José de San Martín: heroísmo de la Patria Grande
El autor es historiador, docente y abogado.
Néstor Rivero Pérez
El 28 de mayo de 1880, los restos del héroe argentino José de San Martín, libertador de Chile y protector de Perú, fueron recibidos en el puerto de Buenos Aires, siendo depositados al día siguiente en el mausoleo epónimo, dentro de la Catedral Metropolitana de la capital rioplatense.
Ideas de independencia
San Martín descolló entre 1808 y 1811, como capitán disciplinado y buen conductor de tropas en la primera etapa de la guerra de España contra los invasores franceses.
En el parte de su superior Coupigni, sobre el bautismo de fuego del rioplatense en Andalucía -y que publicara La Gaceta Ministerial de Sevilla-, se lee: “este valiente oficial únicamente atento a la orden de su jefe, puso su tropa en batalla y atacó con tanta intrepidez a los enemigos, que logró desbaratarlos completamente” (Samuel W. Medrano, (El libertador José de San Martín), ascendiendo a teniente coronel. Su acción contribuyó a la retoma de Madrid por el ejército peninsular.
Honda debió ser la impresión que causó en el ánimo de San Martín apreciar de modo directo la fiereza con que el pueblo ibérico defendía su tierra frente a las tropas napoleónicas. Y ello seguramente le motivó inquietudes respecto a su suelo nativo, que por entonces se mantenía como colonia de España.
Pide su retiro del Ejército en 1811, viajando a Londres, adonde llega con recomendaciones de sus jefes. Allí entabla amistad con el venezolano Andrés Bello y mantiene estrecho nexo con Carlos de Alvear, José María Zapiola y Tomás Guido, quienes formaban parte de una logia masónica establecida por Francisco de Miranda en la capital inglesa.
Dicha agrupación, con antecedente en la Sociedad de los Caballeros Racionales de Cádiz, de 1809, “se desarrolló hasta convertirse en influyente asociación de revolucionarios hispanoamericanos, y se llamó Logia Lautaro” (Ibídem). En 1812 San Martín se embarca con destino a Buenos Aires.
Tras su arribo es acogido con confianza por las nuevas autoridades del Río de la Plata. Allí, al frente de varios destacamentos, dio el combate de San Lorenzo, asegurando el control del río Paraná y el comercio con la provincia Entre Ríos.
“¡Cabeza alta!”
La gesta continental de San Martín comienza en 1812, al crear en la localidad de Cuyo, el célebre escuadrón de Granaderos a Caballo, base de su “Ejército de los Andes”. Durante su entrenamiento disciplinó a gauchos y voluntarios de la ciudad con la expresión “cabeza alta”, cultivando la moral militar.
En 1817, San Martín, al frente de su ejército de cuatro mil hombres, atravesará la Cordillera de los Andes, a una altitud de 4.500 metros sobre el nivel del mar, para dar su independencia a Chile en 1818. Luego, con apoyo de Bernardo O’Higgins, ha de organizar la Expedición Libertadora de Perú, que llega a territorio inca en septiembre de 1820.
En Pisco proclamaría “(…) vengo a poner término a esa época de dolor y humillación. Este es el voto del Ejército Libertador”. Por dos años asegura la independencia de la región costera y norte de Perú; quedando en manos del Virrey Pezuela la franja montañosa del país. Sin embargo, las facciones patriotas debilitarán su voluntad de mantenerse en Perú, devolviéndose a su patria, en septiembre de 1822.
Restos repatriados
José de San Martín, quien se exilió en Francia desde 1824, falleció el 17 de agosto de 1850 en Boulogne-sur-Mer. Desde entonces sus restos permanecieron en Francia durante treinta años. Sería bajo la presidencia de Nicolás Avellaneda, cuando sus despojos fueron trasladados a Buenos Aires, adonde llegaron el 28 de mayo de 1880. Al día siguiente se les depositaron en el Mausoleo de San Martín, en la Catedral de Buenos Aires.
Sinópticos
Día Internacional por la Salud de la Mujer
Dicha efemérides persigue la promoción del derecho de las mujeres a gozar de salud integral a lo largo de todo su ciclo vital. Se trata de un derecho humano universal consagrado por el sistema internacional de derechos humanos. La salud integral, por su parte, no es un hecho meramente biológico, sino que responde más bien a factores biopsicosociales, y depende del lugar que las mujeres ocupan en la sociedad, de su capacidad de acceder a los recursos materiales y para vivir una vida digna, con igualdad de oportunidades, exenta de violencias.
1871
Cayó la Comuna de París
Esta insurrección de los obreros y pueblo de París, comenzó el 18 de marzo, desarrollando el primer gobierno obrero, o comunal, de la época moderna. Fue estudiada por Carlos Marx, en una de sus obras más conocidas, La guerra civil en Francia, donde se examinan las medidas de gobierno que tomó la Comuna. Marx estimó al gobierno de la Comuna de París, como preanuncio del futuro régimen socialista, por sus decisiones de otorgar cargos rotatorios y revocables, salarios mínimos a los funcionarios, y el armamiento directo del pueblo para su defensa, entre otras. Sin embargo, los obreros de París no lograron romper el cerco militar de las fuerzas reaccionarias, ni tejer alianza con los campesinos.
El Generalísimo Francisco de Miranda no fué iniciado Masón. Por lo tanto la Logia Lautaro no se refería a Masonería, sino a cofradía, conciliábulo, reunión o junta.