Edwin Drake: Sus exploraciones dieron inicio a la industria petrolera mundial
Néstor Rivero Pérez
El 29 de marzo de 1819 nació en Bethelehem, Pensilvania (EEUU), Edwin Drake, quien ha pasado a la historia como operador del primer pozo petrolero de la historia, operado con técnicas industriales y que diera paso a la explotación de hidrocarburos como rama industrial sobre la que han descansado en gran medida servicios como la iluminación, movilidad del tráfico automotor, calefacción de hogares y energización de máquinas en distintos ramos de la producción primaria y secundaria.
Matriz energética
De acuerdo a la Real Academia Española la energía se define como “La capacidad que tiene un sistema para realizar un trabajo” (https://dle.rae.es).
Así, la energía se expresa en forma de movimiento principalmente, de luz, calor u otras modalidades que permiten con el trabajo físico un cambio cualitativo, tal la cocción del alimento por efecto del calor, el desplazamiento de un cuerpo de un lugar a otro, o el despeje de un espacio oscuro debido a la iluminación artificial provocada por la lámpara del kerosene. Y la matriz energética ha evolucionado a lo largo de la historia y al ritmo de la civilización.
De este modo, la tracción animal de la carreta, dio paso a la energía del vapor de fines del siglo XVIII e inicios del XIX. Y a finales del siglo XIX, el vapor cedería su primacía al petróleo.
La lámpara de queroseno
Hasta donde se conoce en la historia escrita, y caracterizándose el queroseno o kerosene, como sustancia obtenida de la destilación del petróleo y, eventualmente del carbón, el primer uso de dicha sustancia para la iluminación nocturna tuvo lugar durante el siglo X dC en la antigua Persia (Irán) “cuando el médico y erudito Al-Razi hizo estudios acerca de la destilación del petróleo para ser utilizado como una forma de iluminación” (https://www.congresomexicanodelpetroleo.com). Se conoce que en distintos lugares de la América prehispánica comunidades aborígenes empleaban el mene para calafatear sus pequeñas embarcaciones y encendido de fogatas. Empero sería en el siglo XVIII cuando “cuando el geólogo canadiense Abraham Gesner hizo el primer estudio serio acerca de la utilidad de este líquido inflamable” (Ibídem). Antes de este recurso se empleó el aceite de ballena y la leña para la iluminación de ámbitos oscuros y calefacción.
Gesner y Bissell
Las investigaciones de Gesner le llevaron en 1846 a concebir, a partir del aprovechamiento de la hulla “un proceso para hacer un mejor combustible a partir del carbón” (Wikipedia). Cuatro años después este geólogo iniciaría la instalación de un sistema de alumbrado en Halifax (Canadá), viéndose favorecida dicha iniciativa en los años siguientes con el descubrimiento y explotación del petróleo, en EEUU, y de cuya destilación derivaría un primer producto comercializable, el kerosene. Por ese mismo tiempo, otro emprendedor del ramo petrolero en Pensilvania (EEUU), George Bissell, luego de observar en 1856 “imágenes de torres de perforación en busca de sal” tuvo la ocurrencia de emplear una técnica similar para la extracción del petróleo.
Edwin Drake
Como empleado de Bissell, Edwin Drake se dirigió, en 1858, a Titusville (Pensilvania). Y tras perforar por más de un año “en el valle de Oil Creek, el petróleo brotó espontáneamente de un pozo de 21 metros de profundidad” (https://energia.jcyl.es). En adelante el petróleo convertiría en multimillonarios a un pequeño círculo de empresarios entre quienes descollaba John Davison Rockefeller, al tiempo que Drake terminaría como un desconocido, muriendo a la edad de 61 años, “teniendo el estado de Pensilvania hacerse cargo de los gastos por su entierro”.
Sinóptico
1817
Carlos Manuel Piar cruza el Caroní
Este día el general Carlos Manuel Piar, quien poco antes había penetrado en Guayana procedente del sur de Barcelona, inicia una estratégica movilización de las fuerzas patriotas a su mando, las que cerca de un mes después se medirán en la Batalla de San Félix, con el ejército realista al mando del general Miguel de la Torre, a quien derrotarán. Será con el giro de Piar hacia el Caroní, y la toma de las Misiones, cuando los hechos tomen derrotero favorable a los patriotas, pues al posesionarse del granero de Guayana, Piar dejaba sin abastecimiento a Angostura y a los realistas sin el rico comercio que proveían las Misiones del Caroní. Tal fue la consecuencia de su traslado del Juncal -al sur de Barcelona- al Caruachi. En carta del 29 de marzo de 1817, dirigida a José Félix Blanco, Piar dice “Los enemigos desesperados de hambre han salido hoy de Angostura en un número de 800 infantes y 30 caballos sobre el General (Manuel) Cedeño, que se ha burlado de ellos. Sin comprometer en choque formal les he apresado algunos soldados, cargas y otras cosas”. Ciertamente, habiendo llegado días antes a Angostura, y careciendo de abastecimientos para la ciudad, La Torre se encaminó a las Misiones de Caroní para obtenerlos, viéndose frustrado y derrotado por Piar en San Félix.
