VEA / La Vanguardia

El Fondo Monetario Internacional ha pedido a España que haga lo posible para contener los salarios. «Es importante que la negociación colectiva continúe internalizando la naturaleza transitoria de la inflación y se evite un círculo vicioso de salarios más altos que conducen a una mayor inflación», comenta el informe anual sobre la economía española que se acaba de hacer público. El comentario del Fondo llega en un momento clave de la negociación salarial de miles de convenios, con los precios disparados -la inflación interanual alcanzó el 5,5 % en noviembre- y tras una crisis muy dura para el país.

El FMI recorta también las previsiones de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) hasta el 4,6 % este año y el 5,8 % en 2022, frente a sus previsiones del 5,7 % y 6,4 %, respectivamente, realizadas en octubre. La fuerte rebaja va en línea con la de todos los organismos nacionales e internacionales que han actualizado sus pronósticos, una vez que la variante Ómicron ha sembrado de nuevo la incertidumbre sobre la recuperación. El gobierno, en cambio, mantiene todavía que España crecerá un 6,5 % este año y un 7 %, el próximo.

El Fondo vuelve a repetir que es necesario contar con un marco laboral que reduzca la temporalidad, en línea con el marco que forma parte de la actual reforma laboral, aunque también considera que hay que abaratar el despido. «Sería importante hacer los contratos indefinidos más atractivos para las empresas, incluso reduciendo el coste de la inseguridad jurídica asociada con el despido de trabajadores fijos», añade el informe. Es decir, que el Fondo defiende que será más fácil reducir la temporalidad si los empresarios pueden hacer contratos indefinidos en los que el coste del despido sea inferior al actual.

En cuanto a las pensiones, el Fondo valora positivamente las medidas en favor de la sostenibilidad y, nuevamente, vuelve a pedir más ambición en la reforma. «Preservar la sostenibilidad de las finanzas públicas requiere esfuerzos adicionales para contrarrestar presiones sobre el gasto en pensiones, lo que también ayudaría a señalar el compromiso de las autoridades con la responsabilidad fiscal», insiste la institución. «Las posibles medidas adicionales incluyen la introducción de mecanismos para restringir los gastos (por ejemplo, prolongar aún más la vida laboral) y aumentar los ingresos (como aumentando las ganancias máximas sujetas a cotizaciones)».

Por último, el FMI recuerda una vez más que España deberá acometer una senda de consolidación fiscal, ya que la pandemia ha elevado su deuda al equivalente del 120 % del PIB. «España necesitará bajar los niveles de deuda a estándares más sostenibles y crear espacio para responder a futuras crisis», dice. Esto no hay que hacerlo inmediatamente, sino una vez que se recuperen los niveles de PIB previos a la pandemia, una circunstancia que el Fondo prevé para finales de 2022 o principios de 2023. «El ajuste fiscal deberá ser amable con el crecimiento, lo que implica preservar el espacio para el gasto público en educación y acompañando el proceso con reformas estructurales en favor del crecimiento». 

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