Venezuela repudia femicidio contra artista Julieta Hernández: Fue una embajadora de la paz

VEA / Yonaski Moreno

El Ministerio del Poder Popular para la Cultura repudió el femicidio cometido contra la artista venezolana Julieta Hernández, en Brasil, y solicitó “castigo ejemplar para este abominable crimen”. Así queda expresado en un comunicado compartido por el titular del citado despacho, Ernesto Villegas.

El comunicado compartido en la red digital X @VillegasPoljak informa que el cuerpo de la víctima será repatriado en vuelo de Conviasa y las exequias están previstas para este viernes 12 de enero en Puerto Ordaz, estado Bolívar, donde reside su madre. Agradeció al Gobierno de Brasil y a las autoridades del estado de Amazonas, la colaboración para la repatriación de su cuerpo. “El Gobierno Bolivariano está en contacto con familiares de Julieta Hernández para coordinar apoyo en esta hora de dolor, tanto en Brasil como en Venezuela”, añade el texto.

“Venezuela pierde con Julieta Hernández una artista integral, expresión de lo afirmativo venezolano”, continúa el comunicado. Resalta que la artista de 38 años de edad egresó de la Universidad Central de Venezuela (UCV) como veterinaria con la distinción Summa cum laude. También fue fundadora de la Red de Payasas Venezolanas con estudios en Brasil sobre Teatro del Oprimido.

“Julieta fue una verdadera embajadora de la paz en Nuestra América. Ella desarrolló en Brasil intensos contactos con movimientos sociales de esa hermana nación suramericana, manteniendo siempre en alto su prédica feminista, el amor por la infancia, por los animales, por el derecho a sonreír y por la Venezuela Bolivariana”, expresa.

Asimismo, agradece al pueblo de Brasil y su dirigencia social los pronunciamientos y movilizaciones realizados desde el mismo momento en que Julieta desapareció con su inseparable bicicleta.

Crimen abominable

El cuerpo de Julieta fue encontrado el viernes 5 de enero a las afueras de la localidad de Presidente Figueiredo en el estado brasileño de Amazonas, tras dos (2) semanas desaparecida. Los responsables del crimen fueron identificados por las autoridades como Deliomara dos Anjos Santos, de 29 años, y Thiago da Silva, de 32 años.

De acuerdo con portal regional Portal do rubui, la artista fue brutalmente atacada por una pareja mientras viajaba por la región rumbo a Venezuela. El motivo del crimen fue el interés del sospechoso por el teléfono móvil de la víctima.

Expone el medio que el 23 de diciembre familiares y amigos de Julieta iniciaron su búsqueda al no conocer sobre su paradero desde el día 22 de diciembre. Relata el portal que el jefe delegado del 37º Distrito Integrado de Policía (DIP) en Presidente Figueiredo, Valdnei Silva, designó un equipo para investigar la desaparición. La investigación dio un giro crucial cuando la bicicleta de Julieta fue encontrada a orillas del río Urubuí por un civil. Tras el hallazgo fueron detenidos Thiago Agles da Silva, que intentaba fugarse, y Deliomara dos Anjos Santos, de 29 años, sospechosos de asesinato con posterior ocultamiento del cadáver.

Añade portaldourubui.com que la mujer declaró que su pareja, Thiago da Silva, tras los efectos del alcohol y las drogas amenazó a Julieta con un cuchillo, exigiéndole su teléfono celular. La artista venezolana fue arrastrada hasta la residencia de la pareja, donde fue atacada violentamente.

Deliomara dos Anjos Santos reveló que su pareja también abusó sexualmente a Julieta Hernández, acto que desató sus celos y por el cual decidió verter alcohol sobre ambos y prenderles fuego. Thiago logró apagar las llamas de su cuerpo y buscar atención médica, mientras que la mujer enardecida ahorcó a Julieta con una cuerda. El cuerpo de la artista fue enterrado en una tumba poco profunda en el patio trasero de la casa, envuelto en lona, ​​alfombra y follaje, refiere el portal brasileño.

Pareja involucrada en otro crimen

Registros policiales señalan que la pareja fue acusada de un acto similar en Manaos. Contó la víctima, citada por Portal do rubui, que fue llamada por su vecina para que la ayudara a mover una mesa en su domicilio. Al llegar al lugar fue sorprendida por Thiago, quien la agarró por el cuello con fuerza, exigiéndole que le transfiriera una alta cantidad de dinero, señalando que tenía una deuda con narcotraficantes locales. Durante este ataque, la víctima se desmayó y al recuperar el conocimiento logró escapar, saltó un muro y pidió ayuda a su suegro, quien inmediatamente llamó a la policía. Este caso es tratado como agresión y extorsión.