¡Ejemplo para el mundo! Así ha sido la lucha en Venezuela contra el Covid-19 desde hace un año (Paso a paso)

VEA / Yuleidys Hernández Toledo

*Gran parte de la investigación que se presenta a continuación fue tomada del libro Venezuela siempre grande, autoría de la periodista Yuleidys Hernández Toledo, y cuyo PDF fue publicado el 27 de febrero de este 2021.

Este viernes 12 de marzo se cumple un año del día en que el Jefe de Estado, Nicolás Maduro, declaró el Estado de Alarma por la Pandemia del Covid-19. Aquí te recordamos como ha sido la lucha del Gobierno nacional contra el virus y porque se ha convertido un ejemplo para el mundo.

En diciembre de 2019 la historia del mundo cambiaría para siempre con la aparición de un virus mortal que causaría millones de personas contagiadas y de muertes.

Fue el 31 de diciembre de ese año cuando el gobierno de China informó a la Organización Mundial de la Salud (OMS), sobre «varios casos de neumonía de etiología desconocida (causa desconocida) detectados en la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei», citaba Russia Today.

Dos meses después el virus ya se había propagado a diversos países. En enero y febrero de 2020 el brote aún no llegaba a Venezuela. La nación ve con aprobación como el Gobierno nacional liderado por el jefe de Estado Nicolás Maduro, comienza a tomar acciones preventivas contra la enfermedad.

Ya para enero de 2020 Venezuela refuerza el trabajo del Sistema de Vigilancia Epidemiológica, siguiendo los lineamientos recomendados por la OMS, en puertos, aeropuertos y personal de Salud.

Ese mismo mes, el Ministerio del Poder Popular para la Salud comienza a emitir una serie de recomendaciones generales y de protección personal, en donde destaca el lavado de manos y la desinfección.

Para el 11 de febrero de 2020, luego de ratificar que no hay casos de coronavirus en el país, el ministro del Poder Popular para la Salud, Carlos Alvarado, manifestaba que la nación contaba con todos los kits de reactivos necesarios para el diagnóstico y tratamiento de este virus. Precisaba en ese entonces que los mismos los había aportado la Organización Panamericana de la Salud (OPS), reseñaba https://eldiariovea.home.blog/.

El 28 de febrero de 2020, cuando aún el virus no había llegado al país, el presidente Nicolás Maduro, en cadena nacional de radio y televisión, activó la Comisión Presidencial para la Prevención y el Control del Covid-19, dirigida por la vicepresidenta ejecutiva de la República, Delcy Eloína Rodríguez Gómez, y conformada por médicos y científicos venezolanos.

El 11 de marzo de 2020 la OMS declara pandemia por la enfermedad del Covid-19. Un día después Maduro anunció nuevas medidas para prevenir la llegada del coronavirus, entre ellas, suspendió hasta por un mes los vuelos provenientes de Europa y Colombia. Asimismo prohibió la realización de actos masivos.

“He decidido declarar al sistema de salud en emergencia permanente para la prevención, para la protección y para prepararlos plenamente en todas sus capacidades para atender los casos que en algún momento sean detectados”, anunció ese día desde las afueras del Palacio de Miraflores, Caracas, rodeado de parte del tren ejecutivo y el Alto Mando Militar.

También dijo que estaba llegando el apoyo de China con los equipos y los kits de pruebas diagnósticas.  Señaló que el Gobierno nacional hacía esfuerzos para coordinar con la Administración de la república de Colombia, para acordonar toda la frontera, dado que en el vecino país ya se habían registrado casos.

Ya para ese momento, el Gobierno nacional contaba con camas y hospitales habilitados para atender a pacientes con Covid-19, estructura que se iría fortaleciendo a lo largo de la pandemia hasta llegar a tener habilitados más de 58 hospitales centinelas especializados en coronavirus, 400 Centros de Diagnóstico Integral (CDI) para la hospitalización de los pacientes, y un sinnúmero de hospitales instalados de manera convaleciente en hoteles del país, como destacó el 12 de enero de 2021 Maduro, al presentar su memoria y cuenta ante la Asamblea Nacional (AN).

