Mueren dos peruanas al ser arrastradas por oleaje de dos metro de altura
De acuerdo con las autoridades “las olas de más de dos metros arrastraron hacia mar adentro el vehículo en el que transitaban las dos damas cerca de la orilla”. Foto Internet.
VEA / Carlos Batatin
Como consecuencia de una erupción del volcán submarino Hunga-Tonga-Hunga-Ha’apai, en Tonga, en la República de Perú, dos mujeres perdieron la vida en horas de la tarde de este sábado tras ser arrastradas por el oleaje de dos metro de altura que se desencadenó en la playa de Naylamp, cerca de la ciudad noroccidental de Lambayeque.
De acuerdo a los datos ofrecido en los diarios locales y reseñados en la página de www.actualidad.rt.com, “las olas de más de dos metros arrastraron hacia mar adentro el vehículo en el que transitaban las dos damas cerca de la orilla”.
Los familiares de las víctimas trataron de brindarles primeros auxilios, sin embargo, el esfuerzo fue en vano. Los cuerpos de ambas víctimas fueron trasladados a la morgue de Chiclayo para poder continuar con las diligencias de acuerdo a ley.
También el fenómeno natural originó desbordamientos marítimos que provocaron daños en los negocios locales y embarcaciones.
Según con un reporte oficial, «los oleajes anómalos afectaron la costa de la provincia de Pisco, inundando las calles de la playa del Chaco, así como de las playas Lagunillas, San Andrés y La Cruz», mientras que por precaución, las autoridades suspendieron toda la actividad marítima en el área y colocaron sacos de arena para intentar frenar el avance del mar en las próximas horas.
Detalló uno de los diarios peruanos que Lorena Márquez Ismodes, responsable del Centro Nacional de Alerta de Tsunami, le aseguró a la población que no existe una alerta de tsunami y que se debía evitar infundir temor a la ciudadanía.
Las declaraciones de Márquez Ismodes fueron ratificadas por la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú, especificando que la erupción volcánica en Tonga «no genera tsunami en el litoral peruano» y aseguraron mantener una vigilancia constante.
