Néstor Rivero Pérez

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El 18 de junio de 1974 murió en la ciudad de Recife (Brasil), el escritor y docente de matemáticas, Julio César de Mello y Souza, quien bajo el pseudónimo de Malba Taham publicó el libro El hombre que calculaba, la obra literaria de iniciación matemática cuyo ameno lenguaje y peripecias de su personaje Beremiz Samir, la ha convertido en el texto de mayor lectura por los jóvenes del mundo en los distintos idiomas modernos.

120 libros

Autor de ciento veinte libros en los que trató temas de cultura general e historia árabe, Tahan dedicó 59 de sus textos a las matemáticas, teniendo como propósito el mejoramiento de la enseñanza de las ciencias exactas. De acuerdo a su experiencia, su país se mantenía a la zaga pedagógica respecto a los sistemas escolares de otras regiones del mundo, especialmente en cuanto a las ciencias exactas. En alguna ocasión expresó su crítica a la forma tradicional de impartirla, y que se repite hoy en distintos países latinoamericanos: “El profesor de matemáticas –sostenía- es un sádico, que ama hacer todo tan complicado como sea posible”. Tahan dedicó El hombre que calculaba a los grandes filósofos y matemáticos de la historia, entre quienes destacan Descartes, Pascal, Newton, Leibnitz, Euler y el musulmán Al Karismi.

Beremiz, el calculista

El personaje central de El hombre que calculaba es Beremiz Samir, viajero acucioso, amante de la exactitud y quien acostumbra llevarlo todo a la estimación precisa de la cantidad, como el hecho de dividir 35 camellos entre tres hermanos y otras complicaciones del mismo tenor. Su ameno estilo y fluida plática le atrajeron legiones de lectores. El hombre que calculaba ha sido publicado en casi todas las lenguas. La agilidad de Samir para resolver complicaciones numéricas sorprendía a quienes le trataban. A partir del capítulo tercero, según lo recuerda Ricardo Yánez: “Cada capítulo, es un relato completo que deja una enseñanza de matemáticas, lógica, sabiduría, moral, religiosidad y bondad” (https://www.monografias.com).

Moral y presteza

Consciente de la originalidad de su personaje y la gracia que transmitía a sus lectores, el autor aprovechó cada circunstancia de Beremiz Samir, para difundir enseñanzas de orden moral, como cuando el calculista conversa con un sheick en cuyo palacio se dejaba escuchar gran cantidad de pájaros enjaulados. Samir dice al potentado: “Cada vez que ponemos en libertad un pájaro cautivo practicamos tres actos de caridad. El primero, para con la avecilla, restituyéndole la libertad; el segundo, para con nuestra conciencia, y el tercero, para con Dios”. Luego de obtener la soltura de las aves, Beremiz levanta sus ojos al paso de la bandada, apuntando con rapidez: “Son 485, aunque daba la impresión de ser diez mil”.

Enigma y premiación

En El hombre que calculaba, resalta el ingenio del protagonista. Deseando casarse con la princesa Telassim, Beremiz debe medir su brillantez en el despeje de enigmas. Así se le llevan cinco esclavas completamente cubiertas. De las cinco, tres, quienes siempre mentían, poseían ojos azules; y las otras dos, que siempre decían la verdad, negros. El calculista debe adivinar a quienes correspondía uno y otro color haciendo solo una pregunta a tres de ellas. E interpela a la primera “¿De qué color son tus ojos? Respondiendo esta en idioma chino, desconocido por los árabes asistentes: “Negros”. Samir aparenta desconcierto. Todos le daban como derrotado, cuando interroga a la segunda: “¿Qué respuesta dio tu compañera?”. Y la contestación fue: “Ella dijo: ‘Mis ojos son azules’…”. Con la tercera pregunta descifró otros aspectos del misterio: “¿De qué color son los ojos de tus anteriores compañeras?”, recibiendo como contestación: “La primera los tienen negros, y azules la segunda”. La clave del descifrado la obtuvo al constatar que la segunda mentía, por cuanto Beremiz quien sí entendía el chino, captó las palabras de la primera esclava. Y la tercera respuesta le confirmó en su hipótesis respecto a la primera y al hecho de que esta tercera joven decía la verdad. Así Beremiz fue premiado con el reconocimiento de su anhelado noviazgo con Telassim.

Malba Taham, autor de El hombre que calculaba, quien murió tal día como hoy, obtuvo distintos premios y recorrió numerosos países dictando conferencias.

Sinópticos

1815

Batalla de Waterloo

En esta acción quedó derrotado el ejército de Napoleón Bonaparte, por una coalición de Inglaterra, Rusia, Prusia, Austria y otros países. Waterloo cambió definitivamente el curso de la historia europea, impulsando expansión mundial de Inglaterra y de otra parte, dando ímpetu a las posiciones ultramonárquicas de la Santa Alianza.

Protocolo de Puerto España

1970

Este día el gobierno del presidente Rafael Caldera, acordó con las autoridades de Guyana y Reino Unido, la suspensión del proceso de reclamación que nuestro país ha mantenido sobre el Territorio Esequibo por el despojo ejecutado en 1899.

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