Tras el triunfo llamó al diálogo y a trabajar por el país. Foto Internet

Venezuela siempre grande. VI Capítulo

Yuleidys Hernández Toledo

En 2018 los ataques del régimen de EEUU contra Venezuela eran cada vez más fuertes. La persecución financiera y económica no cesaba. El Departamento del Tesoro estadounidense seguía emitiendo medidas coercitivas unilaterales contra el pueblo noble de Simón Bolívar.

En medio de este escenario, el 23 de enero de ese año la Asamblea Nacional Constituyente, ANC, aprobó un decreto enmarcado dentro de la Constitución en el que se establecía que las elecciones presidenciales debían realizarse en el primer cuatrimestre de 2018. En el texto, el órgano plenipotenciario instó al Poder Electoral a fijar la fecha de los comicios que elegirán al Jefe de Estado para los próximos seis años.

Venezuela vivió en carne propia cómo este llamado desató aún más la arremetida de la derecha internacional. Tras conocerse la noticia los entonces senadores Marco Rubio (republicano) y Bob Menéndez (demócrata) pidieron al entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que solicitara una sesión de urgencia del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para abordar la situación del país suramericano, además le exigieron que tomara medidas contra el presidente de la República, Nicolás Maduro.

Otro en proferir amenazas contra el país fue Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), quien el 24 de enero de ese año pidió más sanciones contra Venezuela. “Faltan dos o tres turnos más de sanciones, más fuertes, más abarcativas”, dijo en esa oportunidad, citaron medios privados. Siguió expulsando su veneno al asegurar que “las sanciones son el mecanismo diplomático más duro. Después de las sanciones, abandonas la diplomacia”.

Ya para esa fecha existía el autodenominado Grupo de Lima, una instancia que nació en agosto de 2017 y que conformaron los gobiernos de Argentina, Brasil, Guyana, Santa Lucía, Chile, Guatemala, Honduras, Canadá, Colombia, Costa Rica, México, Panamá, Paraguay y Perú, para agredir a Venezuela. Varias de estas naciones estaban gobernadas para ese momento por regímenes de derecha, era el caso de Argentina y México. Aunque EEUU no figuraba directamente en la instancia era el que movía los hilos de la agrupación.

Tras el triunfo llamó al diálogo y a trabajar por el país. Foto Internet

Tras el anuncio de la ANC se pronunció el Grupo de Lima y aseguró que supuestamente los comicios carecían de “legitimidad”.

El tema de las elecciones presidenciales era centro de debate en las rondas de conversaciones que mantenían, desde finales de 2017, el Gobierno nacional y la oposición en Santo Domingo, República Dominicana.

La derecha radical había aceptado participar en los comicios. De hecho en las mesas de diálogo había sido abordado el punto de las garantías electorales. Ya todo estaba listo para firmar en febrero de 2018 el acuerdo definitivo de convivencia que se había discutido en seis rondas en la nación caribeña, cuando la oposición pateó la mesa y se negó a suscribir el documento, siguiendo lineamientos de EEUU, como denunció en ese momento el jefe de la Mesa de Diálogo por el Gobierno nacional, Jorge Rodríguez.

Luego de esto, la franja más radical de la derecha venezolana decidió entonces boicotear la elección presidencial para hacer creer que Nicolás Maduro se presentaba solo en la carrera al Palacio de Miraflores. Por su parte, un sector de la oposición decidió participar en la contienda.

El 1 de marzo de 2018, Venezuela presenció cómo desde el hemiciclo del Palacio Federal Legislativo, la ANC aprobó un decreto que convoca a elecciones presidenciales y de Consejos Legislativos y Municipales para mayo. Ese mismo día, el Consejo Nacional Electoral, CNE, fijaba los comicios para el 20 de mayo de ese año, recuerda Telesur en su página web.

En ese momento, la entonces presidenta del Poder Electoral, Tibisay Lucena indicó que la decisión fue tomada después de que se generara la firma de un acuerdo entre el Gobierno y la oposición del país, el cual ratificaba el compromiso de cumplir con las más amplias y plenas garantías electorales de cara a las elecciones presidenciales que estaban fijadas inicialmente para el 22 de abril, recordó el 1 de marzo, de 2018, Telesur.

Entre los acuerdos firmados se encontraban, enviar una comunicación al secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, para que fuese testigo, junto con organizaciones internacionales, del proceso electoral venezolano, agregó la mencionada fuente.

UE y EEUU encabezaron agresiones durante la campaña

Para la contienda presidencial de 2018 se midieron Nicolás Maduro como el candidato del Frente Amplio de la Patria; Henri Falcón, avalado por Avanzada Progresista, Movimiento Al Socialismo (MAS), y Copei; Reinaldo Quijada, de Unidad Política Popular 89 (UPP89); Javier Bertucci, del grupo de electores Esperanza por el Cambio, y Luis Ratti, candidato independiente.

