Happy Latin American female veterinarian checking the cattle at a livestock farm and smiling

Néstor Rivero Pérez

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El 21 de julio de cada año, Venezuela celebra el Día del Médico Veterinario, profesional abocado a la prevención, cuido y tratamientos de salud de las especies animales, muchas de las cuales constituyen desde hace milenios, componente decisivo de la dieta humana.

Algo de historia

De este modo, desde aves, pasando por especies marinas, hasta el ganado en sus distintas especies y familias, integran el objeto de estudio de quienes transcurren largos años de su vida en establos, parques zoológicos, centros de piscicultura laboratorios y departamentos de la industria de alimentos. Propiamente la palabra “veterinaria” proviene -si se sigue en la Roma del siglo II aC, a Catón el Viejo-, de la actividad de aquellas personas abocadas “al arte de curar a los veterianea o ‘bestias de carga’…” [Wikipedia]. Así, los “veterianea”, constituían el grupo de animales no aptos físicamente para grandes esfuerzos, envejecidos o reducidos en su salud, y a los cuales, como máximo rendimiento se les empleaba como apoyo en funciones de transporte. Ya antes de Catón, en 1900 aC, “el emperador budista de India, Asoka, ordenó lo siguiente: ‘En todas partes del reino se harán dos tipos de medicamentos, medicina para las personas y la medicina para animales. Cuando no hubiese hierbas curativas para las personas y animales, se ordena comprarlas y sembrarlas” [Ibídem].

En todo caso

Y más de cuatro mil años de historia registrada en cuanto al cuido y tratamiento, han servido para que en 1761 se inaugurase  en la Universidad de Lyon (Francia), bajo conducción de Claudet Bourgelat -autor del texto Elementos del arte veterinario, la primera Escuela Nacional de Veterinaria, institución que en los años siguientes sería emulada en Italia, Alemania y otros países europeos. Y en lo que va desde la fundación de esta primera especialidad en medicina animal, hasta el presente, los pensa y programas de estudio han ampliado y actualizado considerablemente su espectro, al abarcar entre otros aspectos, producción, prevención de enfermedades, transformación e industria de alimentos y comercio eficiente  con sus componentes específicos, tales como genética, enriquecimiento proteico, factores ambientales” [https://www.woah.org/es]. En tal sentido los servicios veterinarios atienden una función sustantiva en las sociedades modernas en las cuales la proteína animal es pieza primordial de la alimentación: La detección preventiva de enfermedades en las especies cuya carne o derivados llega a la mesa del comensal individual, la familia o cocina del restorante, ofreciendo con celeridad respuestas de caso, a los fines de contrarrestar los riesgos de morbilidad o resultado letal eventualmente provocados por la ingesta de productos que operen como vectores de la afección. De allí que se aspire a una formación integral del profesional de la veterinaria, y que posea “(…) una cultura general que permita comprender los mecanismos de gobernanza nacionales (legislación, cadena de mando, presupuesto, comunicación, organizaciones, normas internacionales. (…) es preciso que los veterinarios desarrollen un papel líder en estrategias de control en colaboración con todos los sectores pertinentes, en particular con el mundo medical” [Ibídem].

El 21 de julio

“Cada 21 de julio, los médicos veterinarios… celebran su día. Así fue determinado durante el I Congreso Grancolombiano de Médicos Veterinarios, llevado a cabo del 21 al 28 de julio del año 1946, en Caracas (…) los otros países celebran este día en fechas diferentes -el 10 de mayo en Colombia y en Panamá el 4 de octubre, día del patrono de los animales, San Francisco de Asís. Todos los 21 de julio -en Venezuela- los médicos veterinarios se reúnen para festejar y reflexionar sobre su desempeño, como profesionales a la orden de la socioeconomía, sanidad y producción animal. Implementar los estudios de Medicina Veterinaria en Venezuela, no fue algo fácil. Uno de sus precursores fue el doctor J. M. Vargas, quien logró en 1842 la creación de la Clase de Agricultura, Pastoría y Veterinaria. Pero no fue sino hasta 1938 que el presidente López Contreras decretó la creación de la Escuela Superior de Veterinaria en la ‘Hacienda Sosa’, ubicada en Caracas” [https://unellez.edu.ve].

Sinóptico

1966

Fabricio Ojeda

Este día apareció muerto en la sede del Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (SIFA), el periodista Fabricio Ojeda, el más destacado y valeroso líder popular del siglo XX venezolano, y quien presidiera la Junta Patriótica que entre 1957 y 1958 dirigió el ciclo insurreccional para el derrocamiento del general Marcos Pérez Jiménez. En 2017 sus restos fueron trasladados al Panteón Nacional. Honesto como ninguno, en 1959 y a la luz del triunfo de la Revolución Cubana, Fabricio hace una nueva lectura del tumultuoso ciclo protagonizado por el pueblo de Caracas el año anterior, radicalizando su postura crítica al bloque de poder surgido del Pacto de Punto Fijo.

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