Jesús Moreno

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Puede ser una amenaza el referéndum presidencial, mientras se respeta la Constitución y las normas democráticas que lo rijen.

Más lo será de gobiernos como el de Nicolás Maduro que lleva implícita una revolución.

Por ahora el Consejo Nacional Electoral CNE, dio a conocer que la oposición no obtuvo ni siquiera dos por ciento de las firmas recogidas, que deben estar en el orden de 20% del electorado, y presentaron 42.000 mil firmas. El triunfo de Barinas los entusiasmó, donde el candidato chavista en la elección regional perdió por más de un millón de ventaja, pero se olvidaron que una cosa es Barinas y otra es Venezuela.

El pueblo no debe perder de vista esa amenaza para el futuro que como está planteada es legal y constitucional para cualquier nivel de elecciones. El pueblo debe mantenerse vigilante y consciente de esa alternativa. Siempre estará en juego el presidente y el proceso revolucionario total. Los logros alcanzados estarán en riesgo porque no es poco haber desplazado a la burguesía del poder central. Por lo cual no podemos olvidar las batallas que haya que librar, la amenaza del referéndum siempre estará y por eso la conciencia popular debe ser mayor si queremos tener patria libre, soberana y socialista.

Para derrotar cualquier amenaza, por ahora lejana, vamos a referirnos a una proclama del compañero Ho Chi Ming a los jóvenes de Vietnam en plena guerra en 1975 a los niños de su país a pesar de que el imperialismo de Estados Unidos empleaba en la lucha 6.500 soldados en contra del país asiático, les decía:

  • Amar a la patria y a su pueblo
  • Sean unidos y trabajadores
  • Sean estudiosos y disciplinados
  • Observen una estricta higiene
  • Sean modestos, sinceros y valientes.

Con este manifiesto se rendía homenaje al trabajo sincero en la fábrica y aún más en el campo. Aunque la proclama fue dirigida a los niños tenía que ser con los adultos que luchaban en los tres frentes.

En el caso venezolano es pertinente cuando tratamos de salir de las pesadillas de vivir del petróleo y su bonanza quebradiza a la que nos sometió el imperialismo en los últimos 100 años y aún estamos en la pobreza y nos clonó todos sus vicios y corruptelas. Siempre contra el trabajo creador y en especial el del campo.

El referéndum aunque es una amenaza derrotada, no es vencida, porque ya se verá dentro de dos años, como menos, cuál será la vida política de más de 20 gobernadores y más de 200 alcaldes, pero no somos futurólogos. Lo que sí sabemos es que el pueblo patriota no debe perder de vista la amenaza constitucional o cualquier nivel elegible.

El pueblo debe mantenerse alerta, vigilante, consciente, estudioso, ante esta alternativa porque siempre está en juego el proceso revolucionario completo; los logros y avances alcanzados serán objetivo y se buscará el poder central a como dé lugar, por lo cual no podemos olvidar esta batalla, no olvidar que Carabobo se dio en 1824 y ya para diciembre de 1830 el gran Libertador Simón Bolívar y su proyecto habían sido traicionados.

Así que prepararnos es la mejor fórmula, moralmente, y estudiosos para sostener los combates que nos toquen.

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