Néstor Rivero Pérez

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El 26 de enero de cada año, organizaciones y comunidades educativas de distintos países celebran el Día Mundial de la Educación Ambiental, con el objetivo de que se fortalezca la valoración y compromiso de la población en su relación con el hábitat y la naturaleza, en lo que respecta al uso y consumo de sus recursos.

 

Algo de historia

La idea de hacer conexión entre ambiente y educación tiene su antecedente más directo en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano, celebrada en 1971 y en la Carta de Belgrado (Serbia) del año siguiente, donde se acordó recomendar a los gobiernos, que diesen impulso a la creación de conciencia colectiva en torno a la problemática ambiental, así como la formación de competencias y estrategias encaminadas a la reorientación de actitudes y hábitos en el seno de las sociedades. Luego, en 1977, tiene lugar la Conferencia de Tbilisi, capital de Georgia, donde se acuerdan 41 recomendaciones, solicitando que se involucre a la población mundial, adultos y niños, en los procesos de aprendizaje sobre el medio ambiente. Ya en 1971 la Unesco propugnaba porque se proporcionasen los conocimientos necesarios para la conservación de la biosfera, en pos del “mejoramiento de la relación entre hombre y ambiente, así como predecir las consecuencias de las acciones de hoy sobre el mundo del mañana”.

Otras efemérides

En el curso de los años ’70 del siglo XX,  la Asamblea General de la ONU, Unesco y otras instituciones de Estado, comenzaron a establecer un conjunto de días internacionales o efemérides, que perseguían reivindicar la protección del medio ambiente. E igualmente, desde entonces, organizaciones civiles domiciliadas en distintos países, iniciaron campañas por la inserción de procesos como el reciclaje, el uso de energías alternativas y nuevas opciones para el consumo de bienes masivos de distinta índole y a los cuales se consagra de modo coordinado en los distintos territorios, un “Día Mundial”. Y entre las fechas y celebraciones aprobadas por la ONU o la Unesco y que se suman a la agenda vinculante de los gobiernos de los Estados miembros, destacan el 2 de febrero, Día de los Humedales; 22 de marzo, Día Mundial del Agua; 22 de abril, Día Mundial de la Tierra; 5 de junio, Día Mundial del Ambiente; 28 de junio, Día Mundial del Árbol y, entre muchos otros más, el 29 de diciembre, Día Internacional de la Diversidad Biológica.

Leyes, escuela y ambiente en Venezuela

En el caso de la República Bolivariana de Venezuela, la legislación que tutela el ambiente irradia en distintos campos de la actividad humana, partiendo de la vigente Constitución de 1999, cuyo artículo 107 consagra el mandato según el cual “La educación ambiental es obligatoria en los niveles y modalidades del sistema educativo, así como también en la educación ciudadana no formal”. Y tan desde mediados de los años ’70, regía la Ley del Ambiente, y en los años ’90, estaba incorporada en el arco normativo venezolano, la Ley Penal del Ambiente. Y en lo tocante al sistema educativo, la Ley Orgánica aprobada en 2009, consagra en su artículo 14 la obligatoriedad de la Educación Ambiental. Asimismo el artículo 15 ejusdem reafirma lo anterior al enunciar como uno de los fines de la educación, formar “una conciencia ecológica para preservar la biodiversidad y la sociodiversidad, las condiciones ambientales y el aprovechamiento racional de los recursos naturales”.

Hombre y medio

El moderno pensamiento ecologista concibe al homo sapiens como creación y creador del medio del que forma parte. Entorno, naturaleza o medio, constituyen términos que identifican la realidad en la que actúan los seres humanos, asumiéndose como protagonistas y amos respecto al entorno. En todo caso, la interactuación es innegable entre uno y otro; la persona humana, modificando la naturaleza, construyendo ciudades y extrayendo del medio  sus recursos para obtener mayor confort. Y al paso de los últimos doscientos años, la revolución industrial y la dinámica de impactos sobre dicho contexto y que de ella se desprendió, comienza a reclamar nuevas formas de relacionamiento por parte de los grupos humanos.

Sinóptico

1901

Nació Mariano Picón Salas

Este día nació en la ciudad de Mérida, el escritor Mariano Picón Salas, cuya estilística literaria le acredita como el más notable prosista de la Venezuela del siglo XX. Entre sus libros destacan De la Conquisla a la Independencia, Comprensión de Venezuela y Viaje al amanecer.

Fue diplomático, profesor universitario, periodista y mentor político. Dotado de un talento excepcional para la escritura, Picón Salas perteneció a la generación de letrados que vivió y pensó la transición entre la Venezuela de los últimos grandes caudillos y la entronización de la era petrolera, con todas las distorsiones que esta significó respecto al sistema de ciudades y economía de servicio que se enseñoreó a lo ancho del territorio nacional.

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