¡Victoria del pueblo! Maduro: El milagro se consumó, Maikelys está junto con su madre
Hoy es un «día en donde uno siente que vale la pena todo», expresó, al tiempo que agradeció a todos los que hicieron posible la llegada de la pequeña al país. Foto Prensa Presidencial

VEA / Yuleidys Hernández Toledo
«¡Milagro consumado!», expresó muy emocionado el jefe de Estado, Nicolás Maduro, al referirse al rescate de Maikelys Espinoza Bernal, la bebé de dos (2) años que estuvo secuestrada por el régimen de Estados Unidos, EEUU.
Desde el salón Simón Bolívar del Palacio de Miraflores, Caracas, tras contemplar cómo la primera combatiente Cilia Flores de Maduro, colocó a las 12:06 de la tarde de este miércoles 14 de mayo a Maikelys en los brazos de su madre, Yorelys Bernal Inciarte, Maduro expresó «aquí está la nieta querida de todos. Es hija y nieta de todos nosotros». Sus palabras provocaron el aplauso de los presentes y una enorme sonrisa de la menor, que como la mayoría de los niños pequeños se deleita al escuchar el sonido que hacen las palmas al juntarse.
Luego de destacar que uno de los presentes que más le gustó a la menor fue una carterita de color fucsia, agradeció el amor y la solidaridad de todas las madres, abuelas y al pueblo de Venezuela que se sumaron a la causa para lograr que la menor, arrebatada de los brazos de sus padres, llegara a Venezuela.
Maikelys Bernal le fue arrebatada a sus padres, Yorelys Bernal y Maiker Espinoza, el 14 de mayo de 2024, cuando ingresaron a suelo yanqui, donde les retuvieron autoridades de migración. Desde entonces pasó por tres hogares de acogida como relató su madre en varias intervenciones públicas.
Mientras la chiquita entregaba una muñeca a Alex Saab como parte de un juego y luego iba a los brazos de su madre a buscar otra, hecha de trapo y vestida con el tricolor nacional, el jefe de Estado agradeció a Jorge Rodríguez, jefe de la Delegación del Gobierno nacional en las Mesas de Diálogo por sus gestiones como enviado especial de paz de Venezuela.
Con voz cargada de emoción relató que hasta las 1:00 de la mañana de este miércoles 14 de mayo, él, el equipo de la vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez, Diosdado Cabello y Cilia Flores, estuvieron trabajando para lograr el rescate de la menor.
«Quiero agradecer a los abogados, a los movimientos de derechos civiles y de derechos de migrantes de Estados Unidos que, en coordinación con el defensor de los derechos humanos de Venezuela, Larry Davoe, y con Yorelys, mamá de Maikely y su abuela Raida, estuvieron actuando legalmente buscando un milagro. Y el milagro otra vez se ha consumado. Gracias a Dios en primer lugar por traer a esta niña hermosa a los brazos de su madre», expresó Maduro en medio de los aplausos de los presentes.
Mientras Maikelys estaba de pie junto con su madre y abuela, Maduro con ternura confesaba que hoy es un «día en donde uno siente que vale la pena todo. Vale la pena todo. Agradecer a tanta gestiones».
Avanzar en medio de las diferencias
El Presidente de inmediato dijo que tiene que agradecer en justicia a Richard Grenell, enviado especial de Donald Trump, «por sus gestiones (…) Agradecer al presidente Donald Trump, quien se encuentra por allá por los países árabes, que se haya consumado este acto de justicia, humano, profundamente humano».
Destacó que con Estados Unidos ha habido diferencias y las hay, pero recalcó que es posible avanzar. «Resolver muchos asuntos».
Rescatar a los venezolanos en El Salvador
Sin olvidarse de los más de 200 venezolanos secuestrados en Centro de Confinamiento del Terrorismo, una prisión de máxima seguridad ubicada en suelo salvadoreño, Maduro manifestó «aspiro y espero que muy pronto podamos rescatar al padre de Maikelys y a los 253 venezolanos que están en El Salvador. Muy pronto».
