Desarrollo con ética y cuidado del medio ambiente
La autora es Presidenta de Fundalatin.
Foto de Internet
Eugenia Russian
Fundalatin@gmailcom
La Organización de Naciones Unidas en 1972, consciente de que la protección y el mejoramiento del medio humano es una cuestión fundamental que afecta al bienestar de los pueblos y al desarrollo económico del mundo entero, designó el 5 de junio Día Mundial del Medio Ambiente. Su lema este año se centra en la restauración de las tierras, la resiliencia a la sequía y la desertificación, bajo el lema «Nuestras tierras. Nuestro futuro.” Somos la Generación Restauración.
Desde la diplomacia de los pueblos, comunidades de buena voluntad suman esfuerzos para enfrentar los peligros que corre la humanidad, sometida a criterios de grandes potencias supuestamente “desarrolladas” que pretenden dirigir el destino humano con base en el máximo lucro al mínimo costo y a la mayor competencia, apoyados en la fuerza de grandes recursos informáticos, militares y financieros. En desmedro sobre los derechos de los débiles y de Madre Tierra. Asignando grandes recursos a consorcios belicistas productores de armas, para según ellos, cuidar su seguridad.
Leonardo Boff plantea: Somos parte de la naturaleza y la Tierra está viva y se comporta como un superorganismo vivo, auto-regulado. El ser humano es parte de la naturaleza y aquella porción de la Tierra que en un proceso de altísima complejidad comenzó a sentir, a pensar, a amar y a venerar. Nuestra misión es cuidar de este gran Ethos (en griego significa casa) que es la Casa Común. Somos el frater (hermano) de todos.
Lentamente vamos tomando conciencia de que somos naturaleza y que defender significa defendernos a nosotros mismos y a nuestra propia vida, una verdadera mística que nos anima a contribuir con la naturaleza para asumir nuestras responsabilidades ante el futuro de la vida.
