Tal día como hoy falleció Juan Vicente González, pasión y estilística de las letras venezolanas
El autor es historiador, docente y abogado.
Néstor Rivero Pérez
El 1° de octubre de 1866, falleció en Caracas Juan Vicente González, periodista, escritor y educador, que intervino en la controversia política de su tiempo identificado con las corrientes conservadoras, empero cuyo brillo literario mantiene en alto pedestal su nombre como parte de la memoria colectiva de los venezolanos.
González, quien también había nacido en 1810 en Caracas, de padres desconocidos, transcurrió su infancia bajo la protección del sacerdote José Alberto Espinoza, en la congregación de los Neristas de Caracas -en honor a San Felipe Neri-. Adoptó el apellido del realista Francisco González, en cuya casa se dice fue abandonado de muy pequeño.
Prosa romántica
La exaltación de emociones propias del romanticismo europeo, el quiebre nostálgico de quien, a la hora de contrastar las teorías con su tiempo presencial, añora una edad de oro; ello de una parte, y de la otra el recurso al párrafo enfático para destacar rasgos de una personalidad, indistintamente de que se le honre o adverse -llámese Fermín Toro (a quien define como “espíritu ideal que sueña hermosas teorías”), o su antagonista Antonio Leocadio Guzmán (“Los vándalos se aproximan al Capitolio”, como tal le identifica cruelmente), y, finalmente el uso de la hipérbole, serán rasgos que el autor de la Biografía de José Félix Ribas|1, mantendrá en crónicas y ensayos referidos al tiempo histórico en el cual intervino con plena conciencia de circunstancias.
Filiación conservadora
Si bien el fundador del colegio “El Salvador del Mundo” no alcanzó en la política nacional el protagonismo de José Antonio Páez, o de José Tadeo Monagas, de un Vargas o un Urbaneja, sí desempeñaría rol destacado en la conducción de la opinión pública, tanto por su influjo intelectual, su labor de educador, especialmente por su ejercicio como polemista político por vía de la prensa. De otra parte, al frente de El Diario de la Tarde, o El Heraldo, González difundió ideas literarias y capítulos de historia. Sin embargo, el autor de Las Mesenianas ejerció su polifacético magisterio desde una perspectiva conservadora, al asumir, como la vía para la inserción del país en el progreso y la modernidad, el programa político de la oligarquía conservadora: Minorías selectas conduciendo a las mayorías ignaras y semisalvajes, según dicho parecer, el cual enmascaraba una sociedad de privilegios feudales.
Obra
En la obra escrita de Juan Vicente González, referida a la gesta de independencia de Venezuela entre 1810 y 1830, resaltan de una parte su devoción bolivariana, y de la otra el respeto por los hechos históricos, al tratar un período distinto a aquel en que interviene de forma activa. En 1842, en medio de la apoteosis que constituyó para Caracas el recibimiento de los restos del Libertador, González publicará Mis exequias a Bolívar, escrito de exaltación al héroe, más que riguroso estudio. Sin embargo, en su Biografía de José Félix Ribas, el autor acuña una expresión que ha guiado la polémica en torno a José Tomás Boves, a quien califica de “primer jefe de la democracia venezolana”, significando el carácter social de la Guerra a Muerte, además de aportar datos que de otra forma hubiesen desaparecido para la posteridad. También escribió Epístolas Catilinarias, Compendio de Gramática Castellana e Historia del Poder Civil en la Gran Colombia y Venezuela, entre más de quince libros y centenares de columnas de prensa con una estupenda calidad literaria.
Sinóptico
1928
Primer Plan Quinquenal de la URSS
Este día, bajo el mandato de Iosif Stalin, secretario general del Partido Comunista de la URSS, entra en vigencia el Primer Plan Quinquenal de la Economía, que sustituye al programa de la Nueva Economía Política (NEP), el cual regía en la URSS desde 1921. En 1917, Vladimir Lenin definió el carácter socialista de la URSS, sentenciando que para dicha nación el socialismo era “Electricidad más soviets”. Sin embargo, el terrible cuadro de aislamiento y agresiones impuesto por las potencias mundiales de la época, indujo a Lenin a convocar en 1921 a sectores privados industriales, campesinos ricos y facilitar una parcial liberalización del comercio. La NEP estuvo vigente hasta 1928 cuando, el Partido Comunista bajo el liderato de Stalin decide acelerar, con el I Plan Quinquenal de la URSS, el tránsito al socialismo. Tres años después Stalin, apoyándose en el planificador Eugenio Preobrazhenski -quien posteriormente sería acusado de “trotskista” y eliminado- ratifica sus criterios, al esbozar sus propósitos: “Estamos 50 o 100 años detrás de los países avanzados. Debemos acortar esta distancia a 10 años. O lo hacemos, o ellos nos aplastarán” (Wikipedia). Y ciertamente con la herramienta de la planificación, la URSS alcanzó un desarrollo sorprendente que la llevaría en 1945, a derrotar la invasión alemana y emerger y sostenerse como la segunda gran potencia mundial hasta su disolución en 1990.