El 12 de marzo de 2020, Maduro denunciaba que “salimos a comprar pruebas diagnósticas para el coronavirus en el mundo, y las empresas privadas internacionales dijeron que estaban amenazadas por sanciones criminales por el gobierno de Estados Unidos”. Agregaba: “Nos cuesta el triple salir a buscar los test, pero los hemos conseguido para tener suficiente en esta etapa y seguimos buscando para tener suficientes pruebas diagnósticas para las etapas sucesivas que puedan venir”.

Llegada de los primeros casos

Venezuela sabía que en algún momento el virus iba a llegar. El 13 de marzo de 2020 ocurrió lo inevitable. Ese día la vicepresidenta Delcy Rodríguez dio a conocer en declaraciones a la prensa sobre los dos primeros casos del virus en el país. Se trataba de dos ciudadanos venezolanos, una mujer de 41 años que había viajado por España, Italia y Estados Unidos, y un hombre de 52 años quien estuvo de viaje por España, ambos residenciados en el estado Miranda. Llegaron en el vuelo 6673 de Iberia del 5 y 8 de ese mes, respectivamente.

Tras dar a conocer la noticia, Rodríguez, a nombre del Gobierno nacional, ordenó el uso obligatorio de mascarilla en el Metro, trenes y ferrocarriles, y las mandó a usar en las unidades de transporte público. También anunció la suspensión de clases.

De esta forma Venezuela se convertía quizás en el primer país donde las autoridades nacionales promovían el uso del tapaboca, en un momento donde su usabilidad aún era discutida por la OMS.

Ese mismo 13 de marzo en horas de la noche, el presidente Nicolás Maduro firmó el Decreto de Estado de Alarma Constitucional, invocado en el artículo 338 de la Constitución, sobre los estados de excepción, en virtud de proteger a la población venezolana contra el coronavirus.

Portando tapabocas y recomendando de ahora en adelante su uso, daba a conocer que a partir del 16 de marzo se implementaría el programa “Cada familia una escuela”, para la continuación del año escolar desde el hogar.

Venezuela se había convertido así en el país número 125 adonde el virus había llegado, como destacó ese 13 de marzo de 2020, el presidente Maduro.

Al día siguiente, el entonces vicepresidente Sectorial para la Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez, señalaba que a partir de esa misma noche se habían suspendido vuelos procedentes de República Dominicana y de Panamá; esto en vista de que pasajeros provenientes de Europa estaban utilizando estos destinos para triangular su retorno a la nación.

Ese día también informó que el Ministerio del Poder Popular para el Transporte había dispuesto un sistema de desinfección en la madrugada y en las noches en el Metro y los ferrocarriles.

Esta práctica ha continuado durante la pandemia y ha sido ejecutada principalmente por la Gran Misión Venezuela Bella, programa que hasta el 10 de febrero de 2021 había realizado 5 millones 671 mil desinfecciones en espacios públicos de todo el país, refirió VTV en su web.

El 13 de marzo de 2020, el ministro del Poder Popular para el Transporte Terrestre, Hipólito Abreu, a través de su cuenta tuiter decretaba la obligatoriedad del uso de tapaboca en unidades de transporte público.

Inició de la cuarentena

El 16 de marzo de 2020, a partir de las 5:00 de la mañana, entraron en el proceso  de cuarentena los estados La Guaira, Miranda, Zulia, Táchira, Apure y Cojedes, más el Distrito Capital, regiones donde se habían registrado casos de Covid. Para ese momento ya había 17 contagios, todos ellos importados.

El 16 de marzo, Maduro, luego de explicar que Venezuela evaluaba diariamente las recomendaciones de la OMS,anunció en cadena nacional de radio y televisión que al día siguiente “todo el país, los 23 estados y el Distrito Capital, todos a la cuarentena colectiva, medida drástica y necesaria”.

A partir del 17 de marzo de 2020 solo se permitió el funcionamiento necesario de los sectores alimentación, salud, farmacéutico, telecomunicaciones y servicios básicos. Venezuela pasó once semanas consecutivas bajo este esquema de cuarentena radical, voluntaria, consciente, colectiva, recordaría Maduro el 12 de enero de 2021 ante la AN.

La cuarentena vino acompañada de una serie de medidas para proteger al pueblo, entre ellas entrega de bonificaciones a través del Carnet de la Patria.

