Juan Manuel Cagigal

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Winston Churchill, desde los años 30 del siglo XX, insistió en el tema. El poder blando es muy poderoso y debemos usarlo para difundir por el mundo nuestros valores, principios y políticas. Con el poder blando se penetra las mentes de los pueblos y se les conquista; es más poderoso que una cadena. Los eslabones culturales tienen más fuerza que los eslabones de una cadena de acero.

Churchill designó al British Council como el gran instrumento de penetración del Reino Unido. Tan claro lo tenía que escribió, en 1943: “Los imperios del futuro son los imperios de la mente”.

Mediante la difusión de la cultura de la potencia colonial, se conquista a los pueblos. Diferentes mecanismos de poder blando utilizan las potencias. Así Francia tiene Alianza Francesa, Alemania tiene la organización Humboldt, Estados Unidos tiene a la USAID. No son las únicas organizaciones, pero esas son las bases, de donde parten y se guían todas las otras. Luego vienen numerosas ONG con diferentes nombres y misiones, pero todas confluyen al objetivo estratégico de dominar las mentes de los pueblos, dominar y controlar a los gobiernos y tomar los recursos que les interesen de los países controlados.

En Venezuela están funcionando, desde hace muchos años, antes de Hugo Chávez, esos instrumentos de poder blando. Pero hoy han sido fortalecidos con el objetivo de construir y fortalecer una fuerza cultural, mental, que cambie la mente a los venezolanos y los coloque culturalmente al servicio del imperialismo estadounidense o europeo, al fin y al cabo, Europa también es un colonizado de Estados Unidos, hoy cada vez más.

En el libro La CIA y la guerra fría cultural, de Frances Stonor Saunders, podemos leer historias sobre el control mediante el poder blando, detalles de las organizaciones creadas por la CIA para lograr esos objetivos. Y podemos leer que una de las grandes tareas que se planteó la CIA fue separar a la “izquierda no comunista” de los comunistas, para derrotar a la Unión Soviética en el terreno cultural, pues en aquellos años de la década del ’50 del siglo XX, la Unión Soviética dominaba ampliamente la intelectualidad del mundo que militaba al lado de la URSS. Y la CIA tuvo éxito. Lea, adquiera conocimientos al respecto.

Los venezolanos debemos tomar conciencia de la existencia y acción del poder blando. Esas ONG que cada vez son más, que se dedican a la parte “humanitaria”, reparten medicinas, dan cursos de yoga, de bailoterapia, gimnasios, gratis. No son gratis, pretenden dominar al país; allí está el pago, con nuestros recursos energéticos. Tomemos conciencia del asunto, no seamos inocentes, nuestros parientes originales lo pagaron muy caro, y luego seguimos pagando esa inocencia. ¡Basta ya de inocencia!

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