Venezuela respalda renovación institucional de la FAO para afrontar retos del hambre, desigualdad y emergencia climática
William Castillo alertó sobre el agravamiento de la inseguridad alimentaria global y sus causas estructurales: conflictos, crisis económicas, colapso de cadenas de suministro, emergencia climática. Foto Internet

VEA / Representación Permanente de Venezuela ante Naciones Unidas
Durante el debate del Tema 15 en la 44.ª Conferencia de la FAO, Venezuela saludó la conmemoración del 80° aniversario de la Organización y reiteró su respaldo a un proceso de renovación institucional que permita a la FAO responder a los desafíos actuales de la seguridad alimentaria mundial.
El Viceministro de Políticas Antibloqueo, William Castillo, intervino en nombre del Presidente Nicolás Maduro, reafirmando el apoyo venezolano al mandato histórico de la FAO y la necesidad de adaptar sus estructuras a las dinámicas geopolíticas actuales. “Saludamos a esta institución que ha dado relevantes aportes en la lucha contra el hambre, y que hoy requiere procesos de reformas para estar a la altura de los tiempos”, expresó.
Venezuela respaldó la declaración del GRULAC y su rol participativo en las consultas informales orientadas a definir estrategias para la transformación institucional de la FAO.
Castillo alertó sobre el agravamiento de la inseguridad alimentaria global y sus causas estructurales: conflictos, crisis económicas, colapso de cadenas de suministro, emergencia climática y medidas coercitivas unilaterales que restringen el acceso equitativo al comercio internacional.
Asimismo, denunció la grave situación humanitaria en Gaza y los crímenes contra civiles durante operaciones de entrega de alimentos. “La FAO no puede mantenerse al margen frente a esta situación”, advirtió.
El Gobierno Bolivariano abogó por una FAO centrada en la producción soberana, la nutrición como derecho, la cooperación solidaria y la articulación de saberes ancestrales, ciencia e innovación.
Venezuela reafirmó su compromiso con la Agenda 2030, la justicia social y el derecho de los pueblos a una vida digna, con soberanía y sin hambre.