Néstor Rivero Pérez

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El 12 de junio de 1917, tras una vida concentrada al arte musical, falleció en Nueva York (EE. UU.) la caraqueña Teresa Carreño, considerada como la mujer con mayor número de presentaciones a lo largo del planeta, en la historia del piano.

Prodigiosa entre patriarcas

En un tiempo en que los dones artísticos y literarios de la mujer eran colocados en segundo orden, debido a los rezagos patriarcales en los círculos ilustrados de América y Europa, la niña prodigio Teresita Carreño constituyó a partir de 1862 una auténtica sensación que midió su talento y disciplina con las grandes figuras del piano durante la segunda parte del siglo XIX y las dos primeras décadas del XX. “Más que una pianista y compositora, Teresa era una fuerza de la naturaleza: Como sentar a las cataratas del Niágara al piano. Le decían la “Liszt en faldas” y “La valquiria del piano”. (https://www.nacion.com). Su legado musical la parangona con las grandes compositoras europeas del siglo XIX.

Dedos que cantaban

Tras recibir las primeras lecciones de su padre, Teresa Carreño hizo evidente su precocidad para crear matices con las teclas. Hija del también músico Manuel Antonio Carreño y de Clorinda García de Sena del Toro, Teresita recibió este nombre en honor a su pariente María Teresa Rodríguez del Toro y Alaiza, la esposa de Simón Bolívar. Estuvo igualmente emparentada con Simón Carreño Rodríguez, y los próceres José María Carreño y Manuel García de Sena.

Concertista infatigable

En vida la artista -como recuerda Juan Francisco Sanz- “obtuvo… reconocimiento unánime de… grandes compositores… como Gioachinno Rossini, Franz Liszt, Edward Grieg, Berlioz, Johannes Brahms, Gounod o Camille Saint-Saëns (…) Tocó además… con las grandes orquestas del mundo… las filarmónicas de Berlín, New York o Boston” [http://www.scielo.org.ve]. Tal fue su dedicación, que muchos estiman que su fallecimiento se originó por agotamiento debido al excesivo
trabajo.

Piano y romanticismo

Habiendo entrado al país por vía de la literatura y el teatro, el romanticismo comenzó a posesionarse en la cuarta década del siglo XIX del gusto de intérpretes y compositores venezolanos. El piano, que ya se conocía desde la Colonia, impulsará un vigoroso movimiento musical, que según Walter Guido “culminará con Teresa Carreño”. En salones y academias de la capital, se había escuchado a notables pianistas nativos, como Felipe Larrazábal, José María Montero y Salvador
Llamozas. Los dos últimos abocados a la formación de pianistas. El piano, puede decirse, fue instrumento musical del romanticismo.

Vals de salón

El repertorio para piano de mediados del siglo XIX, dio nuevo curso al ambiente musical criollo, propiciando, como indica Guido: “La creación de fórmulas cadenciales que invariablemente oscilaban entre la tónica, la dominante y otros tonos vecinos. Es época de la melodía regida por un virtuosismo… donde destaca la repetición invariable de escalas rápidas”. En este ambiente descolla la pequeña Teresa, quien a sus 9 años viaja con su familia a EE. UU., en 1863. Invitada a una velada en la Casa Blanca, se vio aplaudida por el presidente Abraham Lincoln.

 

Autores preferidos

En la edición Nº 54 de la Revista Musical de Venezuela (mayo 2017), se nombra a los compositores por cuya obra más se inclinaba ejecutar Teresa en sus conciertos. “Cuando era niña le gustaban mucho las piezas de su maestro Gottschalk (…) ella siempre interpretó contemporáneos suyos… como Edward MacDowell”.

Obra para piano

Las creaciones pianísticas de Teresa responden, como dice J. F. Sanz “al género… de salón, consistente por lo general en piezas cortas en un solo movimiento de carácter ligero”. Se trata de piezas “destinadas al solaz de los asistentes en tertulias domésticas o salones de café”. De acuerdo a Sanz, “Quizás se pueda mencionar… a dos mujeres… para ser comparadas con la Carreño: Clara Schumann (1819-1896), esposa de Robert Schumann, y Fanny Mendelssohn (1805-1847), hermana de Félix Mendelssohn”.

 

Sinópticos
Día Mundial del Trabajo Infantil

168 millones de niños y niñas son víctimas del trabajo infantil. OIT impulsó esta efemérides contra el Trabajo Infantil para concienciar acerca del problema y aunar esfuerzos para erradicar esta realidad. Los niños deben dedicarse a estudiar y formarse como ciudadanos.

 

1791
Discurso de Etta Palm

Ante la Asamblea Federativa del Club de Amigos de la Verdad, durante la Revolución Francesa, la holandesa Etta Paln D’Alders fustiga la parcialización de las leyes en favor de los hombres, y a expensas de las mujeres. Etta fundó la Sociedad Patriótica, de Beneficencia y Amigos de la Verdad, club exclusivamente femenino.

1815
Bolívar pidió armas y oficiales

Desde Kingston (Jamaica), el Libertador Simón Bolívar urgió a Luis López Méndez, comisionado en Londres, a que apurase el envío de armamento, municiones y soldados con experiencia, con miras a reforzar el bando patriota en la Guerra de Independencia.

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