Lluvias han afectado ocho municipios en Monagas
Las afectaciones se han registrado en la Serranía de Turimiquire, Acosta, Caripe, Piar, Cedeño, Punceres, Bolívar y Maturín. Foto: Internet.

VEA / Carlos A. Batatin
En el estado Monagas ocho (8) de sus municipios han sufrido serias afectaciones a causa de las fuertes precipitaciones registradas en esa región oriental. El gobernador de la entidad, Ernesto Luna, anunció que unos 322 pobladores han sido perjudicados.
Detalló que a causa de la saturación de los suelos y las fuertes precipitaciones, las localidades de la Serranía de Turimiquire, Acosta, Caripe, Piar, Cedeño, Punceres, Bolívar y Maturín, se mantienen en 18 milímetros de agua.
Recordó que desde el pasado mes de enero se han realizado en conjunto con los diferentes órganos de seguridad y prevención, diversos trabajos de mitigación de riesgos, y que se emprendió la recuperación de más de 8.000 kilómetros lineales tras el saneamiento de caños y quebradas.
Al referirse a las áreas agrícolas, indicó que igualmente han sufrido las consecuencias de las precipitaciones, agregando que los daños se han inspeccionado y posterior a las ondas tropicales, serán atendidas las diversas afectaciones en la viabilidad agrícola.
De acuerdo con los reportes oficiales, en diferentes zonas las condiciones climáticas adversas, generadas por el paso de ondas tropicales, generaron vientos huracanados, causando daños estructurales menores y caída de árboles.
En la población de San Antonio de Capayacuar, las autoridades han desplazado una comisión de emergencia al sitio, en modo preventivo, para actuar con rapidez ante la amenaza del desbordamiento de ríos.
En relación sobre la afectación a los servicios públicos, Ernesto Luna agregó que si bien las lluvias han provocado turbidez en los ríos y la paralización temporal de plantas potabilizadoras, «el suministro de agua está garantizado mediante pozos de contingencia, manteniéndose la distribución en 80 por ciento».
Resaltó que pese a la inclemente lluvia, no se han reportado daños en infraestructuras educativas ni en centros de salud, y que la atención inmediata ante la caída de algunos árboles, ha sido posible gracias a la articulación con las comunidades organizadas.