A través de esta plataforma el Estado también pudo aplicar “test sencillos, con preguntas concretas que nos dieron el conocimiento del estado de salud de todos los venezolanos, de las venezolanas, y las condiciones de quienes se reportaban con algunos síntomas, para ir con las más de 14 mil brigadas médicas creadas, a casa por casa, a la búsqueda de cada paciente y a la atención personalizada. En Venezuela hicimos un mapeo exhaustivo y estratégico para atender los casos en todo el país, aislarlos, atenderlos y brindarles progresivamente los mejores tratamientos del mundo”, destacaría el 12 de enero de 2021 Maduro ante la AN.

Entre las medidas que tomó el Ejecutivo para proteger al pueblo durante la pandemia, también figuraron la suspensión de los pagos de alquileres y créditos: “Otorgamos bonos de protección a través del Sistema Patria a todas las familias y a los trabajadores del país; les garantizamos sus ingresos durante meses a los trabajadores del sector informal; asumimos la nómina de las empresas privadas, y dictamos un esquema económico excepcional e integral para apoyar y proteger a todos y todas”, rememoró Maduro el 12 de enero de 2021.

7+7, un modelo venezolano

El 30 de mayo de 2020, Maduro anunció que el 1° de junio sería activado el “Plan cinco más 10” (5+10), tendente a la reactivación económica del país, bajo un esquema de flexibilización. El esquema consistía en laborar cinco (5) días consecutivos para luego retomar 10 días –también seguidos– de reposo o cuarentena.

Entre las áreas autorizadas estaban las agencias bancarias, consultorios médicos/odontológicos, sector construcción, sector ferreterías, peluquerías, Industria textil/calzado, industria química, talleres mecánicos/ventas de repuestos, servicios de refrigeración/plomería y transporte; estos sectores trabajaron respetando una franja horaria establecida por el Ejecutivo.

El 5 de junio, la vicepresidenta Delcy Rodríguez anunció que Maduro tomó la decisión de extender la fórmula del 5+10, y que a partir de ese momento pasaría a llamarse 7+7.

El 12 de enero de 2021, ante la AN, Maduro destacó que “el Método 7+7, creación de Venezuela, ha sido una clave fundamental para combatir esta pandemia; fuimos ampliando la fórmula a cada Estado según su status, comenzamos las etapas de flexibilización solo con diez sectores priorizados; luego fuimos a otra etapa con 24 sectores activos y hoy ya hemos ampliado a más de 53 sectores comerciales, económicos, deportivos, culturales, turísticos, hasta que lleguemos a la perfección total del Método 7+7 Plus; inclusive creo, con toda modestia y humildad lo digo, que el Método 7+7, con las evidencias científicas de todos estos meses, podría ser buen aporte, señores embajadores y embajadoras, para compartir bilateralmente, multilateralmente con la Organización Mundial de la Salud”.

Solidaridad y vacuna

Venezuela ha podido enfrentar la pandemia del Covid-19 gracias a la solidaridad de países como Rusia y China, que han enviado más de nueve vuelos con miles de toneladas con ayuda humanitaria. Turquía también ha colaborado con el pueblo venezolano enviando medicinas y equipos médicos.

El gigante asiático, tras la llegada del virus a la nación suramericana, envió a sus científicos y especialistas “que nos ayudaron en la estrategia que hemos llevado adelante con toda su experiencia en este esfuerzo nacional”, recordó Maduro el 12 de enero ante la AN.

El 2 de octubre de 2020, Venezuela hizo historia al convertirse en el primer país de América en recibir la vacuna rusa Sputnik V. “No puedo ocultar la emoción que nos embarga de que sea Venezuela el primer país del hemisferio occidental en participar en la fase 3 de los ensayos clínicos de esta vacuna”, dijo la vicepresidenta Delcy Rodríguez desde el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, de Maiquetía, ubicado en el estado La Guaira.

El 13 de febrero de 2021, Rodríguez se refirió a la tercera fase de los ensayos clínicos de la vacuna Sputnik V, la cual tuvo un éxito del 100% para contrarrestar la cepa del coronavirus.

