¡Soberanía alimentaria! Proyecto científico “Pan pensado para nutrir” busca alternativas al modelo agroindustrial

VEA / Yonaski Moreno

La científica venezolana María Fernanda Correa, acompaña proyectos comunales de preparación de panes con harinas alternativas y rubros que salen directamente de conucos y traspatios, a través del proyecto “Pan pensado para nutrir”.

De acuerdo a la investigadora, la iniciativa surgió como una alternativa al modelo agroindustrial que además de sacrificar el valor nutricional de los alimentos, mantiene un proceso sostenido de “colonización del gusto, del saber y de la técnica”.

“Pensar el pan es un ejercicio de soberanía. Quitarnos el hambre con pan ‘malo’ solo nos mantiene enfermos/as”, aseguró Correa, citada por el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, a través de Twitter.

Como ejemplo, María Fernanda Correa explicó que el pan canilla, uno de los más populares en los hogares venezolanos, concentra un alto contenido de grasa o manteca vegetal hidrogenada, azúcares, y un exceso de levadura que solo aporta volumen. Estudios científicos han demostrado que comer todos los días pan hecho a base de trigo, bajo procesos de fermentación acelerada, puede elevar los triglicéridos y producir problemas inflamatorios, cardíacos, o diabetes, añade la cuenta @Mincyt_VE.

Las fórmulas del proyecto científico venezolano “Pan pensado para nutrir”, que trabajan algunas comunidades del país, junto a la investigadora Correa, tienen el gran valor nutricional de frutas tropicales, tubérculos huérfanos, como batata, ocumo, ñame y yuca, así como de raíces tuberosas, entre ellas, remolacha y zanahoria. En consecuencia, los panes que salen de los hornos de los comuneros son bajos en azúcar y grasa, y tienen un perfil nutricional elevado, con un alto contenido de fibra dietética saludable, calcio, fósforo y hierro.