Economista advierte estallido social en Haití por situación

Más de 4 millones de haitianos padecen de inseguridad alimentaria, sumado a que la inflación está por el orden 29 %, mientras la violencia de las pandillas constituye otro freno a las actividades económicas. Foto Internet.

VEA / Carlos Batatin

De acuerdo con el economista Etzer Émile, en la República de Haití, están dadas las condiciones  para que en ese país se genere un estallido  o una ola de disturbios por parte de la población a fin de poder adquirir alimentos.

Advirtió el especialista que de continuar la situación tal cual se ha venido presentando, «con el aumento de la pobreza y la inflación, lo cual incrementa la inseguridad alimentaria que actualmente padecen más de 4 millones 300 mil haitianos, esas condiciones están dadas».

Sus declaraciones fueron transmitidas por Radio Métropole, recordando  que la inflación está por el orden  29 %, mientras la violencia de las pandillas constituye otro freno a las actividades económicas.

Detalló que según los datos del Instituto Haitiano de Estadísticas, productos como el pescado y el aceite aumentaron un 54 y 88%, respectivamente, lo cual amenaza con empobrecer aún más a la población y disparar las cifras de inseguridad alimentaria, reportó Prensa Latina.

Argumentó que miles de personas no se encuentran actualmente en las calles protestando ante esa situación, «porque  los actores políticos que otrora organizaron masivas manifestaciones son hoy funcionarios gubernamentales», a lo cual debe sumársele las acciones y el poderío de las pandillas que constituyen un freno a cualquier reivindicación popular.

Desde su punto de vista, «el Gobierno realmente no controla la situación, el motín puede ocurrir en cualquier momento». Agregó como ejemplo que, esta misma semana, «el primer ministro, Ariel Henry, alertó que el país experimenta su cuarto año de recesión económica con un crecimiento negativo de 0,4 por ciento, por lo cual se esperan tiempos difíciles».

Etzer Émile, también aseguró que el jefe de Gobierno había admitido  que las acciones programadas en el presupuesto vigente no pudieron ejecutarse, «lo cual afecta particularmente al sector agrícola que experimentó un descenso en el primer semestre del año».

Igualmente se refirió al descenso del Producto Interno Bruto(PIB),  «irá acompañado de un alto nivel inflacionario con sus graves consecuencias en lo social, además del incremento de los precios de los productos importados y locales, y la depreciación de la moneda nacional frente al dólar».

En su criterio, a lo anterior habría que sumársele lo previsto en  el proyecto de presupuesto 2022-2023, en cuanto a la caída de las transferencias internacionales y de la inversión extranjera.

error: Este contenido está protegido !!