Ese mismo 13 de febrero, llegaron al país las primeras 100 mil dosis del cargamento de la vacuna rusa Sputnik V, como primer paso para iniciar el proceso de inmunización masiva de la población venezolana.

Cuba es otro de los países que ha estado apoyando a Venezuela. Desde el principio ha enviado a sus médicos y médicas para reforzar la atención de los pacientes contagiados.

“La Cruz Roja Internacional, la Organización de las Naciones Unidas, la Organización Mundial de la Salud, la Unicef, han enviado toneladas de ayuda humanitaria que se han distribuido de manera justa, sensata y directa a todo el país”, destacó Maduro el 12 de enero de 2021.

Así como Venezuela ha recibido ayuda, la patria bolivariana siempre solidaria también, ha tendido su mano para apoyar a naciones severamente afectadas por la pandemia.

El 3 de abril de 2020, luego de mostrar un video en el que se observaba la falta de atención del régimen de Lenín Moreno al pueblo ecuatoriano, que se estaba muriendo en las calles por la pandemia, Maduro dijo que “Venezuela ofrece todo su apoyo y nuestra humilde experiencia al pueblo de Ecuador”.Ese mismo día, en la reunión que sostuvo con la Comisión Presidencial contra el Covid-19, mostró al país las dos máquinas Roche Cobas Z 480 para procesar muestras de coronavirus, Covid-19, que ofreció al régimen de Colombia liderado por Iván Duque. Tanto Ecuador como la administración colombiana rechazaron el apoyo.

El 19 de enero de 2021, Venezuela envió un cargamento con 14 mil bombonas individuales de oxígeno, para atender la crisis hospitalaria que se registró en Manaos, capital del estado Amazonas, en Brasil. Esa cantidad equivale a 136 mil litros de oxígeno. El 6 de febrero la patria bolivariana envióun lote de 56 mil litros de oxígeno a los estados Roraima y Amazonas, informó en esa oportunidad el gobernador del estado Bolívar, Justo Noguera, refirió https://diariovea.com.ve.

Dos nuevos cargamentos con oxígeno fueron enviados el 13 y el 15 de febrero a los mencionados estados de Brasil para atender la crisis que se generó por el mal manejo de la pandemia que hizo el presidente brasileño Jair Bolsonaro.

El 19 de enero de 2021 los países que integran la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio (ALBA-TCP) acordaron la creación de un fondo humanitario “cuyo objetivo es constituir el banco para la adquisición de vacunas ALBA” para combatir la pandemia de Covid-19. De esta forma se concretó la propuesta que hizo el 14 de diciembre de 2020 el jefe de Estado Nicolás Maduro, en la XVIII Cumbre del organismo.

Las gotitas milagrosas, 100% venezolanas

Desde octubre de 2020, Venezuela presenció cómo el presidente Maduro comenzó a dar a conocer que el país avanzaba en tres investigaciones científicas en la lucha contra el coronavirus. El 13 de ese mes se refirió a que una de las medicinas la trajo el gobernador del estado Carabobo, Rafael Lacava, y “los resultados de la investigación científica durante cuatro meses, han sido extraordinarios”.

Como segundo proceso mencionó un antiviral hecho por mentes venezolanas; indicó que se usa colocando unas gotitas debajo de la lengua cada cuatro horas. “Las gotitas milagrosas de José Gregorio Hernández”, las llamó. “En tercer lugar la ozonoterapia, fuera de serie, la ozonoterapia rectal y la ozonoterapia intramuscular. Contamos con un estudio clínico con más de 600 casos y podemos decir que tenemos 95% de salvación de vidas y de recuperación por ozonoterapia”, agregó.

Doce días después, Maduro anunciaba que científicos venezolanos habían desarrollado un fármaco que inhibe en su totalidad al virus del Covid-19. El fármaco se basa en la molécula DR10, que se usa como tratamiento contra la hepatitis C, el virus de papiloma humano (VPH) y el ébola, así como otras enfermedades, reseñaba el 25 de octubre de 2020 Prensa Presidencial.

Un día después, Venezuela presentó ante la oficina de la OMS, en Caracas,la molécula, informó la vicepresidenta Delcy Rodríguez. El  19 de noviembre de 2020 Lacava dio a conocer que esta fórmula estaba lista “para iniciar” el recorrido hacia la OMS, y “ser certificada para salvar vidas a nivel mundial”.

