La verdad es que Machado es una apátrida y eso lo explica todo

Abogado Ignacio Ramírez Romero
Miguel Pérez Pirela, desde la Iguana, radiografía magistralmente hasta dónde ha llegado la impudicia y el desafuero de una clase política derrotada, que la oposición más extrema de la derecha se ha permitido apelar para derrocar sin votos, pero con mucha violencia y fallidas conspiraciones, dejando como consecuencia de sus ambiciones ilimitadas no solo como víctimas al pueblo venezolano, a quien «simula defender», con un nefasto saldo de sangre, sudor y lágrimas.

Es tan vil y descarada María Corina Machado, que no contenta con pedir más sanciones económicas, ofrecer nuestros recursos petroleros, mineros y acuíferos gratis a naciones, empresarios extranjeros, con tal de sacar a Nicolás Maduro de la Presidencia, de renunciar a la defensa del Esequibo y pedir a Estados Unidos y a Israel que ataquen y bombardeen nuestro territorio porque según ella, Venezuela está suministrando el uranio y construyendo misiles al gobierno de Irán.

Para colmo de males ha justificado la irracional, arbitraria y abominable persecución y terror desatado por Donald Trump contra la inmigración venezolana, al tratar a la población que emigró para los Estados Unidos, como miembros del Tren de Aragua, y ver con buenos ojos el destino de encierro y secuestro infrahumano de 252 inmigrantes venezolanos en El Salvador, con la complicidad del déspota presidente Nayib Bukele.

Finalmente, María Corina Machado no parece importarle que nuestro país sea convertido en una segunda Gaza, que nuestra población sufra y se empobrezca, que nos quedemos sin Esequibo ni riquezas estratégicas, sino que ahora legitima y aplaude que nuestros inmigrantes sean perseguidos, detenidos expulsados forzosamente a El Salvador, a Guantánamo o al dantesco reclusorio mal llamado Alcatraz, construido sobre un pantano lleno de cocodrilos y serpientes.

La verdad es que esa señora no solo carece de la más mínima sindéresis política y de una mediana inteligencia, sino más grave aún, es que por sus venas no corre sangre venezolana y por tanto tampoco podría decirse que es una traidora, porque la verdad es que NO TIENE PATRIA.