Con verdaderas joyas de Bello y Savarino Venezuela abrió el camino

0

En este compromiso todos fueron héroes, pero el paso dado por Bello y Savarino, hizo entrar a todos por el camino de la gloria. Foto Internet

VEA/ Irving Guanipa Ojeda

El gol anotado por Eduard Bello, sin lugar a dudas que acaparó la atención del mundo entero, sin la menor opción a duda, sin embargo pocos han mostrado la innegable calidad del determinante centro colocado a Bello, por Jefferson Savarino, para que hiciera posible el tanto logrado al minuto 85, del juego que finalizó con un memorable e histórico empate 1-1 de Venezuela con el combinado de Brasil, en el duelo disputado en el estadio Arena Pantanal en la ciudad de Cuiabá, estado de Mato Grosso, Brasil.

Realmente fueron dos joyas sobre la cancha las que se unieron para amalgamar un disparo de chilena, que encendió los corazones de millones de venezolanos que seguían las incidencias del disputado duelo celebrado este jueves en suelo brasileño.

La ejecución de Savarino fue por demás precisa, espectacular y oportuna, como una pieza de ajedrez puesta para que en el siguiente movimiento se sentenciara, tal como finalmente ocurrió, un tanto que por su calidad y determinación causó admiración por todos lados y dolor por parte de los anfitriones, que jamás se imaginaron que ya con apenas cinco minutos y algo para el pitazo final, recibieran un baño de agua fría que no estaba en el libreto, y mucho menos con la precisión y calidad con la que llegó.

En este compromiso todos fueron héroes, pero el paso dado por Bello y Savarino, hizo entrar a todos por el camino de la gloria, esa que espera alcanzar toda Venezuela en esta nueva edición de las Eliminatorias de Suramérica para la Copa Mundial 2026, a celebrarse en México, Canadá y los Estados Unidos.

Un resultado para ser tomado muy en cuenta para el presente y el futuro

Muchos análisis se pueden hacer de tan memorable encuentro disputado en suelo brasileño, donde se daba por descontado que arrollarían al combinado venezolano, sin embargo jamás por la mente de ninguno de los integrantes de la oncena canarinha surgió la posibilidad de la incansable y determinante lucha de los dirigidos por Fernando Batista, para sacarles un punto al filo del partido. Nada de eso era considerada una posibilidad. Mucho menos terminar con aquella larga cadena de triunfos en su sede, en el suelo de históricos jugadores que encumbraron a la selección verde-amarilla a los más resonantes triunfos, para erigirse como la de mayores logros en el Continente Americano.

Un hecho que también merece ser tomado en cuenta fue la «oscura actuación del árbitro principal Kevin Ortega, de Perú». Muchas decisiones suyas causaron molestias a los integrantes de la Vinotinto y a quienes seguían el partido por televisión o redes sociales, pero ninguna como su intención de alargar el tiempo luego de cumplidos los 90 minutos reglamentarios. Algunos llegaron a decir «es que la falta de presencia de Venezuela en Conmebol, hace que situaciones como esta se presenten, una y otra vez». Eso debe ser revisado ´para futuros compromisos. 

Después de todo ese empate, tal como quedó presente y para la historia, puede ser tomado muy en cuenta para el futuro, porque no siempre se le puede igualar un partido al Gigante del fútbol de Suramérica. Lo cierto es que a diferencia de las últimas eliminatorias de la región durante la pasada Copa Mundial, el panorama es muy diferente y el optimismo está a flor de piel de propios y extraños. Se hace muy activo aquello de «El presente es de lucha y el futuro nos pertenece».    

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Este contenido está protegido !!