Australiano viola a 11 mujeres y sus padres ofrecieron 20 mil dólares por su libertad bajo fianza

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El acusado alegó que sufría de una condición llamada sexsomnia, la cual se caracteriza por ser un trastorno que conlleva a una persona a realizar actos sexuales mientras duerme.Foto Internet

VEA /  Carlos Batatin

Un hombre, quien desde los 15 años de edad, comenzó a violar mujeres y fue acusado de agredir sexualmente a 11 féminas, fue liberado bajo fianza  por un juez del estado australiano Victoria a pesar de la oposición de la policía y los fiscales.

Los  padres del agresor sexual ofrecieron hasta 20 mil  dólares para garantizar su libertad de su hijo  y se comprometieron a que vivirían con ellos, aunque supuestamente  algunos de los delitos se produjeron en la casa de la familia.

De acuerdo con una reseña publicada por  la página www.redbolivision.tv.bo, las  acusaciones en su contra se conocieron luego  de que una mujer de 29 años denunciara que había sido violada por este sujeto en 2019.

Pocos días después, cuando resultó detenido, alegó ante las autoridades  que sufría de una condición llamada sexsomnia, la cual según con el Manual de Diagnóstico y Estadística de los Trastornos Mentales desde 2013, se caracteriza  por ser  un trastorno que conlleva a una persona a realizar actos sexuales mientras duerme.

El acusado presentó un  récord de sus antiguas parejas  a fin de que verificaran su versión. Durante las investigaciones, «la policía  descubrió una lista de 89 nombres en su teléfono celular  bajo los epígrafes de “sexo” y “relaciones” después de que una de las 11 mujeres denunciara al joven de 25 años por presuntas violaciones». Contactaron a 80 de las víctimas y 19 de ellas decidieron  formalizar la denunciar.

Posteriormente,  6 optaron  por  no emprender las acciones policiales, 2  todavía están considerando sus opciones y 11 declararon en su contra. Las presuntas agresiones se remontan al año  2011 y afectan a mujeres que en ese momento tenían entre 14 y 29 años.

El fiscal de la causa describió la conducta del  victimario  como un   comportamiento depredador y de acicalamiento que se remontaba al menos a diez años atrás, argumentando  que no podía compararlo con los 21 cargos de violación, asalto sexual e indecente y conducta imprudente con peligro de lesiones graves como algunos de los más graves que había visto en su carrera.

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