Diego Cartaya se incorporó a entrenamientos de Tiburones
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VEA/ Irving Guanipa Ojeda
Considerado uno de los 16 mejores prospectos de los Dodgers de Los Ángeles en las Grandes Ligas, el joven receptor Diego Cartaya se unió este martes a los entrenamientos de los actuales campeones de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) y de la Serie del Caribe 2024, para su participación con los litoralenses desde el comienzo de la temporada del circuito rentado a iniciarse este viernes en el Estadio Universitario de la UCV, en Los Chaguaramos.
El joven careta nacido en Maracay, estado Aragua, de 23 años de edad, es uno de esos jugadores que llegó al beisbol organizado de Estados Unidos luego de firmar por un bono superior al millón de dólares, que en las Ligas Menores ha demostrado poseer los recursos necesarios para sobresalir en la pelota rentada.
Cartaya ha podido demostrar en las granjas de los Dodgers de Los Ángeles que cuenta con un talento excepcional para cubrir la exigente posición número 2 del diamante, como lo es la receptoría. También posee potencia al bate, por lo que se le considera entre el selecto grupo de los mejores prospectos de todo el beisbol .
El gran poder con el madero lo identifica como buen toletero
Durante la temporada del presente año en las Menores se mantuvo en las categorías AA y AAA al conectar 76 incogibles, de los cuales 11 fueron cuadrangulares en un total de 344 visitas a la goma para dejar promedio de 221 puntos, aspecto que parece ser su talón de Aquiles, pero su poder y capacidad para remolcar a sus compañeros en las bases lo han hecho «figura apetecible para cualquier organización».
Su sólida defensa detrás del home y su poder ocasional le permitirán convertirse en uno de los jugadores preferidos de la afición de los escualos durante la campaña.
Su proceso de desarrollo podría tener un elevado balance en sus intensiones de llegar a las Mayores por cuanto mejorar su bajo promedio con el madero y la contundencia que posee con él seguramente serán factores que un manager de la calidad y conocimientos, como las que posee Oswaldo Guillén, con toda seguridad buscará mejorar para cumplir la misión y ver más temprano que tarde a Diego Cartaya, convertido en todo un bigleaguer.