Vladimir Padrino advierte: Actitud desesperada de Colombia no deja de ser peligrosa
Existe un plan por encima del narcotráfico y la violencia colombiana, recordó. Foto Internet.
VEA / Yonaski Moreno
Colombia insiste en culpar al Gobierno Bolivariano de los hechos de violencia que tiñen de sangre y dolor al país neogranadino. Esta actitud fue calificada de “desesperada” por el ministro del Poder Popular para la Defensa, Vladimir Padrino López, quien advirtió que la postura “que asume la oligarquía colombiana no deja de ser peligrosa”.
Desde el Ministerio de Defensa de Colombia surgió una nueva acusación contra el país: “Los problemas de Arauca se originan en Venezuela”, compartió Padrino López, quien señaló que “más allá de la fementida y desgastada denuncia, existe un plan que pasa por encima del narcotráfico y la violencia colombiana”.
Añadió que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), continuará haciendo su trabajo en el estado Apure, donde combate a los grupos de Terroristas Armados Narcotraficantes Colombianos (Tancol). “permanecemos ¡ALERTAS!”, garantizó.
En rueda de prensa del pasado viernes 11 de febrero, el ministro leyó un informe publicado por la Organización de Naciones Unidas, correspondiente al año 2020, sobre los derechos humanos en Colombia, detallando que esa instancia multilateral “documentó 76 masacres que acabaron con las vidas de 292 personas, incluidas, 23 mujeres, 6 niñas, 18 niños, 7 indígenas y 16 afrodescendientes.
Seguidamente lamentó que en esa nación se vive una situación terrible, “la cual merece la atención de todos los órganos multilaterales y del sistema de Naciones Unidas, no solo por Colombia y su pueblo sobre todo, sino por el impacto que esto representa para el resto de los países de Latinoamérica y el Caribe”.
Al proseguir con el informe de la ONU, Padrino López dijo que también se verificó el asesinato de 73 antiguos integrantes de la FARC-EP, lo cual elevó a 248 homicidios de este tipo, tras la firma del Acuerdo de Paz, ocurrida en noviembre de 2016.
También narra las Naciones Unidas en su reporte, que en ese mismo año, la violencia habría alcanzado 94 eventos de desplazamiento masivo que afectaron a 25 mil 376 personas. “Asimismo, 74 mil 312 personas fueron objeto de confinamiento por parte de actores armados estatales y grupos criminales. Fíjense la tragedia que vive Colombia”.
