Soy la voz de mi hijo secuestrado por EEUU y El Salvador

Reina Jiménez mantiene la lucha y la esperanza por que su hijo, Wilken Flores, detenido al llegar a Estados Unidos en busca del sueño americano, regrese pronto al país. Fotos Franklin Domínguez.

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VEA / Nancy Martínez

Reina Jiménez es una madre que clama por el regreso de su hijo, Wilken Rafael Flores Jiménez, de apenas 24 años, y quien proviene de una familia de bien asentada en Araira, estado Miranda, como demuestran los registros policiales de Venezuela, que emitieron la declaración de que no posee antecedentes penales. Diario VEA conoció su clamor cuando acudió a la marcha realizada el jueves 01 de mayo, Día del Trabajador.

Y es que Wilken Flores, esperanzado por las promesas del sueño americano que tantos otros jóvenes venezolanos siguieron antes que él, migró a Estados Unidos y nada más llegar, en diciembre de 2024, fue detenido, encarcelado y deportado el 15 de marzo al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) en El Salvador, solo porque exhibe tatuajes artísticos en su cuerpo.

No tuvo juicio ni oportunidad de defenderse. El 14 de marzo apenas le permitieron llamar a su madre para decirle que había sido deportado y regresaba a Venezuela, contento porque al fin, iba a salir del infierno en que se había convertido su sueño. Nunca llegó a Venezuela y su madre supo que estaba en el Cecot al publicarse la lista de los venezolanos enviados a ese centro.

Wilken Flores, un joven de 24 años que fue en busca del sueño americano y fue detenido por sus tatuajes

“Él se fue en diciembre a los EEUU, se presentó a una cita y el mismo día lo dejaron detenido, el 15 de marzo lo trasladaron al Cecot en El Salvador. Un día antes me llamó y me dijo que lo habían deportado y regresaba a Venezuela, pero se lo llevaron fue a El Salvador, los engañaron”.

Reina cuenta que Wilken se fue a EEUU porque, muchacho al fin, buscaba un futuro mejor para él y para la familia. “Él quería venirse para Venezuela, porque estaba desilusionado del trato que le dieron, eso me dijo la última vez que hablamos, el viernes 14”.

Al igual que las madres de los 252 jóvenes venezolanos que permanecen secuestrados en el Cecot de El Salvador, Reina quiere que traigan a Wilken de vuelta al país. Por ello, aprovecha cada oportunidad que se convoca en defensa de los migrantes venezolanos secuestrados para, con su presencia, demostrar su apoyo a esta causa. “Mi hijo no tiene antecedentes penales, no pertenece a ninguna banda del Tren de Aragua, solo lo juzgan por sus tatuajes. Le pido al presidente Maduro y a Diosdado que nos sigan ayudando a traer a nuestros hijos de vuelta para el país, estamos muy agradecidos por todo lo que están haciendo, sigan así, que nosotros los apoyamos”.

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