VEA / Ildegar Gil

Nuevamente, Juan Guaidó violó la legislación venezolana. Está en Colombia. La confirmación del viaje salió de su cuenta en Twitter @jguaido, en la que parece admitir que lo hizo por vías irregulares (trochas): «a pie», se puede leer en el comunicado fijado.

Este desplazamiento se perfila ilegal a todas luces, en virtud de que obvió la prohibición de salida del país emanada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), el 29 de enero de 2019.

En aquella ocasión, el TSJ decidió la medida en razón de la solicitud que en ese sentido formulara el Ministerio Público. Además de esta resolución, el máximo organismo también se pronunció aquel día sobre «…prohibición de enajenar y gravar los bienes de su propiedad y bloqueo e inmovilización de cuentas bancarias y/o cualquier otro instrumento financiero en el territorio venezolano».

El pedimento de la Fiscalía General de la República tuvo su origen en el inicio de una investigación preliminar contra Guaidó Márquez, quien seis (6) días antes había usurpado funciones de la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela, al autojuramentarse -en la vía pública-, como mandatario de la nación.

Fue ese año, 2019, cuando el exdiputado incurrió en la primera transgresión. Lo hizo el 22 de febrero para encabezar desde territorio neogranadino el intento de invasión al país, bajo la excusa de introducir ayuda humanitaria vía frontera, acción que tuvo como antesala el concierto denominado Live Aid Venezuela el mismo día.

Luego de retratarse con integrantes de la banda narcotraficantes Los Rastrojos, se unió a los presidentes Iván Duque (Colombia), Sebastián Piñera (Chile) y Mario Abdo Benítez (Paraguay), quienes prestaron sus imágenes e influencias para fomentar el derrocamiento del dignatario constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros.

En esta ocasión, como antes, recurrió al argumento (cada vez más desgastado) de luchar por Venezuela y, también como en otras oportunidades, lo hizo llamando a la unidad. Pero, contradictoriamente, vuelve a fallar a quienes aún lo escuchan, al no explicar cómo lograr tal unidad con las partes desperdigadas, dado que él mismo prefirió irse al extranjero.

Está previsto que este martes 25 de abril, Bogotá sea sede de una Conferencia Internacional convocada por el presidente Gustavo Petro, quien indicó el lunes 17 de abril que el objetivo de la reunión entre cancilleres de gobiernos europeos, de Estados Unidos, de países de América Latina, es «en pro de destrabar las negociaciones que realiza Venezuela, Estados Unidos, México y Noruega, con un objetivo: Que no haya sanciones y que haya mucha más democracia. Más democracia, cero sanciones, es el objetivo de la conferencia en Bogotá”.

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