Califican de irregular detención de dos militantes de Corriente Bolívar y Zamora en el estado Táchira

VEA / Yonaski Moreno

La mañana del 17 de mayo del corriente hombres vestidos de civil, y armados, llegaron a la casa de Francys Vásquez, ubicada en Abejales, capital del municipio Libertador, estado Táchira, a bordo de una camioneta. En el lugar se encontraban Raúl José Marín Villarroel y Jonás Alberto Parra González, militantes de la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora, quienes fueron “detenidos” por estos.

La denuncia fue realizada por Evelyn Andrea Bañol y Francys Vásquez -familiares de Raúl- en visita realizada a Diario VEA. Relataron “todo sucedió tan rápido” que no les dio tiempo de procesar lo que ocurría o siquiera escuchar si los hombres tenían alguna demanda. Lo que sí tienen claro es que no estaban identificados. Dado que estaban armados, asumen que por ese motivo, Marín Villarroel y Parra González accedieron a subirse al vehículo.

Junto con ellos también se llevaron un automóvil y un teléfono propiedad de Evelyn Bañol, así como la moto de Raúl José, su esposo.

Durante conversación sostenida con este medio, Bañol explicó que el mismo día y tras lo que parecía ser un secuestro se dirigieron hasta la estación de la Policía de Abejales. Allí les informaron que debían esperar 72 horas. De ahí salieron al sector La Pedrera, donde Francys Vásquez visualizó la camioneta en la que fueron trasladados los luchadores sociales. “Nos llenamos de miedo, de nervios y nos escondimos. Fuimos a buscar a un compañero de trabajo de mi esposo para que nos acompañara. Cuando regresamos ya la camioneta no estaba”.

De inmediato, Vásquez se dirigió “hasta el punto de control, que nosotros llamamos ‘La trocha’ de La Pedrera”. Ahí consultó a los guardias si se encontraban pidiendo documentos a los vehículos que por ahí pasaban. Al recibir una respuesta positiva preguntó por la camioneta en la que era trasladado su yerno “y dijeron que ellos (los hombres armados) se habían identificado como la Dgcim (Dirección General de Contrainteligencia Militar)”, añadió.

Con esa información ambas mujeres iniciaron la búsqueda de Raúl y Jonas. El 18 de mayo se trasladaron a San Cristóbal, donde visitaron las sedes del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), de la Dgcim y del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). En ninguna les dieron razón de los retenidos, indicó.

Añadió que fue luego de visitar la Defensoría del Pueblo, y realizar la denuncia, que pudieron dar con los dos hombres. El día 19 de mayo el defensor les llamó e informó que se encontraban detenidos en la Dgcim. “Nosotros nos dirigimos hacia allá y no los pudimos ver ni nada”.

Fueron imputados

Los militantes de la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora fueron imputados por los delitos de terrorismo y asociación para delinquir, informó su abogado a Evelyn Bañol. “Ellos en el municipio lo que hacen es un trabajo social y político. No entendemos, si él es un luchador social por qué le imputan estos cargos”, expresó.

Destacó que en la sede del Dgcim se ha reseñado la detención de los luchadores sociales el día 19 de abril, y no el 17, cuando fueron trasladados por los hombres armados. “Ellos alegan que los detuvieron el día 19, y eso no es verdad. A mi esposo se lo llevaron el día 17 en horas de la mañana”, resaltó.

Además, contó que aunque la moto de Marín Villarroel sí se encuentra en la referida dirección, no hay rastros del vehículo de su propiedad. “No se sabe qué hicieron con mi carro”.

Piden celeridad en el proceso

Evelyn Andrea Bañol pidió celeridad en el proceso para que su esposo y su compañero puedan demostrar su inocencia. Precisó que en San Cristóbal no hay tribunal para la presentación en materia, por lo que los detenidos deberán ser trasladados a Caracas. Ese proceso tampoco ha iniciado.

“Queremos la celeridad del proceso, la atención oportuna del caso. Ellos tienen que ser trasladados a Caracas y queremos que sea lo más pronto posible, para que ellos puedan demostrar su inocencia porque no son ningunos terroristas”.

En nuestra sala de redacción consignaron copias de soportes escritos suscritos por organizaciones sociales que avalan la conducta de los dos (2) ciudadanos.