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El 16 de febrero del presente año, la humanidad celebra el 80° aniversario del nacimiento de Kim Jong Il (1942-2011), histórico líder de Corea, con motivo del cual numerosas personas lo recuerdan con profunda reverencia.

Entre varios aspectos relevantes de Kim Jong Il, lo que merece mencionar en esta ocasión es que no solo fue un gran dirigente de la nación coreana, sino también fue un defensor consecuente de la justicia y la verdad del mundo.

Sus dinámicas actividades ideo-teóricas que iluminaron el camino de la humanidad, se revisten de gran importancia en defensa del socialismo.

Con la caída del socialismo en la URSS y varios países de Europa a finales del siglo pasado, los imperialistas y los traidores al socialismo pregonaron “el fin definitivo del socialismo en el mundo”.

En aquella coyuntura, el dirigente Kim Jong Il publicó varias obras para defender la verdad y la invencibilidad del socialismo: Con “La difamación del socialismo no será tolerada” y “El socialismo es ciencia” entre otras, Kim Jong Il refutó todos esos sofismas contra el socialismo y sembró en los pueblos progresistas del mundo la esperanza y la convicción de que el socialismo triunfará sin falta, a pesar de pruebas momentáneas y temporales.

Kim Jong Il fue un hombre de la firme fe política.

Muchas personas recuerdan el 4 de agosto de 2001, día de su visita al Mausoleo de Lenin, en la Plaza Roja, cuando nadie se atrevía a rendirle honores.

Al respecto, el diario ruso Glasnosti comentó que la visita del camarada Kim Jong Il al Mausoleo de Lenin era una gran decisión que dio ánimo y fuerza a los auténticos revolucionarios rusos en la lucha por el socialismo y que era un acontecimiento que les infundió la convicción de que el movimiento socialista triunfaría infaliblemente si contara con un líder como Kim Jong Il.

El mundo recuerda al líder coreano también por su gran aporte a la causa de la paz mundial. Con su política de dar prioridad a los asuntos militares (política Songun) frustró todos los intentos de guerra y de agresión de EE. UU. contra la RPD de Corea, y salvaguardó firmemente la paz y la estabilidad de la Península Coreana, del nordeste de Asia y el mundo.

El gran coraje, la determinación audaz y la destacada estrategia que se demostró en el enfrentamiento nuclear contra EE. UU., fueron motivos de inmensa sorpresa en la sociedad internacional.

Frente a los alborotos de la inspección nuclear orquestados por el imperio norteamericano a comienzos de la década de 1990 y a sus ejercicios de guerra nuclear de gran escala que llevaron al extremo la situación de la Península Coreana, Kim Jong Il respondió con contramedidas que nadie suponía: El 8 de marzo de 1993 impartió la orden del Comandante Supremo del Ejército Popular de Corea, para que todo el país, todo el pueblo y todo el ejército se movilizaran al estado de preguerra; 4 días después el gobierno declaró su retirada del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares.

EE. UU., aterrorizado con las medidas de Corea, se vio obligado a sentarse apresuradamente a la mesa de conversaciones y publicar la Declaración Conjunta, la primera en la historia que firma con RPD de Corea, en la cual prometía la solución pacífica del problema nuclear de Corea. Seguidamente ambas naciones firmaron el Acuerdo Básico para la solución pacífica del asunto y el presidente norteamericano envió la carta de garantía al líder norcoreano donde se comprometía al estricto cumplimiento del Acuerdo.

Por todas partes del mundo salieron las voces de gran respeto y veneración a Kim Jong Il por haber demostrado con acción cómo defender la dignidad de un Estado y la paz mundial.

“El Presidente del Comité de Defensa Nacional, Kim Jong Il, es un gran hombre que salvaguardó la soberanía de más de 200 países y garantizó el cielo azul de paz para miles de millones de personas.” (Vishwanath, doctor en Sociología y político de India); “Kim Jong Il es un extraordinario político con disposición firme y un estratega extraordinario que hace rendir hasta a un enemigo más poderoso sin fuego” (Wakabayasi, político japonés); “La historia no ha conocido a un gran hombre como Kim Jong Il, con cualidades de un líder político y comandante militar” (Dmitri Yazov, ministro de Defensa de la exURSS); “Es preciso reconocer que el Presidente del Comité de Defensa Nacional, Kim Jong Il, es un líder político extraordinario que el mundo no ha conocido, y que es un admirable político socialista y militar con absoluta convicción, fidelidad y firmeza con el socialismo.” (La Voz de América [VOA]); “El líder de RPDC, Kim Jong Il, es la persona que mayor impresión dejó al mundo” (Times, semanario norteamericano de análisis político). Estos son algunos comentarios internacionales sobre la personalidad del eterno líder de Corea, Kim Jong Il.

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