¡Le dan con todo! Familiares de gringo de Operación Gedeón acusan a Story de «llenarse los bolsillos»

VEA / Yuleidys Hernández Toledo

Mark Denman, hermano del mercenario estadounidense Luke Denman, involucrado este último en la Operación Gedeón, responsabilizó al exembajador de Estados Unidos en Venezuela, James Story, de ser un «obstáculo» para la liberación de su familiar, al tiempo que lo acusa de «trabajar para sí mismo».

A través de su cuenta Twitter, Mark Denman recuerda que su hermano y Airan Seth Berry, otro mercenario estadounidense involucrado en la fallida incursión mercenaria del 3 de mayo de 2020, se encuentran detenido en Venezuela. Asegura que ha tratado de conseguirle apoyo por la embajada estadounidense que lidera Story desde Colombia, pero según él, este funcionario gringo ha «bloqueado la ayuda del Departamento de Estado, disuadir a nuestros representantes de ayudar y una serie de otras contribuciones negativas a la situación».

«Story ha sido más un problema para llevar a mi hermano a casa que Maduro (….) Cualquiera que tenga curiosidad sobre esto debería investigar la relación de Story con las compañías petroleras que intentan hacer negocios allí. El tipo no trabaja para nosotros. Toca los contactos para servirse a sí mismo. Los conocedores de Washington lo saben (…) Deja atrás a los estadounidenses para una sesión de fotos; eso resume ‘Jimmy'», escribió en dos mensajes en su cuenta Twitter.

Los mensajes de Mark fueron retuiteados por su madre, Kay Denmann, quien además añadió que su hijo Luke «se pudre mientras el señor Story se llena los bolsillos».

¿Qué hicieron Luke Denman y Airan Berry?

La madrugada del domingo 03 de mayo de 2020, Venezuela y el mundo fueron testigos de un hecho aberrante. Mercenarios y terroristas entrenados en los campamentos colombianos, y exsoldados estadounidenses intentaron realizar una incursión vía marítima por las costas de La Guaira. El plan formaba parte de las acciones de Guaidó y la ultraderecha nacional, y los regímenes de Colombia y EE. UU. contra el país.

La acción criminal, conocida como Operación Gedeón, fue frustrada por la inteligencia popular y los cuerpos de seguridad de Venezuela.

Luke Alexander Denman y Airan Seth Berry, fueron los dos soldados estadounidense que entrenaron a los mercenarios en Colombia y que fueron capturados tras la fallida incursión.

Denman develó tras la captura, que tomar el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar ubicado en Maiquetía, estado La Guaira, para secuestrar a Maduro y llevarlo a EE. UU., era uno de los objetivos. Su testimonio fue presentado el 5 de mayo de 2020 por el entonces vicepresidente sectorial para la Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, recuerda el libro Venezuela siempre grande, difundido por Diario VEA.

En la Operación Gedeón estuvo involucrado el golpista Juan Guaidó, quien suscribió un contrato con el mercenario estadounidense Jordan Goudreau, dueño de la empresa mercenaria Silvercorp, la corporación que contrató para llevar a cabo la operación. En el contrato que se hizo público y notorio, además de la firma de estos dos sujetos, también está la de los dirigentes de la derecha Juan José Rendón y Sergio Vergara.

En ese contexto, tras su captura Denman confesó en mayo de 2020 que conocía el contrato entre el golpista Guaidó y el mercenario gringo Goudreau. “Lo vi hace un mes o mes y medio, tenía la firma de Jordan y la de Juan Guaidó”, cita el mencionado libro.

“Veníamos con el objetivo de invadir el país, atacar objetivos militares y capturar al Presidente. Asegurar espacios aéreos, poner a Maduro en un avión (…)”, confesó por su parte Denman en un video presentado el 18 de mayo de 2020 por Jorge Rodríguez.

Por su parte Berry, quien ha sido miembro de las fuerzas gringas en operaciones contra Irak en 2003, 2005 y 2007, confesó que “lograr objetivos específicos y asesinar a Maduro”, era uno de los objetivos. Su testimonio fue presentado el 7 de mayo de ese año por Jorge Rodríguez.

En audiencia realizada el 7 de agosto de 2020, los estadounidenses Airan Seth Berry y Luke Alexander Denman fueron condenados por su participación en la Operación Gedeón, por lo que afrontan una pena de 20 años y  7 meses de prisión, medida aplicada en virtud de la rebaja de un tercio de la pena por la admisión de los hechos, más la mitad por haberse acogido a la figura de la delación, informó en esa oportunidad el fiscal general, Tarek William Saab.