¡Peligro oculto! Lo que debe saber sobre los textos de autoayuda
Los lectores deben fomentar el análisis crítico de los discursos, el discernimiento. Es por ello que este tipo de investigaciones estimulan «a indagar, a profundizar,
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VEA / Iralva Moreno A
Una investigación hecha en Venezuela demuestra que los textos de autoayuda tienen implicaciones potencialmente negativas. El estudio realizado por el investigador venezolano y docente de la Universidad Central de Venezuela (UCV), José Salazar Cruces, quien además es magíster en Estudios del Discurso, revela cómo ciertos discursos restringen el horizonte de posibilidades cotidianas de la gente.
De acuerdo a su estudio los mensajes ocultos de autoayuda se presentan como recomendaciones o consejos, desde la óptica de lo íntimo, como si se tratase de parte de la construcción de la aceptabilidad potencial; pero las directrices expresadas marcan obligatoriedad.
Es así como los textos son privatistas, en su conjunto, muestran mínimos los grados de libertad que se dejan a la persona interlocutora, es decir, se evidencia la reducción de las posibilidades cognitivo-conductuales a dos alternativas: haz tal cosa, no hagas tal cosa.
Por ello la persona lectora no le queda alternativa de reflexionar sino que más bien es coaccionada a aceptar y a obedecer las órdenes.
El autor citado por Nerliny Carucí y Guillermo Barreto en su artículo Los textos de autoayuda no ayudan también revela que los textos estudiados de autoayuda promueven una tendencia al pensamiento único, lo que propende a restringir el horizonte de posibilidades cotidianas de la persona lectora, más que a enriquecerlo.
«En el espacio semiótico que objetivan los textos de autoayuda, la persona lectora y el escritor se posicionan en lugares claramente diferenciados: la persona escritora/hablante presupone la ignorancia e inadecuación de la persona lectora/oyente (alguien que debe y necesita hacer, o no ha hecho algo); y quien escribe/habla se adjudica a sí mismo legitimidad y competencia para hablar sobre la administración adecuada de lo cotidiano universal, desde un conocimiento “verdadero, objetivo y no contingente” sobre la vida humana», reseñan los Carucí y Barreto fundamentados en el estudio de Salazar.
En ese sentido, invitan a los asiduos lectores a fomentar el análisis crítico de los discursos, el discernimiento. Es por ello que este tipo de investigaciones estimulan «a indagar, a profundizar, a no quedarse en la superficie de lo que oímos, leemos y vemos», por lo que invitan a dotar el conocimiento de un verdadero sentido liberador, que averigue el trasfondo de las palabras.