Estados Unidos, la Unión Europea, y el entonces presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, encabezaron, al menos, medio centenar de agresiones contra Venezuela, desde que se inició la campaña electoral el 22 de abril y hasta que finalizó el 17 de mayo.

Trump, Pompeo entre los que arremetieron contra los comicios. Foto Internet

En 26 días de campaña, voceros internacionales lanzaron un total de 48 pronunciamientos contra la Patria de Bolívar, y los comicios presidenciales y de consejos legislativos estadales que se celebraron el 20 de mayo, esto de acuerdo con una investigación que realizó esta autora para la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).

La arremetida contra Venezuela fue protagonizada por 27 dirigentes de la derecha internacional y seis organizaciones, además de algunos magistrados de Colombia y Chile, de acuerdo con la investigación, en donde esta autora consultó 37 notas publicadas por la agencia EFE; tres del Diario Las Américas, dos de Europa Press, y una de cada uno de los portales: El Nuevo Herald, La Estrella de Panamá, ADN Agencia, la web española El Mundo, La Jornada y la cuenta tuiter de la embajada de EEUU en Venezuela.

Suspensión de las elecciones, solicitud de más sanciones contra el país, entre ellas financieras, magnificación de la migración venezolana, presunta falta de democracia y descalificativos contra los comicios, fueron los argumentos sin sustento que esgrimieron los miembros de la derecha internacional contra la nación.

Aunado a esto, el 16 de mayo de 2018, en el marco de su arremetida, un “estudio” realizado por el centro de investigación del crimen organizado InSight Crime, calificó a Venezuela como un supuesto “Estado mafioso”.

Entre los voceros que arremetieron contra la Patria de Bolívar y el proceso comicial del 20 de mayo figuraron: el secretario general de OEA, Luis Almagro; los entonces presidentes de Panamá y Colombia, Juan Carlos Varela y Juan Manuel Santos, respectivamente, así como el entonces jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, y la Alta Representante de la Unión Europea para la Política Exterior para la fecha, Federica Mogherini.

Por Estados Unidos los dardos contra Venezuela fueron dirigidos por los entonces: vicepresidente Mike Pence; secretario de Estado, Mike Pompeo; la embajadora ante la ONU, Nikki Haley; el subsecretario de Estado, John Sullivan; el embajador ante la OEA, Carlos Trujillo; el gobernador de la Florida, Rick Scott; los senadores: Marco Rubio, Robert “Bob” Menéndez y Dick Durbin, así como el Encargado de Negocios en el territorio venezolano, Todd Robinson.

Los expresidentes: Ricardo Lagos (Chile), Andrés Pastrana y Álvaro Uribe Vélez (Colombia), también lanzaron sus ataques verbales, así como el entonces presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani.

El Grupo de Lima, el Parlamento Europeo, el Partido Popular de España, la embajada de EEUU en Venezuela, el centro de investigación del crimen organizado InSight Crime, y el Fondo Monetario Internacional, son los organismos que también arremetieron contra la Patria de Bolívar.

Maduro triunfa y los ataques no cesan

El 20 de mayo el pueblo acudió a sufragar, lo hizo en paz y con alegría. Con este acto, una vez más el poder popular desafiaba la arremetida imperial, de la Unión Europea, y de la derecha mundial.

En la jornada resultó ganador el candidato revolucionario Nicolás Maduro, quien obtuvo 6 millones 248 mil 864 votos, es decir, 67,84% de los sufragios, de acuerdo con cifras emitidas por el CNE. Su principal contrincante, el opositor Henri Falcón, alcanzó un millón 927 mil 958 votos, es decir, 20,39%. De esta forma el abanderado socialista resultaba reelecto para el período 2019-2025.

Antes de que el CNE emitiera los resultados Falcón los desconoce. «No reconocemos este proceso electoral como válido. Para nosotros no hubo elecciones. Hay que hacer nuevas elecciones en Venezuela», dijo desde su comando de campaña, citó en esa oportunidad la BBC Mundo. Se sumaba así a los ataques que ya venían liderando la ultraderecha nacional contra los comicios.

Luego de conocer los resultados, Maduro insistió una vez más en su llamado al diálogo, a la necesidad de trabajar por la paz, y de reactivar la economía nacional afectada por las medidas coercitivas unilaterales.

Tras la victoria de Maduro, la derecha nacional e internacional insistió en su tesis de desconocer los comicios presidenciales y de calificar la jornada como ilegitima.

Sanciones económicas, amenazas, marcaron la escalada de ataques que dirigió EEUU contra la Patria de Bolívar a un mes de la victoria de Nicolás Maduro en las elecciones presidenciales del 20 de mayo.

