¡Qué compromiso! La imbatibilidad de Yulimar Rojas no tolera traspié

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El entrenador Winston Ascanio hace algunas consideraciones sobre las cuatro faltas cometidas por la atleta. Foto Internet

VEA / Juan Cermeño

La imbatibilidad de la venezolana Yulimar Rojas en el salto triple a escala mundial es tal que cualquier posibilidad de derrota es convertida en un acontecimiento, como ocurrió el miércoles 10 de agosto en Mónaco, donde tras los cuatro primeros intentos era última en la décima válida de la Liga Diamante de atletismo.

Cometió faltas en sus tres primeros intentos y en el cuarto, el primero válido, apenas dejó su huella a 14,09 metros, que no le servían para mejorar su posición. No obstante, en el quinto dejó su huella a 15,01m y falló el sexto, suficiente para cargar con la victoria.

El salto triple, como otras pruebas y especialidades, requiere de cálculos de manera automática y mentalmente, más bien intuición, refinados por la práctica constante. Así como un futbolista advierte la velocidad, acortar o alargar los pasos para encontrarse con el balón, igual en el beisbol el bateador efectúa ajustes ante un lanzamiento para poder conectar la pelota, también los saltadores o saltadoras de triple deben acoplar sus pasos y desplazamiento para aproximarse a la tabla, donde está el límite entre un salto válido o inválido, con el fin de evitar las faltas. Y todo eso tienen que hacerlo tratando de aprovechar el mayor el impulso y lo más cerca de esa frontera.

“Yulimar es una atleta élite y no debe cometer tantas faltas. Lo sucedido en Mónaco a lo mejor se debe a que la temporada está por terminar, la estamina (fortaleza física) de la atleta está disminuyendo, acaba de concluir el Mundial, hay una curva competitiva, el nivel viene bajando, eso hace que pueda cometer errores”, explica Winston Ascanio, entrenador venezolano de saltos, tratando de comprender lo sucedido con la venezolana.

Los programas de preparación son realizados fijando competencias como objetivo (en este caso el Mundial de Eugene), a la que él o la atleta debe llegar en el máximo (pico) de forma física y luego de la misma viene un descenso de condiciones, es a lo que se refiere Ascanio, aunque en la campaña de la criolla no son de extrañar dos o tres faltas en un torneo, quien con frecuencia pone de manifiesto que debe realizar mejoras técnicas, con todo y ser dueña de seis campeonatos mundiales, tres récords mundiales y dos medallas olímpicas (plata y oro).

“A lo mejor se relajó un poco. La brisa puede complicarle la carrera, también tenemos que se trataba de un escenario al aire libre y el público, el ruido pueden influir en la concentración de la atleta”, añade el entrenador.

En oportunidades puede observarse a las y los atletas, a la misma Yulimar antes de competir, contando los pasos desde la tabla hasta el punto donde iniciarán la carrera con el fin de tener una referencia, pero no siempre es suficiente.

Además, fallar los primeros tres intentos complica, pone presión para no repetir en los siguientes, lo que puede tener como resultado que él o la deportista tenga que sacrificar velocidad e impulso para evitar otra invalidación, muy distinto a tener un primer salto bueno, que da confianza y la posibilidad de ir por mayor distancia sin importar que se falle.

Los buenos y malos momentos suceden en las competencias, se gana y se pierde. En 2019 Yulimar tuvo la mejor marca del año, 15,11m en los Juegos Panamericanos de Lima, comandó el salto triple durante todo el calendario de la Liga Diamante, pero en la final no pudo pasar de 14,74m, siendo desplazada del primer lugar por la jamaicana Shanieka Ricketts con el hasta entonces mejor salto de su carrera deportiva, 14,93m. Sin duda una mala jornada para Rojas.

Una cosa que ha demostrado Yulimar es que nunca se da por vencida y en cada salto trata de mejorar el anterior, prueba de ello es que los tres récords mundiales que ha conseguido ocurrieron en el sexto y último intento. El 21 de febrero de 2020 en el torneo Villa de Madrid (X/14,65m/X/15,29m/X/15,43m, récord mundial bajo techo), la “X” significa falta. Luego, el 1 de agosto de 2021 en los Juegos Olímpicos de Tokio (15,41m/14,53m/X/15,25m/X/15,67m, récord mundial al aire libre y olímpico) y el 20 de marzo de este año en el Mundial de Belgrado (15,19m/X/15,04m/X/15,36m/15,74m, récord mundial en pista cubierta).

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