VEA/ Yonaski Moreno

Este viernes 23 de julio tuvo lugar el funeral del presidente de Haití, Jovenel Moïse, asesinado la madrugada del pasado 7 de julio en su residencia privada.

Las exequias se realizaron en los jardines de la Habitation Village SOS, residencia privada de la familia Moïse, a las afueras de la ciudad de Cap-Haitien, al norte del país.

El féretro donde reposaban los restos de Jovenel Moïse fue colocado sobre una plataforma y cubierto con la bandera nacional de Haití por un grupo de soldados de las Fuerzas Armadas, reseñó actualidad.rt.com.

A la ceremonia asistió la primera dama, Martine Moïse, quien aún tiene un brazo en cabestrillo debido a las heridas que recibió durante el ataque que segó la vida de su esposo. La presencia del nuevo primer ministro, Ariel Henry, y todo su gabinete, así como expresidentes de la república y diplomáticos extranjeros también era esperada.

Hasta en la ceremonia fúnebre, que fue costeada por la familia, la cual se negó a aceptar dinero del Estado, se sintieron los gases lacrimógenos y se escucharon los disparos que la policía usó para dispersar las protestas, que se desarrollaron con quema de objetos y barricadas, que se generaron en las inmediaciones del punto donde se desarrollaba la ceremonia.

El jueves la catedral de Cap-Haitien acogió una misa en honor a Moïse que fue interrumpida en varias ocasiones por partidarios del mandatario pidiendo justicia, reseñó por su parte Últimas Noticias.

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