ONU: Haitianos viven entre la violencia  y el colapso económico

De acuerdo con ese organismo algunos reportes indican que la violación de mujeres y niñas de nueve años, por parte de miembros de bandas, buscan incitar el terror y vengarse de otros grupos rivales. Foto Internet.

VEA / Carlos Batatin

Testimonios recabados por el Fondo de Población de las Naciones Unidas, en la República de Haití, aseguran que a causa de la violencia generada por bandas criminales y por  la precariedad económica de sus habitantes, la vida de mujeres y niñas corren peligro por no poder recibir una adecuada atención sanitaria.

De acuerdo con un informe de la ONU en medio de la crisis que azota a esa nación, cerca de 85 mil  mujeres actualmente embarazadas, unas 30 mil darán a luz durante los próximos tres meses, muchos de esos embarazos han sido producto de las supervivientes de violencia sexual.

«Otros reportes indican la violación de mujeres y niñas de nueve años por parte de miembros de bandas que buscan incitar el terror y vengarse de otros grupos rivales», reseñó el portal www.news.un.org.

Según el Fondo de Población de las Naciones Unidas, más de 4 millones 900 mil  personas requieren de servicio médico, entre ellas, casi un millón 500 mil mujeres están en edad reproductiva.

Día tras día la realidad de los haitianos pasa por una economía al borde del colapso y del desplome de los servicios esenciales. Se mantienen encerrados en sus casas ante el fuego cruzado provocado por el aumento de la violencia de las bandas, las cuales  son responsables de asesinatos, secuestros, violaciones y del desplazamiento forzado de unos 17 mil residentes de la capital. También ese país mantiene el nivel de mortalidad materna más alto de América Latina y el Caribe.

Algo se está haciendo

El representante del Fondo de Población de las Naciones Unidas en la República de Haití, Saidou Kabore, detalló que se están ayudando a las supervivientes de la violencia de género, a buscar asistencia jurídica, psicosocial y médica, distribuyendo suministros sanitarios y lámparas solares en los lugares de desplazamiento, y evacuando a mujeres embarazadas con complicaciones, para que reciban atención obstétrica y neonatal de emergencia, detalló el informe de la ONU.

Kabore anunció que serán  desplegadas ocho clínicas móviles que trabajarán conjuntamente con los centros de salud locales, garantizando servicios de salud sexual y reproductiva para las mujeres y niñas atrapadas en zonas de difícil acceso. Además, se han distribuido cientos de kits de higiene femenina en cuatro centros para desplazados de la capital.

Igualmente detalló que «más allá de la respuesta inmediata urge un acceso seguro a los servicios de salud y fondos para prevenir los altos niveles de embarazos no deseados y las muertes maternas, así como para proteger a las mujeres y a las niñas de la violencia sexual».

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