrameda (España) el primer viaje marítimo alrededor del mundo al mando de Hernando de Magallanes, tocando el 13 de diciembre de ese año en la bahía de Río de Janeiro. Prosiguiendo su itinerario Magallanes da, el 27, con la boca del Río de la Plata.

Cada bahía, laguna o corriente fluvial de cierta proporción con que se topaba, le hacía detenerse, enviando avanzadas para verificar si daban con la salida al Pacífico.

Ya desde 1494-1495, los europeos tenían información, por los aborígenes, de la existencia de un inmenso mar en la playa occidental del Nuevo Mundo.

Será el 21 de octubre de 1521 cuando Magallanes, en medio del júbilo de la tripulación, se adentre al Estrecho que hoy honra su nombre, para encontrar, siete días después, el 28 de diciembre de este último año, la salida hacia el océano Pacífico.

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