El domingo 24 de enero de 2021, Maduro anunció que tras nueve meses de investigación, el país iniciaría la producción masiva del antiviral venezolano Carvativir, también llamado “gotitas milagrosas del doctor José Gregorio Hernández”, capaz de neutralizar en un cien por ciento el Covid- 19, tras haberse establecido ese día la patente internacional y el permiso sanitario oficial del país. Así lo dijo durante el Balance de la lucha contra el Covid, refirió https://eldiariovea.home.blog/.

El Carvativir ha sido evaluado por científicos de países como Irán, Irak, Turquía, India, Brasil y Estados Unidos. El aceite esencial de tomillo es la materia prima de este medicamento “a través de un compuesto fitoquímico que se encuentra también en el orégano: El isotimol, a su vez colocado en escualeno, que funciona como excipiente”, describía el 29 de enero de 2021 el diario Últimas Noticias en un reportaje.

Campaña contra Venezuela

La lucha contra el Covid-19 no ha sido fácil para Venezuela debido al bloqueo que mantiene EEUU contra el país. Aunado a esto, sectores de la derecha nacional e internacional promovieron antes de la llegada del virus, campañas mediáticas asegurando que la enfermedad causaría estragos en la nación e incluso llegaron a decir que la tierra de Simón Bolívar sería el “epicentro de la pandemia”, recordó el 12 de enero de 2021 Maduro ante la AN.

A esto también hay que sumar que desde el régimen de Colombia no han cesado los ataques. El 20 de mayo de 2020, Maduro denunció durante una jornada de trabajo con el sector Salud, que el presidente colombiano Iván Duque dio una orden, en una reunión, de hacer todo lo posible para contaminar de Covid-19 a Venezuela.

Indicó que con las investigaciones preliminares que ha realizado el Gobierno nacional, pudieron conocer que un grupo de venezolanos residenciados temporalmente en Colombia, habrían podido contagiarse en unos autobuses que de un momento a otro dispusieron para su retorno, en donde les dieron unas bolsas con unos pancitos. “Ellos salieron sanos de las ciudades de Bogotá y Cali, no tuvieron contacto con nadie, solo con su familia venezolana, y ellos presumen que los contaminaron en los autobuses”, explicó, en alusión a testimonios ofrecidos por los viajeros.

A estos actos denunciados por Maduro hay que agregar el “trocherismo” que se dio sobre todo entre mayo y junio de 2020.  “El trocherismo, el ingreso ilegal de miles de venezolanos que huían de Colombia y de otros países a territorio venezolano con una alta carga de contagios de coronavirus. Desde mayo hemos hecho seguimiento cómo las mafias colombianas, con el auspicio personal y directo de Iván Duque (…) y el paramilitarismo, aprovecharon la larga frontera de más de 2.200 kilómetros para impulsar el paso irregular de personas contagiadas por trochas, que al llegar a Venezuela contagiaron a todo su entorno, a toda su comunidad, y dispararon la curva de pacientes en Venezuela”, rememoró el 12 de enero de 2021 Maduro.

La medicina venezolana Carvativir para luchar contra el Covid-19 también ha sido objeto de los dardos de la mediática nacional e internacional. De hecho, el 31 de enero de 2021, Maduro denunció la existencia de “una campaña de odio, de mentiras que se ha desatado sobre el Carvativir; cuánta mezquindad, egoísmo, en contra de Venezuela y los científicos venezolanos (…) lo peor de todo es que hay gente en Venezuela que se suma al egoísmo y a la maldad”, citó Prensa Presidencial.

El 2 de febrero de 2021, Maduro denunciaba: “Me censuraron todos los videos donde muestro el Carvativir. Facebook eliminó de mis publicaciones el video completo del programa del domingo pasado, de manera abusiva y dictatorial, donde explicaba sobre el Carvativir”.

En febrero del mencionado año, diarios internacionales como El País, comenzaron de nuevo con una campaña que asegura que supuestamente el Covid-19 se saldrá de control en la nación bolivariana.  El 11 de ese mes, el medio publicó un trabajo titulado: “Covid en Venezuela: El terremoto que está por llegar”, en donde dejan claro que desconfían de las cifras dadas por el gobierno nacional.

