Néstor Rivero Pérez

[email protected]

El 20 de agosto de 1820 se reunieron por primera vez, en la ciudad de San Cristóbal, comisionados del general español Pablo Morillo y representantes del Libertador Simón Bolívar, con el objeto de explorar términos para el cese de hostilidades. Si bien la pretensión de los comisionados de Morillo era que la parte venezolana adoptase la Constitución española -lo cual resultó inaceptable para Bolívar y los suyos-, la cita tuvo el mérito de abrir el ciclo de negociaciones que -en medio de dificultades propias de una guerra de diez años- debía conducir a la firma del Armisticio de Santa Ana de Trujillo y el Tratado de Regularización de la Guerra, del 26 de noviembre de 1820.

Territorios en guerra

No obstante, a la superioridad de los realistas en el suministro de armas y reforzamiento periódico con nuevos contingentes de la Península y los nativos que todavía simpatizaban con el régimen monárquico, ya para 1820 el bando republicano había obtenido avances indiscutibles y liberado la provincia de Guayana en 1817, el territorio de Nueva Granada y el Apure en 1819. Y, en la franja Atlántica de la Gran Colombia, la isla de Margarita, y parte de la costa oriental venezolana.

Igualmente se disputaba con las armas el territorio del Ecuador. Para ese año los realistas todavía dominaban de modo indiscutible una amplia franja de Occidente y el Centro de Venezuela, que cubría las provincias del Zulia, Coro y Boconó, en línea recta hasta Barinas; y al oriente hasta el río Unare. Como se observa, buena parte de los Andes estaba en manos patriotas. De allí que esta primera conferencia del 20 de agosto se celebra bajo banderas republicanas en San Cristóbal.

Contactos iniciales

Hacia 1820, en el marco de la Guerra de Independencia de Venezuela, ninguno de los dos bandos podía doblegar al adversario de manera inmediata. De este modo, compelido por su gobierno, el general Morillo, quien aún confiaba que con nuevos refuerzos podía someter a los patriotas de América y reconquistar los territorios liberados, toma la iniciativa para abrir conversaciones hacia un armisticio. Y envía comisionados a Guayana, a Apure y San Cristóbal, donde supone podría ubicarse al Jefe Supremo, Libertador Simón Bolívar.

Este por su parte comprende los beneficios que le reportarán al ejército patriota un cese temporal de hostilidades para reponer fuerzas y admite que se entablen conversaciones, siempre sobre la base del reconocimiento de la República por parte de los monarquistas.

Hacia el Armisticio

En este primer contacto de San Cristóbal del 20 de agosto no se llegó a ningún acuerdo sobre suspensión de hostilidades, sin embargo, las puertas no se cerraron para seguir conversando.

Luego de su inicial exposición de sometimiento de los independientes al gobierno español -desconociendo que ya existía una República con autoridades constituidas en el territorio liberado- los comisionados realistas, mediante una segunda nota del mismo 20 de agosto, señalan que el objeto de su encomienda es procurar “un acuerdo provisional que hiciese cesar la efusión de sangre”.

Las nuevas negociaciones continuarán tras dos meses de definiciones internas en el campamento realista acerca del objetivo central de las conversaciones y los escarceos entre uno y otro bando.

Morillo modificará su postura, al enviar, entre los nuevos comisionados, a Juan Toro, persona cercana a los afectos de Bolívar, y ya sin condicionar los tratos al sometimiento de los patriotas a España. De este modo en octubre siguiente se reanudan las negociaciones que concluirán con la firma del Armisticio y Tratado de Regularización de la Guerra de Santa Ana de Trujillo el 26 de noviembre de 1820.

Sinóptico

1778

Bernardo O’Higgins

Este día nació, en Chillán (Chile), Bernardo O’Higgins, figura central, al lado del General rioplatense José de San Martín, de la Gesta Emancipadora de su patria. O’Higgins, quien ocupó el cargo de Director Supremo de su país entre 1817 y 1823, patrocinó la empresa libertadora que José de San Martín ejecutaría en el Perú entre 1820 y 1822.

Hijo de don Ambrosio O’Higgins -exgobernador de Chile y luego virrey del Perú-, e Isabel Riquelme, a Bernardo se le impidió en su juventud el uso del apellido paterno, por cuanto las leyes españolas prohibían a sus altos funcionarios casarse con criollas en el territorio de su mando. Sin embargo, don Ambrosio siempre reconoció y protegió a su hijo. En el tiempo que, entre 1794 y 1801, transcurrió en Londres, O’Higgins trabó amistad con Francisco de Miranda, quien lo adentró en ideas emancipadoras y afilió a la Logia Lautaro, formada en Europa.

Desde su retorno a Chile, en 1803, O’Higgins inicia una cuidadosa labor sensibilizadora y de organización con tres propuestas: formar para Chile una élite con visión de nacionalidad en pro de la Independencia; funcionamiento de una Legislatura, y libertad de comercio, frente al monopolio peninsular.

1 pensamiento sobre “Tal día como hoy delegados de Bolívar y Morillo se reunieron por primera vez

  1. Compatriotas y camaradas es bienvenido algo de recordatorios de Historia, pero camaradas con el presente que vive el País y su ruptura económica,busquemos soluciones presentes y no caer en retóricas, ya nuestros ancestros vivieron lo suyo. Vivamos el presente es lo correcto.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Este contenido está protegido !!