Defensoría del Pueblo contactó a refugiado vasco Asier Guridi Zaloña
Asier Guridi Zaloña inició una huelga de hambre el pasado 29 de marzo, para exigirle al Consulado General del Reino de España, que le otorgue su pasaporte para poder recobrar su identidad jurídica. Foto @PCV_Venezuela.
VEA / Carlos Batatin
Hasta las inmediaciones de la plaza La Castellana, a escasos metros del Consulado General del Reino de España, ubicado en Caracas, se trasladó la Defensora Delegada Área Metropolitana, doctora Pascualina Del Vecchio, para constatar la situación y estado de salud del refugiado vasco Asier Guridi Zaloña, quien se encuentra en huelga de hambre para exigir a los representantes de esa sede diplomática que le otorguen su pasaporte.
Durante la visita la defensora estuvo acompañada por el doctor Eliezer Rivas, jefe de investigación de la citada instancia, quienes conversaron con Guridi Zaloña sobre su lucha por el derecho a la identidad, la cual hasta la fecha es negada por el Estado español.
En diversas oportunidades, Asier Guridi Zaloña, ha declarado para Diario VEA, que su caso se lo planteó personalmente al propio cónsul, Juan José Buitrago, y «le solicité por escrito que me entregara de manera oficial la motivación o negativa del por qué no me entregaban mi pasaporte, el cual es fundamental para optar por una cédula de transeúnte».
De acuerdo con su versión “con solo negarme la identidad se me está privando del acceso al derecho al trabajo y una vida digna; el derecho a la personalidad jurídica, a la igualdad ante la ley; el derecho a casarme con mi pareja desde hace 17 años; el derecho y deber de representar y defender a mi hijo. Es decir, los derechos humanos inviolables e inherentes a los seres sin distinción».
Él al ver la negativa por parte de las autoridades españolas, el pasado 29 de marzo, decidió protestar a través de una huelga de hambre para hacer valer y respetar sus derechos de tener una identidad jurídica por parte del Consulado General del Reino de España.
Tras haber transcurrido un mes sin ingerir alimentos, el exiliado político vasco en condición de «Estatus de Refugio» comenzó a manifestar deterioro de su salud, porque según con sus declaraciones, comenzó a padecer reiterados episodios de mareos o amagos de pérdida de conciencia por variaciones con la tensión. Igualmente han comenzado las arcadas y vómitos de bilis o líquidos del estómago.
