El rugby de la UCV quedó sin espacios para poder cumplir con entrenamiento

VEA / Irving Guanipa Ojeda

Una vez más ha quedado demostrado que la rectora de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Cecilia García Arocha, y quienes la acompañan en su gestión administrativa, no tienen el mayor respeto con los atletas, entrenadores, directivos de los clubes y organismos que hacen vida en esa casa de estudios

Así como han tenido que atravesar situaciones verdaderamente dificultosas varias disciplinas deportivas ucevistas, en oportunidades anteriores, en esta ocasión el Club de Rugby de la Universidad Central de Venezuela (UCVRFC) se encuentra en una verdadera encrucijada en cuanto al funcionamiento normal para sus entrenamientos, ya que desde hace más de un año cuando se les negó el espacio que tenían para cumplir sus jornadas de acondicionamiento y entrenamientos  en el Estadio Olímpico, la situación ha empeorado y generado verdadera alarma, que ni la rectora ni quienes están al frente de la Dirección de Deportes quieren encarar para brindarle una pronta solución al problema.

En los actuales momentos los espacios que ocupaba el equipo de rugby de la UCV son utilizados para la realización de partidos correspondientes al campeonato del fútbol profesional de Primera División, Liga Futve, y que también «pertenecen» a la Vinotinto absoluta de los encuentros programados en la capital para las eliminatorias suramericanas de la Copa Catar 2022.

La situación es que ninguno de los jugadores ni entrenadores, ni siquiera los representantes de los jugadores o sus familiares, se oponen a que allí se lleven a cabo esos compromisos, pero lo que desean para no verse afectados en sus entrenamientos es que les brinden el respeto que merecen porque son dignos representantes de los colores de la UCV, los colores que grandes deportistas venezolanos, dirigentes, han llevado profundamente en el corazón y defendido con gallardía y mayor orgullo.

Soluciones pertinentes

La semana pasada, quienes integran el Club de Rugby de la UCV comenzaron una silenciosa protesta en la Plaza del Rectorado porque, desde el 2018, cuando fue remodelado el Estadio Olímpico con la «ayuda» de la Fundación Universidad Central de Venezuela (Fundación UCV), en este se hacen los mayores negocios económicos del deporte, además de aportes de los equipos profesionales Universidad Central de Venezuela (Primera División), Deportivo La Guaira, Metropolitanos FC, y el Caracas FC.

Pero las expectativas no fueron cubiertas para quienes realmente participan en el deporte ucevista, ya que, como los del rubgy, quedaron por fuera y ni siquiera se les brinda la menor oportunidad de entrenamiento en los espacios en que anteriormente lo hacían.

Ante tales circunstancias el capitán del Club de Rugby de la UCV, Rómulo Cobos, denunció públicamente que las autoridades de la Universidad Central de Venezuela, ya como lo ha hecho una constante la señora Cecilia García Arocha y su equipo, no le prestan el menor respaldo para la solución de sus problemas.

“Con los equipos profesionales se acordó con la Dirección de Deporte las selecciones que hacen vida en el estadio como rugby, atletismo y porrismo, iban a tener de seis a ocho horas a la semana divididas entre las tres disciplinas para entrenar. Fue cuando nos dieron la cancha de Sierra Maestre, la cual no tiene condiciones ni seguridad para ser usada”, manifestó Cobos. También argumentó que se les había prometido que la cancha del estadio Sierra Maestra sería acondicionada para que pudieran ser usadas por las representaciones deportivas de la UCV de manera «temporal». “Sí se hizo, pero para el equipo de fútbol, no para el rugby”, ya que el brocal sería un problema para el desempeño de este deporte.

Además consideran que por no reunir las condiciones para entrenar, normalmente, también representa un problema para la seguridad de jugadores, entrenadores, directivos, familiares y acompañantes, puesto que a la hora que tienen el permiso para hacerlo, de 6:00 de la tarde a las 8:00 de la noche, la situación no es nada fácil por la inseguridad existente en todos los sectores del país.

Protesta silenciosa

Frente a la indolencia de las autoridades de la Universidad Central de Venezuela la directiva del club, de común acuerdo con cada uno de sus integrantes, decidió entrenar en los espacios de la Plaza del Rectorado, para repetir una acción que había efectuado el Club de Rugby de la Universidad Metropolitana en 2016.

Indicaron que mantendrán su lucha por dar a conocer al país la difícil situación que están atravesando y por mantener en actividad uno de los grandes estandartes deportivos de la UCV como ha sido a través de los años el rugby universitario.