VEA / Yonaski Moreno

El animador venezolano Gilberto Correa fue recibido en la sede del Ministerio Público, luego que el pasado 17 de abril diera a conocer detalles sobre la denuncia formalizada contra Mariana Tania Gianmarco Ianni y denunciara una presunta incongruencia en quienes adelantan la investigación.

Correa fue recibido este jueves 20 de abril por el fiscal general de la República, Tarek William Saab, quien le informó sobre los avances de su denuncia contra la citada ciudadana, a quien la figura televisiva señala por maltratos, privación ilegítima de la libertad y aumento de su dosis médica, ocasionando un envenenamiento progresivo.

El encuentro fue reseñado por el titular del Ministerio Público a través de Twitter (@tarekwiliamsaab), recordando que Gianmarco Ianni fue acusada por el fiscal 16° del Área Metropolitana de Caracas, por los delitos de homicidio intencional en grado de tentativa y privación ilegítima de libertad.

Por su parte, el animador hizo uso de su cuenta Instagram, @soygilbertocorrea, para informar que el Fiscal atendió el llamado que realizara días antes desde la misma red digital. Destacó que se trató de “una extensa reunión”, donde William Saab “conversó conmigo sobre los avances de mi caso”.

El caso contra Gianmarco Ianni

La noche del lunes, Correa dio detalles del presunto envenenamiento del que fue víctima y por el que la ciudadana Mariana Tania Gianmarco Ianni comenzó a ser investigada desde finales de abril de 2022.

En un video, el animador señaló que la mujer fue contratada por su hija Karina Correa en 2020, para que se desempeñara como ama de llaves, puesto que vivía solo desde su divorcio y había sido diagnosticado con la enfermedad de Parkinson, lo que limita su movilidad.

Señaló que desde el año 2021 comenzó a vivir un constante maltrato psicológico, prohibiciones e imposiciones por parte de Gianmarco Ianni, por lo que llamó a una jueza de Paz del municipio Baruta, quien visitó su casa. También indicó que habló con su hija sobre la situación que estaba viviendo; al respecto, Karina Correa respondió «que era un mal necesario, que ella no podía ayudarme por no estar en el país, que ella no era juez, y nunca la despidió».

Añadió que desde el 9 de septiembre de 2020 le fue recetado por la neuróloga un tratamiento consistente en 25 mg de Quetiapina, denunciando que la acusada «me daba 300 mg en vez de los 25 mg que decía el informe».

Correa denunció incongruencias

En el mismo audiovisual, Correa dio a conocer que presentó ocho (8) testigos para respaldar su denuncia. Entre ellos se encuentra la neuróloga que le recetó los 25 mg de Quetiapina, así como tres (3) empleados que se negaron a suministrarle la alta dosis de medicamento que exigía la acusada.

También presentó como testigos al vigilante del edificio en el que reside y tres (3) amigos del medio, «que fueron testigos presenciales de los hechos y también me ayudaron a romper el silencio y a denunciar»; sin embargo, denunció, que si bien el Ministerio Público utilizó la declaración de dichas personas para la elaboración de la acusación fiscal, los mismos no fueron «promovidos al juicio oral y público, causando una incongruencia procesal, así como un daño a mi condición de víctima».

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