Néstor Rivero Pérez

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El 25 de febrero de 1859, a sus 81 años falleció en Barquisimeto el prócer de la independencia venezolana y suramericana, Jacinto Lara, quien sobrevivió a las distintas campañas de la Guerra de Independencia desde 1810 hasta 1825, tanto en Venezuela, como luego en Nueva Granada, Ecuador y Perú. Luego de la Batalla de Ayacucho, ocupó funciones administrativas y militares a las órdenes del Libertador. Su nombre honra una importante entidad federal de Venezuela.

Desde 1810

Lara, quien nació en Carora en 1788, era primo del también prócer Pedro León Torres. Lara, quien intervino en los sucesos del 19 de abril de 1810, intervendrá como oficial en las distintas campañas desde 1811, entonces a las órdenes de Francisco de Miranda. Acompañó a Simón Bolívar en la Campaña Admirable; en 1816 combatirá junto al general Páez en El Yagual. En 1822 integra la División Grancolombiana que marcha a Perú.

Combatiente

Identificado con la independencia desde 1810, Lara se sumó a la Sociedad Patriótica creada por Francisco de Miranda, luego del retorno de este a Venezuela, incorporándose a las milicias de Araure y Ospino, siendo elevado a comandante. De acuerdo a Sonia Verenzuela, en el historial de Lara entre 1811 y 1824 destacan las jornadas bélicas de “Cerro del Morro, asedio de San Carlos (Cojedes), Cúcuta, Niquitao, Los Horcones y Taguanes, Sitio a Puerto Cabello, Bárbula, Trincheras, Vigirima y 1ª de Carabobo, El Yagual y Mucuritas; La Hogaza, Calabozo, Casanare; Junín y Ayacucho”
(http://venezuelaehistoria.blog).

El Ulises de América

En su épico canto La victoria de Junín, el poeta José Joaquín Olmedo realza la participación de Jacinto Lara en la jornada epónima del 6 de agosto de 1824. Allí Lara actuará como uno de los comandantes del batallón ‘Vencedor de Boyacá’, por lo cual Olmedo rememora “el nombre de Junín, Vargas su nombre / y vencedor el suyo con su Lara / en cien hazañas cada cual más clara”. Bolívar, en su epístola de contestación al bardo, haciendo las veces de crítico literario le indica “Ud hace de… Lara el Ulises de América”, siendo este uno de los pocos oficiales que preservó la vida combatiendo año a año, entre 1810 a 1824.

La montura de oro

El desempeño de Lara en la jornada de Ayacucho del 9 de diciembre de 1824, le hará acreedor al grado de General de División. Tanto Bolívar como Sucre eran sumamente exigentes para conceder altos grados en la milicia, contándose para 1824, la lista de generales de División de la Gran Colombia, en poco más de una decena. En agosto de 1825, al llegar el Libertador a Bolivia, recibe de sus autoridades una montura de oro y se la obsequia al Gran Mariscal de Ayacucho, y en el acto este último la pone en manos de Jacinto Lara; tal era la estima y admiración que los tres se profesaban.

A Cuba

A comienzos de 1827, Simón Bolívar ponderaba al general Lara, entonces en Lima, como uno de los jefes de la expedición que debía marchar al Caribe, bajo las órdenes de Antonio José de Sucre y José Antonio Páez, con miras a independizar Cuba y Puerto Rico. Sin embargo, dichos planes se vieron frustrados ante la obstrucción de oficiales antibolivarianos y adscritos al Batallón Junín, puntal de la proyectada empresa. Depuesto y apresado Lara, el “Junín” quedó en manos del santanderista José de Bustamante, opuesto a los planes de Bolívar. Luego de 1830, Jacinto Lara se radicará en su región natal, la provincia de Barquisimeto, cuya gobernación ejercerá entre 1843 y 1847.

Sinópticos
1778
José de San Martín

El Libertador de Chile, Protector de Perú y cuyo influjo resultó decisivo en la declaración de Independencia del Río de la Plata -acordada por el Congreso de Tucumán de 1816-, encarnó junto al Libertador Simón Bolívar el esfuerzo cimero por formar la Patria Grande suramericana. Su vocación emancipadora y anticolonial lo indujo a cruzar, en camilla, la Cordillera de los Andes durante 1817, para dar las Batallas de Chacabuco y Maipú, jornadas que darían su independencia a Chile. En 1822 se entrevistará con Bolívar en Guayaquil.

2011
Eneas Perdomo

Este día falleció en el Hospital Militar de Caracas, Eneas Perdomo, abanderado del canto y la composición típica nacional, centrada en los motivos llaneros. Del repertorio nativo, la canción “Fiesta en Elorza” encontró en Eneas su más eximio intérprete. Su versión de esta pieza, cuyo autor fue Eladio Tarife, dio a don Eneas reconocimientos tanto dentro como fuera del país, en lo que significa que esta pieza ha sido interpretada por vocalistas venezolanos y extranjeros en México, España, Colombia y otros países. “Fiesta en Elorza” fue declarada en 1991 Himno Popular del Municipio Rómulo Gallegos (Elorza, en Apure). Una vía pública y “una plaza con su busto” honran el nombre de Eneas Perdomo. Sin embargo, Eneas Perdomo en tanto creador, no solo dio a conocer en su voz obras de su autoría, sino que contribuyó como ninguno a difundir melodías de otros compositores criollos.

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