VEA / Yuleidys Hernández Toledo

En octubre de 2019 el entonces candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, evidenció que el gobierno de Mauricio Macri, preparaba una intervención contra Venezuela.

«El Presidente tiene que decirlo, está preparando la ruptura de relaciones para poder intervenir. Espero, Presidente, que ningún soldado argentino termine en tierra venezolana», manifestó durante el debate presidencial celebrado el 13 de octubre de 2019, a solo 14 días de la primera vuelta de las elecciones. Sus palabras fueron reseñadas por el medio argentina Todo Noticias en un video difundido en Youtube.

Luego de las declaraciones de Fernández, y debido a la dinámica del debate, el presidente Macri no respondió sobre estos señalamientos.

El domingo 13 de febrero, un diario argentino reveló los planes militares que habría impulsado el expresidente Mauricio Macri en 2019, para invadir Venezuela. Dice la investigación realizada por el periodista Horacio Verbitsky, que «entre abril y julio 2019 el Ejército realizó el ejercicio Puma, que contemplaba la invasión a Venezuela. El ejercicio se ejecutó en siete sesiones en la guarnición de Campo de Mayo y por videoconferencia con la Brigada de Paracaidistas de Córdoba, la Brigada Mecanizada X de La Pampa y los comandos de la Fuerza de Operaciones Especiales, también de Córdoba. Incluyó además coordinación con unidades de la Armada y de la Fuerza Aérea». 

El ministro de la Defensa de Argentina, Jorge Taiana, tras anunciar que el Gobierno de Argentina ordenó una investigación sobre los planes del expresidente para invadir Venezuela, manifestó a la agencia estatal Télam, que «no le sorprende» que «el gobierno de Macri, que era un miembro activo del Grupo de Lima, haya tenido una actitud intervencionista en Venezuela».

En 2019 el régimen de Estados Unidos y varios de sus gobiernos satélites, con el apoyo del golpista Juan Guaidó, promovían incesantemente una invasión militar contra Venezuela. El 22 de febrero de ese año, con el respaldo del régimen colombiano presidido por Iván Duque, el autoproclamado «presidente encargado» intentó ingresar una supuesta «ayuda humanitaria», y que ese mismo día se comprobaría que se trataba de materiales para promover guarimbas en el país.

En aquel debate presidencial de octubre de 2019, Macri ratificó su apoyo a la presidencia inexistente del golpista Juan Guaidó, al tiempo que decía que el gobierno de Cambiemos había denunciado la supuesta violación de los derechos humanos ocurridas en Venezuela. «En esto no puede haber doble discurso, o sé está con la dictadura o se está con la democracia. La neutralidad es avalar la dictadura».

Ante ello, el hoy presidente de Argentina, Alberto Fernández, manifestó que a diferencia de Macri, él aspiraba que los problemas lo resolvieran los venezolanos. «No quiero intervenir en Venezuela».

Dos meses antes, en una entrevista con Canal 13, Alberto Fernández había dicho: «Creo que el problema de Venezuela no se resuelve con marines, no se resuelve apoyando una invasión; el problema de Venezuela se resuelve favoreciendo el mejoramiento de la calidad institucional y la convivencia democrática en Venezuela», reflejó el portal https://www.aa.com.tr/ en esa oportunidad.

En 2019, EE. UU. y gobiernos de la derecha intentaron invocar la activación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR). El 10 de septiembre de ese año, la ultraderecha criolla, apoyada por el autodenominado Grupo de Lima, al que Macri apoyaba, y la Organización de Estados Americanos (OEA), invocaron la activación del mencionado instrumento. La medida contra la nación fue solicitada por el entonces presidente de la Asamblea Nacional en desacato, el golpista Juan Guaidó.

El TIAR fue impuesto en la región por Estados Unidos en el marco de la Guerra Fría, y su propósito fue legitimar intervenciones militares en América Latina por razones ideológicas.

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