Voceros de la derecha internacional lanzaron 47 pronunciamientos contra la tierra venezolana, esto de acuerdo con otra investigación realizada por esta autora para la Agencia Venezolana de Noticias (AVN), en donde se consultaron notas publicadas por la Agencia EFE, Reuters, la Deutsche Welle, Diario Las Américas, los portales mexicanos Excelsior y Televisa, El Colombiano, la web de la OEA, y de la Asamblea Nacional (AN), en desacato; así como los portales de los diarios nacionales El Nacional y El Universal.

En su afán de arremeter contra Venezuela, voceros de la derecha internacional usaron escenarios como la Sesión 48 de la Asamblea General de la OEA, y planificaron eventos como la Cumbre Internacional de Parlamentarios por Venezuela que se desarrolló el 1 de junio de 2018 en Cúcuta, solo para atacar a la nación.

Los agresores eran los mismos que lanzaron sus dardos durante la campaña electoral.

La primera agresión contra Venezuela, después de que Maduro triunfara en las presidenciales, la lanzó Donald Trump, quien firmó una orden ejecutiva en la que prohíbe a cualquier ciudadano, institución o empresa estadounidense adquirir deuda venezolana o activos y propiedades pertenecientes al gobierno de Venezuela en Estados Unidos, incluidas aquellas inversiones derivadas de Petróleos de Venezuela, S.A. (Pdvsa), reseñó en esa oportunidad EFE.

En aras de seguir la línea impuesta por EEUU, el autodenominado Grupo de Lima ratificó el 21 de mayo, de 2018, en un comunicado la declaración que emitió ese organismo el 8 de agosto de 2017, en donde solicita “a las autoridades competentes de cada país que emitan y actualicen circulares o boletines a nivel nacional que transmitan al sector financiero y bancario el riesgo en el que podrían incurrir si realizan operaciones con el gobierno de Venezuela (…)”, reseñó en esa oportunidad el portal peruoea.org.

Mientras voceros de la derecha lanzaron 47 pronunciamientos en contra de Venezuela, el jefe de Estado, Nicolás Maduro, recibió más de 250 felicitaciones por su triunfo en los comicios presidenciales, entre ellos de presidentes, partidos políticos, organizaciones sociales del mundo y organismos de integraciones como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y Petrocaribe.

Venezuela sabía que comenzaba una etapa de agresión más brutal contra su noble pueblo.

Aquí puedes leer las veintidós entregas anteriores del sexto capítulo de Venezuela siempre grande.

En 2013 EEUU y derecha arremetieron contra las presidenciales (I). https://bit.ly/38Yc53D

Maduro lideró una campaña electoral de amor y de alerta de los planes opositores (II). https://bit.ly/3oYWPJ4

Atacar al CNE y vandalizar la GMVV caracterizaron campaña de Capriles en 2013 (III). https://bit.ly/3661P7E

14 de abril de 2013: El día que el pueblo le cumplió a Chávez (IV). https://bit.ly/2LOhvW9

Capriles promovió la violencia al desconocer los resultados (V). https://bit.ly/39QgDbe

Once fallecidos, 78 lesionados y CDI quemados dejó desconocimiento de los resultados por parte de Capriles (VI). https://bit.ly/366prsC

Con la llegada al poder de Maduro, EEUU y la derecha incrementó la guerra no convencional (VII). https://bit.ly/2KFPkbc

Gobierno de calle y lanzamiento de Misiones entre los logros de Maduro en 2013 (VIII). https://bit.ly/3c60guc

Leopoldo López causa muerte y terror con su Plan La Salida (IX). https://bit.ly/3c5GI92

Leopoldo López, promotor de la violencia en Venezuela (X). https://bit.ly/365SzAk

La derecha, el paramilitarismo y los asesinatos selectivos (XI). https://bit.ly/3pe7Ypw

Escasez, inflación inducida y comienzo de las sanciones marcaron 2013 y 2014 (XII). https://bit.ly/3o9nbXB

Protección a la familia en medio de la arremetida de la derecha contra el país (XIII). https://bit.ly/3odZXjf

En 2015 la derecha sumó a la guerra económica un intento de golpe de Estado (XIV). https://bit.ly/3pz9xyy

El decreto de Obama: Unas medidas criminales que violan los derechos humanos de todo un pueblo (XV). https://bit.ly/3pzK3Bb

En 2015 la derecha conquistó la AN con propaganda engañosa (XVI). https://bit.ly/3owr4Gk

Maduro, el Presidente del diálogo (XVII). https://bit.ly/3oz8Hkf

Guarimbas y quemar personas vivas, parte de los crímenes de la derecha en 2017 (XVIII). https://bit.ly/3pED36k

La Asamblea Nacional Constituyente que devolvió la paz al país (XIX). https://bit.ly/3aEum5A

Los CLAP y el Carnet de la Patria, programas para proteger al pueblo (XX). https://bit.ly/3aEgqbR

Bloqueo: Un crimen de lesa humanidad de EEUU contra Venezuela (XXI). https://bit.ly/2OfeCyn

El Petro es el primer criptoactivo de Venezuela (XXII). https://bit.ly/2N2tXS6