Anuncios alentadores al país en medio de los ataques y sanciones imperiales
El autor es periodista de Diario Vea y analista político.
Jesús Moreno
Desde que el presidente constitucional Nicolás Maduro Moros presentó la memoria y cuenta de su gestión en 2021, se vienen fortaleciendo las noticias alentadoras, con respecto a la economía, el crecimiento y las buenas esperanzas para este 2022.
Las cifras reales las dará a conocer el Banco Central de Venezuela, manera que nosotros nos hacemos eco de lo que dijo el primer mandatario, porque sabemos que no va a engañar a nadie, cuando afirmó que en el primer semestre, un poco más, la economía del país había crecido en 4 % y el último trimestre lo había hecho en un 7 %, con el esfuerzo de todos los venezolanos, que nos decidimos a trabajar y a no depender del petróleo.
El crecimiento en el cultivo de rubros de gran consumo nacional, como maíz, arroz, papa, hortalizas, verduras, reactivación de industrias, la pesca, superó las metas propuestas.
Esto condujo al aumento del consumo en el comercio en general y así otros rubros y campos que estaban deprimidos desde hace años, reflejan grandes esperanzas de recuperación y de haber comenzado a salir de las brutales sanciones impuestas por Estados Unidos, a pedido de la oposición extremista y antipatria, donde AD, Voluntad Popular y Primero Justicia, llevan la vanguardia y el imaginario gobierno del señor Juan Guaidó, que se ha perdido en las nubes y solo se ve y solo se nombra porque Estados Unidos lo mantiene y lo financia con dinero de Venezuela.
En todo caso, lo más importante de todo, es que los venezolanos nos decidimos a trabajar y duro, si es necesario, para romper de verdad con la facilista dependencia impuesta a través del petróleo por unos 100 años.
El crecimiento económico por muy modesto que sea, es muy importante, porque significa que hay una nueva voluntad puesta en juego, y los venezolanos decidimos ser más propios de nosotros mismos y crear riqueza con el esfuerzo tenaz, y lo hemos empezado a lograr y no desmayaremos.
Aunque mejoremos la producción de petróleo, pues ya llegamos a un poco más del millón de barriles, la meta es alcanzar los dos millones este año; debemos estar vigilantes, para que su cultura económica y social no se vuelva a imponer y nos separe del trabajo creador, con su mundo de ilusiones y espejismos que manipulan los otros que se llevan el oro, aunque lo negro nos lo dejarán siempre para nosotros, algo hemos aprendido en 100 años, de manera que vacilar ahora no podemos.
Aprendimos que no debemos depender de nadie, sino solo de nuestro esfuerzo creador, y menos de los va y viene de una materia tan frágil que es manejada por grandes intereses como los de Rockefeller, que lo hacen para sus fines e intereses.
Tenemos 100 años de explotación de nuestro petróleo, el oro negro, donde el oro queda a los otros y lo negro a nosotros, y hoy estamos tan pobres como ayer, dependientes hasta la coronilla. La nueva actitud para el crecimiento económico nos dará prosperidad modesta pero segura, porque es hija del esfuerzo de todos los venezolanos y su tenacidad.
