Luis Zárraga

[email protected]

Podemos decir hoy día que hay algunos sectores opositores que van a participar en las elecciones del venidero 21 de noviembre, pero que en realidad no lo van a hacer porque no creen en ese proceso comicial como vía de salida que persiguen los sectores democráticos para avanzar.

Son en verdad pazguatadas opositoras, donde ellos llaman a movilizarse pero a la nada, porque no pueden convocar más de 20 personas para sus andanzas. Estos pazguatos que se autoconvocan a sí mismos para pasmarse y admirar de los que ven u oyen creen que engañan a la mayoría del pueblo que quiere, antes que nada, resolver su situación económica y luego apoyar a quienes brinden mejores opciones políticas de participación en el proceso comicial convocado para finales de año.

A suscribir el Acuerdo de Salvación Nacional en 24 congresos regionales que se realizarán en cada uno de los estados del país, el próximo lunes 5 de julio, invitó a Juan Guaidó, pero para qué y para quién lo hace: “Es momento de la presión interna junto con la presión internacional. El 5 de julio es una fecha en la que debemos alzar la voz para mostrar nuestro sentir, por eso la invitación a suscribir y a formar parte del Acuerdo de Salvación Nacional ese día”. Claro, lo hace para intentar sumar algunas voces en el exterior, donde ya dan su causa como perdida y eso solo representa intentar sumar en la nada, es decir, patadas de ahogado o voces opositoras de las más radicales rechazadas por los venezolanos. Son pazguatadas de opositores que no hallan en qué palo ahorcarse.

Razón tiene el exsecretario de la MUD, Jesús «Chúo» Torrealba, quien considera que la decisión del gobierno de habilitar la tarjeta de la unidad es un aliciente y un compromiso nuevo para la oposición.

Pero como de todo hay en la viña del Señor dejó entrever una realidad que carcome a los radicales que dicen que van a participar, pero Chúo tiene razón al expresar: «tenemos la tarjeta de la alianza, lo que no tenemos es la alianza… Hoy ningún grupo de la lamentablemente fracturada oposición puede decir «yo soy la MUD».

Así son las cosas, como rezaba aquel destacado periodista Oscar Yáñez.

Las cosas son una sola, los radicales del desaparecido grupo G-4 se consumen entre ellos y los otros opositores democráticos sí van al proceso del 21 de noviembre, pero arrancarán con un hándicap en contra, que no es otro que el proceso de elecciones primarias convocado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) con la militancia decidiendo por las listas propuestas.

Diosdado Cabello dijo que la campaña de los candidatos a las primarias del 8 de agosto debe ser de altura; advirtió que quienes hayan incurrido en algún delito en el proceso de postulación serán sancionados.

“Quienes participan están claros en que el norte principal es la ética, es la coherencia revolucionaria, es la honestidad”, aseguró al comentar que se tomarán acciones de acuerdo al reglamento.

Indicó que donde más apoyo hubo fue en la elección de concejales. “Contabilizamos más de 16 millones en apoyo en todo el país”.

“Es un espacio extraordinario lo que se ha abierto en el PSUV, nuestra gente se acostumbrará a que este proceso sea rutinario”, dijo al resaltar que “ha prevalecido el interés de la revolución y del partido”.

Esa sí es democracia, no pazguatadas como los de siempre, los fracasados que intentan manipular a sectores minoritarios de nuestro pueblo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Este contenido está protegido !!