Con determinación e inspiración por la ventaja la Vinotinto mostró diferencias para triunfar en casa

VEA / Irving Guanipa Ojeda

Después de un año sin haber podido saborear el triunfo, la selección nacional absoluta de fútbol se impuso el pasado domingo a su similar de Ecuador 2 goles por 1, pero no solamente pudo celebrar los tres puntos en casa, precisamente en el Estadio Olímpico de la Ciudad Universitaria de Caracas, sino que su plantel de jugadores y cuerpo técnico se mostraron bien compactados y prestos a corregir de inmediato los errores sobre el terreno de juego.

En esta confrontación contra la representación ecuatoriana los dirigidos por Leo González mostraron mayor ímpetu en busca de la anhelada victoria; siempre se mostraron dispuestos a batallar frente al enemigo de turno, sin individualidades, sino más bien en un juego bien colectivo y bajo esquemas precisos tanto a la hora de atacar como al momento de ir en busca de frenar las intenciones del rival, al que conocían con anterioridad y al que se le venció por quinta oportunidad en estos compromisos mundialistas.

Protagonistas del momento y para el futuro

Darwin Machís se encargó de ratificar que su buen juego es una necesidad en los encuentros de la Vinotinto en estas rondas eliminatorias de Suramérica para la Copa Mundial de Fútbol Catar 2022. Su presencia en cancha se convirtió en un punto de inspiración a la hora de atacar frente al rival de turno. Mientras que Eduard Bello se ha mostrado como un jugador que sabe muy bien hacer las cosas esenciales sobre el gramado para ir en busca del momento que sirvan de inspiración para concretar los deseos de los atacantes. La asistencia que le colocó a Machís para igualar las acciones, cuando ya todo hacía predecir que el primer tiempo favorecería al conjunto visitante, fue realmente de altura, un magistral centro que Machís supo colocar fuera del alcance del cancerbero Wellington Ramírez y lograr un empate, que los fanáticos presentes, al igual que los miles de televidentes, que seguían las incidencias por la pantalla chica, celebraron en grande. Un 11 que reivindicaba las firmes intenciones de la escuadra tricolor. Al minuto 45 sumó la Vinotinto un nuevo tanto en la contienda, y el que lo pondría a las puertas de una enorme victoria a final de cuentas.

Eduard Bello, con la velocidad y precisión que lo caracteriza, puso el tanto de la ventaja para una Vinotinto que se mostró bien inspirada y con mayores ánimos de triunfar, se erigió como genio y figura del choque dominical, con un golazo de calidad y determinación, cuando transcurría el minuto 63.

La Vinotinto podrá ser otra con la labor en cancha con Yeferson Soteldo, quien fue apartado del compromiso contra Ecuador, por supuesto acto de indisciplina. Ojalá lo de Soteldo haya sido cosa del pasado y pueda estar desplegando su sapiencia y velocidad en cancha en busca del triunfo, en el juego de este jueves contra la escuadra chilena.

Un segundo tiempo de calidad para Venezuela

Se hace necesario recapitular que en este encuentro la selección nacional impuso sus variantes defensivas, previamente elaboradas por González y su cuerpo de asistentes. Con precisión milimétrica fueron deteniendo las embestidas de la selección ecuatoriana para finalmente no ser víctima de un nuevo descuido en los minutos finales y caer cuando menos se espera, tal como ocurrió recientemente contra Brasil.

En los minutos finales supieron manejar muy bien la defensa y le impidieron al contendor concretar sus acciones, para llevarse un triunfo muy bien merecido y aspirar a continuar por mejores senderos en las confrontaciones venideras. Se plantaron en cancha sin nerviosismo ni descuidos, jugaron con la inspiración que produce la ventaja y la determinación necesaria para poder cumplir el objetivo trazado.

Frente a Chile, este jueves, hay que jugarle con la misma inspiración y determinación para aspirar a seguir puntuando. No hay otra.