VEA / Yonaski Moreno

En Venezuela hay talento de sobra para crear, producir y satisfacer las necesidades del pueblo. Esa es la convicción de la diseñadora y confeccionista de trajes de baño y ropa deportiva, Sara Pérez, quien asegura que ese pensamiento fue forjado a partir de los esfuerzos del comandante Hugo Chávez por impulsar la producción nacional.

La emprendedora caraqueña rememora los discursos del carismático líder de la Revolución Bolivariana y atesora con gran cariño aquellos en los que incentivaba a los jóvenes a “hacer patria”. “Aquí en nuestro país podemos trabajar y crecer con nuestro emprendimiento, haciendo lo que nos apasiona. Siempre escuchaba los mensajes de Chávez, parte del impulso que tenemos los emprendedores ahora, parte de esa apuesta por el país, nacen de sus palabras”.

Las máquinas de coser, tijeras e hilo, se convirtieron en sus más grandes aliados los últimos años. Aunque desde niña había descubierto su pasión por la costura, el diseño y la moda, no fue hasta hace cuatro (4) años que decidió comenzar a crear su propia marca. Vio la oportunidad entre las máquinas de un gimnasio en el que trabaja como motivadora fitness.

Como a muchos otros venezolanos, los embates del bloqueo económico la hizo buscar otras alternativas que le permitieran llevar el pan a casa, donde siempre la esperan sus tres (3) hijos. “No podía quedarme sentada sin hacer nada. Me veo rodeada del mundo fitness, me doy cuenta de que para la gente que entrena es importante renovar sus prendas porque se desgastan muy rápido y ahí decido dar el salto”, relató en visita que realizó Diario VEA al gimnasio en el que aún trabaja asentado en la avenida Andrés Bello, Caracas.

Asegura “todos nos hemos visto afectados por el bloqueo” y expone que en su caso tuvo que vivir el desespero de no poder adquirir la materia prima para sus confecciones. Aunque al momento de iniciar contaba con dos máquinas de coser rectas, necesitaba adquirir una para realizar el acabado de las prensas. Este deseo se vio empañado por el bloqueo, pero luego, a través de BanMujer, obtuvo un crédito que le permitió cumplir con esa primera meta.

Con compromiso social

Sara también es defensora comunal de la mujer, certificada por el Instituto Nacional de la Mujer (Inamujer) en 2022. También se preparó como defensora de los niños,las niñas y adolescentes prestando servicio en la Fundación protectora de este sector adscrita al Gobierno de Distrito Capital (GDC). “Ese es un trabajo súper hermoso y del que no te puedes desprender nunca”, contó a Diario VEA.

Destacó que vincula todas las facetas de su vida con la premisa de jamás desistir, de accionar de inmediato, de resolver. “Si hay un pedido grande tiene que salir.Si se presenta una complicación con algún niño o alguna mujer no se puededilatar, en el momento hay que resolver”.

Hay momentos en que debe amanecer sentada frente a la máquina de coser, con un café hecho por su esposo, palabras de aliento y el apoyo de su familia como soporte. “Hay que hacerlo”, reafirma.

Esa convicción la acompaña en el trabajo social, sus vivencias lo ratifican. Recuerda con indignación una terrible escena que se cruzó en su camino. Iba rumbo a su casa junto con su familia, cuando en La Yaguara, parroquia Antímano, vio cómo una multitud se lanzaba sobre un par de adolescentes con palos, piedras y hasta un cuchillo.

Al ver la escena, despavorida saltó del carro y se interpuso entre la multitud y los jóvenes, recibiendo también algunas pedradas. Confirmó la edad de los muchachos, uno de ellos con tan solo 12 años, tras lo que se identificó como defensora, ante lo que la muchedumbre respondió alejándose. Aguardó al menos 40 minutos mientras que una de las representantes se presentaba en el lugar, luego los subió a su carro y los trasladó a un módulo policial cercano, donde explicó la situación.

La Casa-taller

Pérez vive en la parroquia caraqueña El Junquito. En su casa tiene un espacio destinado a las máquinas, telas, hilos y otros elementos destinados a la confección de las prendas de vestir. Elabora coloridos trajes de baño con pedrería y hermosas decoraciones, que son lucidos por quienes participan en competencias de fisicoculturismo.

Ella misma representa al Distrito Capital en la Federación Venezolana de Fisicoculturismo y fitness, en la categoría Wells Senior. Esta experiencia le brindó los conocimientos necesarios para elaborar las prendas cumpliendo con las características, medida y diseño requeridos en cada competencia.

Estar involucrada en el mundo fitness también le impulsó a crear sus propias prendas deportivas para dama, y más recientemente conjuntos para caballeros, que son probados por sus hijos, su esposo y su padre. “Incluyen mono y chaqueta. Como son productos más grandes requieren mayor inversión, por lo que debo tener los modelos específicos y trabajar bajo pedido, por ahora”.

Su meta es registrar su marca “Sara Vanessa Fitness” y tener su propia línea de ropa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Este contenido está protegido !!