Embajada de Rusia en EEUU: Inversión de Washington en proyectos de armas biológicas en Ucrania asciende a US$ 32 millones
El despacho diplomático emitió un comunicado a través de su canal en Telegram. Foto: Internet
VEA / Actualidad RT
La Embajada de Rusia en Estados Unidos (EEUU) denunció este jueves 17 de marzo que Washington ha destinado más 32 millones de dólares para proyectos de armas biológicas en Ucrania.
A través de un comunicado, difundido por la plataforma Telegram, el despacho diplomático ruso exigió al gobierno estadounidense que revele «cuanto antes» la información sobre su actividad militar y biológica en los laboratorios de Ucrania.
«Exigimos que la parte estadounidense revele, cuanto antes, la información sobre la actividad militar y biológica en los laboratorios de Ucrania», reza el comunicado de la misión diplomática rusa.
Destacó que las acusaciones de EEUU sobre las supuestas violaciones por parte de Rusia de la Convención sobre Armas Químicas y la Convención sobre Armas Biológicas no tienen soportes «cuando el propio Washington no cumple con sus obligaciones en virtud de los acuerdos mencionados».
«Rusia tiene conocimiento fehaciente de que los grupos radicales ucranianos bajo control de los representantes de los servicios especiales estadounidenses han preparado varios escenarios potenciales del uso de sustancias químicas tóxicas para llevar a cabo diversos tipos de provocaciones contra la población civil», reza el comunicado.
Más temprano, Rusia, a través del Ministerio de Defensa, informó sobre nuevos detalles de documentos sobre los laboratorios biológicos secretos de la OTAN y Estados Unidos en Ucrania.
El portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, Ígor Konashénkov, señaló en una rueda de prensa que expertos rusos en defensa radiológica, química y biológica, han estudiado una serie de documentos originales que revelan los detalles de un proyecto secreto de Estados Unidos y la OTAN en Ucrania que investiga la transmisión de enfermedades de animales a los humanos.
El vocero ruso alertó que estos laboratorios estudian las condiciones en las que los procesos de transmisión puedan volverse inmanejables, causar daños económicos, y plantear riesgos para la seguridad alimentaria.
