En Miami mujer mata a su esposo de 140 puñaladas
La víctima también presentó fractura craneal en el extremo derecho de su cabeza. Desde hace algún tiempo presentaba dificultad para caminar y movilizar sus manos. Foto Internet.
VEA / Carlos Batatin
Tras encontrar a su padrastro muerto en el piso, cubierto de sangre y con diversas heridas en todo su cuerpo, el hijo de la asesina llamó al 911 en estado de shock para denunciar lo sucedido. La mujer lo apuñaló 140 veces con el cuchillo que utilizaba a menudo en su cocina.
Este crimen contra la vida de Melvin Weller, de 62 años de edad, ocurrió en una zona turística de Palm Beach de la ciudad de Miami, Florida, en Estados Unidos, cuando su compañera sentimental Joan Burke, de 61 años, aun por razones desconocidas, aprovechó un descuido de su víctima. Tomó un filoso cuchillo y lo hirió fatalmente en 140 ocasiones.
De acuerdo con las autoridades y con la reseña publicada en la página digital www.encancha.cl, entre ellos existía un historial de violencia de pareja. Cuando llegó la policía y vio la escena del crimen, se encontró con Joan en el dormitorio principal. «Se mantenía despierta y consciente de la realidad sobre su cama. Sin embargo, al ser detallada por los funcionarios notaron que sus manos mostraban algunos cortes con arma blanca que se habría hecho presumiblemente mientras asesinaba a su cónyuge».
Los investigadores, luego de localizar el cadáver en la cocina, le preguntaron al hijastro «si alguien había entrado a la casa o si alguna persona se encontraba en ese momento en el lugar; el hombre guardó silencio, y después de unos segundos respondió: Mi madre».
Según el reporte policial, el techo, los muebles, las puertas de la cocina, todo estaba lleno de sangre, mientras que en el piso estaba el cuerpo de Melvin Weller. «Junto a él se encontraban varios cuchillos, y también diferentes artículos de limpieza, que indicarían el intento por esconder lo sucedido».
Además de las 140 puñaladas, presentó fractura craneal en el extremo derecho de su cabeza, la cual fue ejecutada por un fuerte golpe con el mango de un cuchillo carnicero. También se informó que desde hace un tiempo la víctima presentaba dificultad para caminar y movilizar sus manos.
Joan Burke actualmente se mantiene bajo custodia policial sin derecho a libertad bajo fianza. No ha querido confesar nada referido al homicidio, mientras que los investigadores no sospechan de más nadie, «ya que las pruebas indicarían que efectivamente fue ella quien provocó la muerte de su esposo».