Después de los aplausos que generaron su firmeza pidió al pueblo de Venezuela que se mantenga movilizado, en solidaridad activa para lograr el rescate de los connacionales.
Maiker Espinoza, es el padre de Maikelys, se encuentra secuestrado en la megacárcel construida por Nayib Bukele y que se conoce por las constantes denuncias de violaciones de derechos humanos que en ella ocurren.
Mientras Maikelys se acercaba a entregar una especie de flor plástica a Camilla Fabri, viceministra del Poder Popular para Relaciones Exteriores en Comunicación Internacional, Maduro agradeció a la también defensora de los Derechos Humanos, su trabajo para lograr que la pequeña pueda estar hoy con sus familiares.
«Con su corazón siempre firme, solidario ha estado al frente de la solidaridad, y el apoyo a Yorelys a Raida Josefina», expresó en referencia a Fabri, al tiempo que reveló que la esposa de Alex Saab, un hombre que también padeció el atropello imperial, debía estar hoy en el Zulia, acompañando a los familiares de los venezolanos oriundos de ese estado, retenidos de manera forzosa en El Salvador.
En el Palacio de Miraflores también estuvo presente el ministro del Poder Popular para la Industria y Producción Nacional, Alex Saab. Maduro le agradeció por su apoyo. «Con toda su experiencia nos da la sabiduría para lograr estos milagros».
Una victoria del pueblo de Venezuela
«Esta victoria humana de tener a esta niña hermosa entre nosotros le pertenece a todo el pueblo de Venezuela; pero sobre todo a las madres y a las abuelas», expresó Maduro, mientras la pequeña se acercaba a su abuela, ante la mirada sonriente de la vicepresidenta de la República.
Seguidamente Maduro hizo una revelación, dio a conocer que el día de las madres, celebrado el domingo 11 de mayo, Venezuela casi lo celebra con Maikelys en el país.
«Hemos extendido el día de las madres, y hoy es día de las madres. Felicidades y que Dios bendiga a nuestra patria amada», manifestó en medio de más aplausos mientras conteplaba a la niña con sus familiares.
Migrantes, regresen
Tras comentar que los migrantes deben estar llorando de alegría al ver a la niña junto con su madre y su abuela; les pidió que regresen a Venezuela. «Vénganse, no crean en falsas patrias, en falsas ilusiones de sueño americano. vénganse a Venezuela todos, aquí los amamos, aquí resolvemos todo y construimos la única patria que tenemos. Patria matria: Venezuela. El hogar donde están nuestros antepasados, el hogar donde están nuestras esperanzas, el hogar Venezuela, el hogar de todos».
«Esta es la tierra de la libertad, de la esperanza y de la felicidad. Vénganse todos, los vamos a rescatar a todos, me los voy a traer a toditos donde estén. Ustedes saben que somos empeñados, los avioncitos los tenemos y a uno por uno nos los vamos a traer para que reunifiquemos a la familia venezolana, que tanto ha sufrido por culpa de las sanciones criminales. Tengan la seguridad, pues soy un hombre de Dios. Felicidades a esta familia, a Venezuela», remarcó mientras un Diosdado Cabello sonriente contemplaba a la pequeña jugar.
Mientras los demás conversaban y contemplaban a la menor, con sensación de tranquilidad, Maikelys con la curiosidad típica de los niños se acercaba a ver qué hacía la vicepresidenta Delcy Rodríguez, quien sostenía y acomodaba en el cochecito que le fue regalado a la niña, lo que parecía ser una muñeca.
Risas iban y venían, la abuela de Maikelys narraba una anécdota chistosa a la pareja presidencial; mientras la pequeña sentada en el suelo, bajo la mirada atenta de su madre, jugaba con unos zapatos de las muñecas. Luego de ahí regresó junto con la vicepreisdenta para colocarle los zapatos a la muñeca dentro del coche.
Las conversaciones y las risas seguían mientras una Maikelys tomaba jugo, caminaba, y luego se detenía a jugar.