En la enseñanza deportiva la salud debe estar por encima de cualquier ambición

 VEA / Juan Cermeño

Mens sana in corpore sano (mente sana en un cuerpo sano) es una frase atribuida al italiano Décimo Junio Juvenal la cual, según algunos autores, se encuentra dentro del contexto de la filosofía griega sobre el cultivo de la mente, el cuerpo y el alma para alcanzar el equilibrio, por lo menos en ese sentido es tomada en el ámbito deportivo para la promoción del mismo, pero ya lamentablemente la meta no es el pretendido equilibrio sino el dinero y el deseo de ganar por encima de todas las cosas, sin importar las consecuencias, incluso para la salud.

Para algunos el objetivo es ganar, aunque sea a costa del deterioro del cuerpo y la mente, a esa conclusión llevan casos que afloran en la “práctica deportiva”, en los cuales los llamados a beneficiarse son los niños y adolescentes, pero al final resultan convertidos en víctimas, a veces bajo la mirada de padres y entrenadores.

En el curso de la semana Nathanael Pérez Nero, en el portal web dominicano diariolibre.com, reportó lo que hace presumir malas prácticas en academias de beisbol en ese país, afectando la salud de adolescentes, de acuerdo a la versión del cardiólogo pediátrico Richard Medina, por presunto uso de esteroide en menores afectándole los riñones.

Señala la nota que el galeno “encontró un patrón alarmante en el último año con adolescentes (15) sufriendo de insuficiencia renal aguda” y que el común denominador era que se trataba de prospectos para el beisbol, que se preparaban en programas con el fin de lograr ser firmados.

“Los dos más graves llegaron con insuficiencia renal grave; han estado en intensivo, se han dializado, uno mejoró la condición renal, pero el otro está en lista para trasplante de riñón de un donante porque le quemaron el riñón poniéndole esteroides”, le señaló el medico al periodista.

“Son muchachos que estuvieron sanos hasta el momento en que se les puso el medicamento”, manifestó Richard Medina, revelando que uno de los pacientes le confesó que le inyectaron Winstrol (Estanozolol), mientras que a su madre le habían dicho que se trataba de una “vitamina”, agregando que que “A un niño no hay forma de cómo ponerle un esteroide de esos”.

En  Dominicana las 30 organizaciones del beisbol de Grandes Ligas tiene academias, a las que son enviados prospectos de distintos países para su preparación con la intención de llevarlos a los equipos de las mismas, pero no todos lo consiguen, la mayoría se quedan en el camino.

“Una firma no vale la vida del hijo”, manifiesta el galeno Richard Medina, “ganarse dos o tres dólares no compensa la pérdida de un hijo. Alguien tiene que hacer un llamado porque es que están utilizando indiscriminadamente esteroides con muchachitos de 12, 13 y 14 años”.

Sobre los efectos de los esteroides tenemos que aumentan la masa muscular, así como la resistencia, disminuyen el cansancio y las lesiones. Ante todo esto Medina, quien jugó beisbol hasta su adolescencia pregunta “¿Cómo me justifica que un muchacho de 15 o 16 años este tirando 99 y 100 millas (por hora)”.

Como conclusión señala que “lo que ellos quieren lograr con los esteroides es como hacer crecer un pollo en 45 días y te lo hacen crecer”, pero en el caso de los pollos luego de ese crecimiento van al matadero.

Malos ejemplos

El mundo deportivo ha tenidos muchos malos ejemplos, uno de los más famosos es el ciclista estadounidense Lance Armstrong, amigo de los ahora ex presidentes de Estados Unidos Bill Clinton y George W. Bush, con quien salía a pedalear en uno de sus ranchos. Armstrong llegó a ganar siete ediciones del Tour de Francia, considerado la prueba ciclista por etapas más dura del calendario mundial.

Siempre se sospechó del uso de sustancias ilícitas por parte del pedalista estadounidense para conseguir tantas victorias, hasta que tuvo que aceptarlo y le fueron retirados todos los títulos conseguidos. Al final se justificó señalando que “Ganar el Tour de Francia sin doparse es imposible”, lo que es falso, pues consideremos que ninguno de los participantes en la competencia emplea sustancias prohibidas, entonces claro que ganará alguien que no se dopó.

Un viejo problema

Los de los niños con altas exigencias y riesgos en el deporte no se trata de algo nuevo, desde hace mucho tiempo han denunciado malos tratos en la formación de los deportistas para la búsqueda de contratos y no solo del beisbol, también en otras especialidades deportivas. En octubre de 2021, igualmente en República Dominicana, el portal cdndeportes.com.do publicó una entrevista al ex lanzador quisqueyano José Veras, quien se desempeñó en Grandes Ligas, entonces vicepresidente de la Asociación de Entrenadores de Beisbol Amateur (Asodeba), en la que se refería al tema.

“Hay niños de nueve, diez y once años que están en academias y eso es un abuso, porque el niño es obligado a entrenar desde las ocho de la mañana hasta las doce del mediodía y en la tarde tiene que ir al gimnasio, para ponerlo fuerte porque a los catorce años tiene que estar listo para un preacuerdo”, señala Veras, agregando que no les queda tiempo para estudiar.

Por su parte Amaury Polanco, presidente de Asodeba, refirió  que los preacuerdos para la firma de menores de edad para el beisbol constituyen “un tema doloso”.

Considera que “Los preacuerdos crean una incertidumbre que puede llevar al entrenador, a los padres y al mismo pelotero a la decepción y hasta el mismo suicidio, cuando a ti te dicen que se hizo un preacuerdo de un millón de dólares y ese entrenador, ese padre y el mismo joven están contando con esa firma, de que ya un equipo le dio su palabra, y cuando llega la hora ese equipo incumple su palabra (…) ese joven se derrumba totalmente”.

 Padres alertas

Hace dos años el cátcher venezolano de Grandes Ligas, Francisco Cervelli, colocó un video en sus redes sociales en el que se veía a un pequeño uniformado como receptor y con las manos amarradas a su espalda, que se retorcía de dolor por un golpe en las entrepiernas. “La verdad no entiendo qué están tratando de trabajar con este niño mediante esta forma de entrenamiento. Entiendo que el beisbol puede llegar a ser un deporte muy difícil, que requiere mucho esfuerzo, disciplina y dedicación, pero para mí esto es Maltrato físico y mental”, escribió entonces, sin señalar el lugar donde ocurrió lo denunciado.

Consideró que se debe dejar a los niños divertirse durante el proceso de aprendizaje. “Creo que a un niño sí se le puede enseñar lo que es el sacrificio en un deporte o en cualquier área de su vida, pero nunca de esta forma”, dijo Cervelli.

Es un llamado no solo para entrenadores, también para los padres que deben estar pendientes de los procesos de enseñanza de sus hijos y entender que sin salud no hay nada.