A esta campaña le salió al paso el canciller Jorge Arreaza, quien  el 12 de febrero en su cuenta tuiter escribió: “No pueden ocultar su frustración por el control del Covid-19 en Venezuela. Digno de una antología de periodismo necrófilo. El colapso ocurrió en sus países. Tratan de sembrar dudas y reinciden en erráticos pronósticos de caos. Todo un derroche de soberbia editorial ideologizada”.

Los ataques de la derecha nacional e internacional no pueden ocultar el éxito de Venezuela en la lucha contra el Covid-19. La patria está orgullosa del Gobierno nacional y del pueblo, quienes con su conciencia han evitado que la enfermedad se haya desbordado.

De acuerdo con datos de la Universidad John Hopkins de EEUU, hasta el 15 de febrero de 2021 Venezuela se ubicaba en la posición 75 con número de casos de Covid-19, con 133 mil 577 contagios acumulados, y en el ranking 87 en el número de decesos, con mil 285 hasta esa fecha.  

En la patria bolivariana un total de 125 mil 565 personas se había recuperado hasta el 15 de febrero de 2021, lo que representa el 94% de los contagios, de acuerdo con el parte ofrecido ese día por el vicepresidente Sectorial para la Comunicación, Cultura y Turismo, Freddy Ñáñez.

Inició de la vacunación

Fue el 18 de febrero cuando comenzó el proceso de vacunación con la Sputnik V. La jornada comenzó en Caracas y los estados Miranda y La Guaira, y posteriormente se fue extendiendo al resto del país. El plan arrancó con la inmunización del personal médico, de enfermería, para “quienes están en las Unidades de Cuidados Intensivos, de triaje respiratorio o en el área de hospitalización de Covid-19. En las áreas de emergencia, o en el área de los laboratorios que realizan las pruebas diagnostico moleculares. En el área de diagnostico de pacientes respiratorio y al personal de transporte de los pacientes respiratorios”, dijo en esa oportunidad la vicepresidenta Ejecutiva de la República, Delcy Rodríguez.

El lunes 1 de marzo de 2021, el pueblo venezolano recibió un notición, ese día llegaron al país 500 mil dosis de vacunas contra el Covid-19, provenientes de la República Popular China. La información la dio a conocer el jefe de Estado, Nicolás Maduro.

Cinco días después llegaron al país el segundo lote de 100 mil vacunas Sputnik V, a través de un vuelo del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos S.A. (Conviasa), consolidando así la cooperación Rusia– Venezuela.

El 7 de marzo, el jefe de Estado, Nicolás Maduro, informó que de las primeras 100 mil dosis de la vacuna rusa Sputnik-V, que llegaron al país, el sector salud ha recibido el 70%. Esa cifra se traduce en 70 mil dosis.

El 8 de marzo comenzó en Caracas y La Guaira la vacunación del sector educativo contra el Covid-19. La dosis que están recibiendo es la vacuna de la República Popular China.

Variante brasilera

El 3 de marzo de 2021, el Presidente Maduro anunció sobre la aparición de la variante brasilera del Covid-19, la cual cuenta «con mayor carga viral y capacidad de transmisión».

En esa oportunidad detalló que la variante fue detectada 15 días antes en un trabajador del Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, estado La Guaira, quien dio positivo. Puntualizó que hasta la fecha han sido detectados 10 casos positivos. Dos casos en las parroquias El Junquito y 23 de Enero en Caracas,  dos casos en Nueva Casarapa en Guarenas (Miranda) y seis casos en el estado Bolívar. Todas estas personas se encuentran hospitalizadas y aisladas, dijo en ese momento.

Luego de la llegada de esta variante, el Gobierno nacional reforzó los llamados a cumplir y a acatar la cuarentena.

En medio de esta pandemia, hay una sola cosa que a Venezuela la enfurece: Ver cómo sectores de la derecha nacional, liderada por el golpista Juan Guaidó, siguen impidiendo y haciendo de todo para evitar que la patria pueda tener acceso a sus recursos bloqueados en el extranjero, y poder comprar así vacunas y medicinas para seguir luchando contra el virus.