Néstor Rivero Pérez

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El 3 de febrero de 1522 María López de Mendoza y Pacheco, conocida como María Pacheco, viuda del principal líder de la Revuelta de las Comunidades de Castilla (España), Juan de Padilla, se puso al frente del levantamiento popular de Toledo en contra del régimen monárquico de Carlos V, que habría de concluir la noche de este mismo día con la derrota de los insurrectos.

Empréstitos de un rey

En 1516 Carlos de Habbsburgo, nieto de los reyes católicos, y quien se encontraba en Alemania, será designado en 1516 como nuevo monarca de España, en sustitución de su madre Juana I de Castilla -quien había sido declarada demente por una junta de expertos-. Por entonces, el nuevo monarca no disfrutaba del descomunal patrimonio que le significará el oro azteca que ha de proporcionarle la conquista de Tenochtitlán por Hernán Cortés en 1520 y Francisco Pizarro en 1533 con el control del imperio inca y la plata del Perú. Así, apenas enterarse a comienzos de 1519 que con la muerte de su abuelo Maximiliano de Habsburgo se habrá de debatir el nombre de su sucesor, resuelve imponer pesados tributos para pagar a los electores del Sacro Imperio Germánico a objeto de que se le escoja como su sucesor. A ello se aúna la circunstancia de que Carlos designa en altos cargos en Castilla a personas de origen flamenco y de Gantes, siendo vistos como “extranjeros” por los castellanos.

Burgos, Valladolid y Toledo

Poseyendo estas tres ciudades de Castilla la Vieja buena parte de la fuerza económica de España, en razón de su actividad artesanal-industrial y el tejido y comercio de la lana, habíase formado en ellas, y también en otras localidades, se rebelan desde 1520 en contra de las políticas aplicadas por el nuevo monarca, iniciándose la Guerra de las Comunidades de Castilla, siendo que en dicho proceso asumió rol destacado la ciudad de Toledo. En esta ciudad destacaba la figura del hidalgo Juan de Padilla quien es puesto a la cabeza del movimiento protestatario, el cual había encontrado fuerte apoyo popular. Así, al tanto que Carlos se encontraba en Gantes para asegurar que le nombrase como titular del Sacro Imperio, Padilla se aboca a organizar las fuerzas que han de dar combate al ejército real, siendo reconocido como conductor de la rebelión.

Burgos deserta

Sin embargo, Adriano de Urecht, virrey de Castilla nombrado por Carlos V, inicia un recambio de la situación, cuando obtiene suficientes recursos financieros de la corona lusitana. Y ello le permite revertir la fuerza del levantamiento comunero con un mejor armamento de sus tropas y recambio de alianzas, lo que se da con la deserción de la burguesía de Burgos, la cual comenzó a ponderar tras un año de rebelión, el trastorno que dicha situación ocasionaba a su industria textil y de exportación, así como a la red de actividades conexas a la lana. Empero la revuelta que había comenzado como protesta contra los impuestos y extranjerismo de la Corona, se había tornado en rebelión antiseñorial de signo antifeudal.

María en rebelión

Y el declive del movimiento comunero, iniciado con el retiro de Burgos, tuvo su sello militar con la derrota de los insurrectos en Villalar el 23 de abril de 1521. Allí fue capturado Juan de Padilla, quien será decapitado al día siguiente. No obstante la revuelta tendrá un último episodio en Toledo, ciudad de donde su esposo era oriundo. Así, la última resistencia comunera tendrá lugar en Toledo, donde María Pacheco asumió el 3 de febrero de 1522 la jefatura del levantamiento. Y a pesar del fuerte ánimo de los toledanos, y tras duros combates de calle, la ciudad es tomada a sangre y fuego en horas de la noche, viéndose la Pacheco a huir, para mantenerse en Portugal hasta su muerte, en marzo de 1531.

Sinóptico

1817

Manuel Carlos Piar: importancia de Guayana

Este día el general Manuel Carlos Piar, quien operaba en la zona de Maripa (Guayana), hizo leer a sus tropas una comunicación remitida el 7 de diciembre anterior por el Libertador Simón Bolívar desde Haití.

En dicha misiva este último informa que está próximo a salir con rumbo a Venezuela “con una escuadra, municiones y armamento”.

A fines de noviembre de 1817 el general Piar había solicitado a JA Páez y Manuel Sedeño, unir todas las fuerzas patriotas para la toma de Guayana, región a la que distinguía como “la fortaleza de Venezuela (…) ella…nos ofrece recursos para proveernos de lo necesario (…). La ocupación de Guayana debe ser pues, con preferencia el objeto de nuestros esfuerzos” (Ibídem). El héroe del Juncal tras haber cruzado el Orinoco entre los días 20 y 21 de noviembre, avanza hacia Maripa, ocupándola.

Aunque inicialmente discrepaba de operar en Guayana, el Libertador se convencerá, semanas después, del acierto de Piar. El plan de Piar era cruzar el padre-río con apoyo de balsas y botes, para tomar la fortificada Angostura. Así, en marzo de 1817 se verá al Libertador cruzar el Orinoco para ponerse a la cabeza de las operaciones.

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